Kathia -No confundas el placer con amor- (+18)--@BlueRoseAwards

Capitulo 2

Aquí estoy en una habitación con cientos de artefactos que se utilizan para dar placer, con dos hombres que me devoran con la mirada.

Las manos de Leandro van directo al cierre de mi vestido, con un movimiento suave lo baja, lentamente mientras me da castos besos por mi espalda haciendo que unos gemidos se escapen de mi boca, la espalda es mi punto sensible, muerdo mi labio inferior para no gemir. Cuando termina, me lo saca de manera una lenta y sensual, Octavio quien solo se limita a observar, le encanta lo veo en sus ojos, que están llenos de deseó.

Estoy solo usando mis bragas ya que bracier no estoy usando no lo necesito con el vestido que estaba puesto, Octavio se lame los labios mientras me observa, Leandro se apega a mí, sus manos tocan mis pechos y un jadeo sale de mis labios.

-Vamos-me susurra al oído y me hace caminar, nos hasercamos a Octavio quien no se mueve.

-Desnúdame-dice Octavio, con una sonrisa, de manera inmediata me acerco a él, me desahogo de su camiseta, besos sus labios de manera apasionada y termino chupándole el labio inferior.

Mis labios van bajando por su cuello, pechos hasta llegar a su abdomen dejando rastro de mis labios por todo, me arrodilló y desabotono su pantalón, los bajo al igual que su boxer dejándolo totalmente desnudo.

Su pene está totalmente recto, con mi mano lo acarició de manera lenta y suave, escucho unos pequeños gemidos de placer de Octavio, cuando estoy apunto de meter su pene en mi boca, una manos me sujetan de los hombres haciendo que me levanté, son las manos de Leandro.

-Tranquila, ten paciencia-me susurra y la forma en que lo hace, me calienta.

-Ya no aguanto más, los deseó dentro de mí ya-digo mientras mi respiración se hace más pesada, los quiero dentro de mí.

-Date vuelta-ordena Leandro y no se porque pero me está gustando que me dé órdenes. Hago lo que me dice, mis ojos se conectan con esos presiosos ojos azules, que están tan llenos de deseó igual que yo- Tus manos al frente-ordena y obedesco, me coloco una esposas, alza mis manos esposadas y una cosa baja del techo, se detiene Leandro sujeta las esposas al techo.

Estoy prácticamente colgando del techo, Leandro me sonríe con malicia.

-Que empieze el juego-dice sonriente, camina y se pierde tras de mi, Octavio aparece delante de mí desnudó y listo para follar de solo observarlo siento que estoy húmeda, lo quiero dentro de mí.

-Vamos hacer disfrutar preciosa-me dice antes de que sus labios choquen con los míos, chupa mis labios los muerdes, mientras su mano se pierde entre mis piernas, toca mi sexo el cual palpita de deseó.

-Estas tan húmeda preciosa como siempre-susurro contra mis labios, su labios bajan por mi cuello mis pechos, dios mis pechos los chupa de esa manera que me enloquece, mis gemidos suenan por la habitación y mi sexo palpita por él.

Ropero mis bragas con un solo movimiento mientras sigue jugando con mis pechos y siento como dos dedos entran en mi interior, los mete y saca haciendo que mi cuerpo arda ¡Dios! como lo deseó, mi cuerpo arde no puedo mover mis brazos intento pero no puedo esto hace que el deseo que tenga crezca, es tan exitante siento que voy a explotar, me puedo correr en esta posición.

Los dedos de Octavio se mueven en mi interior dentro, fuera y toca mi clítoris haciendo que mis gemidos sean más fuertes, su boca no da tregua chupa mis pezones los cuales están duros como la roca.

Mi cuerpo arde y yo me muevo, como puedo para soportar el placer que me da, pero no puedo mover mucho. De la nada mi vista se topa con la mirada penetrante de Leandro quien nos observa, está totalmente desnudo dios si que tiene un cuerpo y su amiguito dios, no está nada mal, que digo na mal, es perfecto gancho largó, Dios ya lo quiero dentro de mí.