Capítulo 30

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21 Mayo
Pov. Maya.

— Estaba pensando...  —

— Ni lo pienses,  no voy a esconderme de nuevo.

— No iba a decir que te escondas Mya,  si no que estaba pensando conseguir una casa,  este departamento es muy pequeño.

— Estamos bien aquí,  tenemos tres cuartos,  y no estamos tan alejados de la ciudad,  como se que quieres — Nathan me guiña un ojo y me río,  Gianna esta durmiendo sobre él. — Luego por eso nuestra niña no quiere que su culo toque alguna cama o cuna,  la estas acostumbrando a dormir sobre tí.

— Me encanta que lo haga,  sentir sus latidos contra mi pecho me da paz — Sus dedos peinan el cabello de Gianna .

— Lo se,  pero luego ella no quiere que su cuerpo esta en algun lugar que no sea un cuerpo humano y sabes que su llanto no es precisamente un canto de ángeles — Nathan se ríe de mi y mueve a Gianna y se pone de pie.

— De acuerdo tu ganas Maya,  voy a llevar a mi hija a dormir en su cuna,  mírala no te da ternura tú propia hija — Su comentario me hace reír y golpeo su brazo cuando pasa junto a mi.

— Claro que me da ternura,  pero tu y yo también tenemos una vida — El me guiña un ojo y sale de nuestra habitación,  me miro en el espejo,  mis ojos están irritados por el llanto del día de ayer,  Nathan esta pasando el día con nosotras hoy, no ha mencionado nada sobre lo que paso el día de ayer,  solamente se quedó hasta tarde en la habitación de Gianna viéndola dormir, me estruja el corazón que el piense que lo quiera alejar de Gianna,  cosa que no haré, la niña ha tenido una conexión con el desde mi vientre.

Nathan regresa a la habitación y deja el monitor que aún tenemos de la bebé,  sus manos rodean mi cintura y me pega a su pecho.

— Te amo Maya — Sus ojos me ven através del espejo mientras sus manos se pierden debajo de mi blusa,  pasa la yema de su dedo sobre una marca de estria que me dejó el embarazo,  besa mi mejilla.

***
30 de Mayo

Estoy meciendo el cuerpo de Gianna mirando la ventana cuando suena el timbre,  Nathan no esta en el departamento y nadie más sabe que estamos aquí,  Gianna ya esta dormida así que la llevo hasta a la habitación, la pongo de manera suave en la cuna.

— No llores cariño,  te amo — Beso su mejilla y enciendo su monitor,  cuando salgo pongo bajo llave su habitación,  a mi paso doblo las fotos de ella,  recojo algunas cosas que están de ella en la sala y de nuevo se escucha el timbre,  respiro y me dirijo hacía ella. Abro la puerta porque no tenemos mirilla. 
En el momento que abro la puerta y lo veo mi respiración se vuelve irregular.

— ¿Que haces aquí?  — Pregunto en voz baja,  él solo me mira.

— Te busque por todos los lugares,  me sorprendió mucho saber que aún estas aquí,  pensé que Nathan te había llevado muy lejos despues de lo de...

— No te atrevas a hablar mal de Nathan en nuestra casa — Veo como su semblante cambia al escucharme decir eso.

— "Nuestra" Maya ¿En serio?  Con el tipo que me dijiste jugó contigo...

— Mira Grayson si llegaste hasta aquí sólo para decirme que Nathan está o jugó conmigo, por favor vete. — Trato de cerrar la puerta pero él pone la mano.

— No Maya vine hasta aquí porque necesito que me escuches y estoy diciendo muchas estupideses.

— Creí que dejé muy claro que no me importaba lo que tuvieras que decir — Grayson me mira y estoy tratando de mantener mis emociones tranquilas,  no quiero que note que aún afecta mi vida.

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