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POV LAUREN

-¡¡¡¡Pero yo no quiero ir al cole!!!!

-Sofi ya estuviste mucho de vacaciones... y tienes examen

-NOOOOO QUIERO

Camila estaba de ocho meses de embarazo, ya era enero y Sofía no llevaba bien lo de ir a clase. Debido al juicio de Brad y la mudanza (Ya que habíamos puesto en venta mi apartamento de soltera y ya estábamos instaladas en la casa), tuvimos que cambiarla de colegio y esto no le gustó a la pequeña. Llevaba unos días inventándose dolores para faltar a clase y yo ya no podía más, no sabía que hacer para que la niña entrase en razón. Camila era siempre "el poli malo" la que la castigaba pero con el embarazo estaba muy cansada para andar gritando y por ese motivo Sofi hacía lo que le venía en gana. Hasta hoy.

-Sofi por favor hazle caso a Lolo. Luego te recogemos y pasamos la tarde las tres juntas pero ahora tienes que ir a clase.- Camila estaba cansada de gritar y una punzada en su barriga hizo que parase en seco, agarrándose la barriga con cara de dolor.

- Camz ¿Estás bien?

-Creo que me voy a tumbar, lo de Sofi creo que me está afectando.- La acompañé hasta el sofá y luego me encargué yo de la pequeña.

-¡Sofía! ¡Se acabó este juego! Vámonos a la escuela.

-¡¡¡NOOOOO!!!

-Te quedan dos minutos para meter tu culo en el coche. Te estoy hablando muy enserio. No estoy de broma. Ya me cansaste.

- No voy a ir...-Me dijo con una mirada desafiante.

-¿No? Eso ya veremos.- Me despedí de Camz con mi besito mañanero y luego agarré fuerte de un brazo a Sofi y la arrastré hasta el garaje. Ella se retorcía y gritaba, no conseguía que yo me detuviese y por eso, me mordió.- ¡¡¡AHHH JODER SOFIA!!!!- La solté de golpe y vi que mi mano tenía la marca de sus dientes, las Cabello les gustaba morderme, aunque la pequeña fuese más agresiva. Me enfadé tanto que le di un tortazo en la cara. Nunca se me hubiese pasado por la cabeza pegarle pero no había dormido esa noche por los dolores de Camila, hoy tenía una reunión importante y mi hermano no estaba, tenía congreso en Viena y por último, la paciencia se me había agotado, quería que me hiciese caso.

-Sof...

Sus ojos se volvieron llorosos, me miró unos segundos con una mirada de decepción, yo siempre fui la que perdonaba todas sus travesuras y no se esperaba que reaccionase así. No me dijo nada, se metió en el coche, se ató el cinturón y todo el trayecto hasta la escuela fue en el más absoluto silencio. Yo por otra parte, me sentía fatal.

Al llegar a la escuela, intenté pedirle perdón y explicarle mi situación pero no me escuchó, se hizo con su mochila y se fue. Vi como entraba en la escuela, todos los niños iban con sus amigos, en cambio ella, estaba sola y yo sabía que era una niña que le gustaba hablar y por eso lo debía de estar pasando mal, porque nadie se acercaba a ella, era "La nueva". Todo el día estuve mal, al acabar la reunión me encerré en el despacho con comida que le había encargado a Keana y telefoneé a Camila.

-Hola Lolito... ¿Pasó algo?

-Qué no pasó querrás decir.- Suspiré recostándome sobre el sillón, mirando las vistas de la gran cristalera de mi despacho.

- No me asustes y dime.

-Hoy en el garaje perdí los papeles con tu hermana.

-Bueno yo hoy también, ya viste como me puse de tanto gritarle. No sé que le pasa últimamente, con lo que le gustaba la escuela...

- No pero yo... le di una bofetada.

-¿¡¿Qué?!? Pero si tú nunca le pegaste...

- Me perdí. Lo siento tanto... Durante todo el trayecto ni me miraba y mucho menos me hablaba.

Crying in the club (CAMREN ESPAÑOL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora