Insignificant.

Play date.

Al salir de clases, Camila se fue con Austin por su camino, mientras que Frank y Jamia se fueron a comer a la cafetería.

Bueno, Frank hablaría, porque no tenía dinero para comprarse la comida.

[...]

Sentados en la cafetería, hablando de todo y nada... era como una cita cutre que empezaba por una comida nada romántica en la cafetería. Aunque eso no parecía importarle a Jamia, quien reía mientras comía y comía mientras hablaba con la boca llena.

Parecía ser como: "la chica perfecta" de esas que sólo aparecen una vez en la vida... de esas que sientes que hay conexión desde el primer momento, que coincidís en todo; que es guapa e inteligente; que le gusta la buena música; de esas que sonríen e iluminan toda una sala...

Frank era bisexual (algo que prefería guardarse para sí mismo), aunque le atraían más los chicos. Era como su pequeño secreto.
Lo descubrió cuando iba a clases de guitarra y tuvo que pagarle a su profesor con (como él decía): "una buena mamada"

Aunque sí, las chicas también le atraían... y si se trataba de Jamia Néstor aún más.

La pelinegra no era nada femenina; vestía con sudaderas de grupos pasados, se recogía el cabello en una cola, llevaba pantalones algo desgastados, hablaba con la boca llena, su risa era algo extraña, y no iba tan maquillada como las otras chicas... y para Frank, eso era perfecto. Le recordaba mucho a él... de hecho... también era bisexual o algo así le comentó.

La comida no-romántica, fue bastante bien. Se conocieron aún más, tuvieron oportunidad de hablar de tantas cosas... y en todas coincidían...

Lo mejor de la comida fue, sin duda: no haberse topado con los Way.

Frank habría asegurado que Gerard Way o alguno de sus seguidores les habría humillado, tirado algo, o incluso insultado. Pero no, habían estado en la mesa de los chicos importantes, en su mundo, como si los demás no existieran... y eso le pareció perfecto.

[...]

Salieron de la cafetería riéndose como si se conocieran de toda la vida. Comenzaron a dirigirse al aula de música sin parar de hablar de cómics.

Detrás de ellos, iba Gerard Way, escuchando toda su conversación. No es que le interesara... simplemente se aburría y tenía que dirigirse al mismo sitio que esos dos.

Quería interrumpir la conversación, pues nadie sabía más de cómics que él... pero eso le haría quedar como un friki que interactúa con otros dos frikis que discuten de frikadas. Por eso se mantuvo callado, caminando en silencio hasta el aula de música.

[...]

La señorita Angy les indicó que tomaran asiento.

–chicos... se me ha ocurrido una GRAN idea.– comentó la señora con una enorme sonrisa en su rostro. Parecía inocente... parecía.– ¡ESCOGED PAREJAS!– gritó de repente, haciendo sobresaltar a todo el mundo en la sala.

El revuelo que se formó en la sala no fue normal, los únicos que no se movieron fueron Frank, Jamia y Gerard.

Todos acabaron emparejados, incluso Jimmy y Kitty... todos menos ellos tres. Eso era malo... muy, muy malo.

–Frank... tu pareja...

–¡Jamia! Sí, Jam...– gritó el chico interrumpiendo a la profesora y señalando a la pelinegra de su lado.

–oh... lo siento, pero ella no está apuntada a clases extraesxolares... es como una invitada para hoy.– le explicó la profesora.– entonces, tienes que ponerte con...– le susurró aquello, para luego señalarle al pelinegro.