La visita al museo había terminado, solo faltaba ir al zoológico el cual estaba a unos diez minutos del museo. Al llegar al zoológico todos bajaron y comenzaron una excursión libre, solo tenían que estar a las seis de la tarde en el autobús, de lo contrario, se quedarían a dormir con los tigres y era más que obvio que nadie quería eso.
Caroline estaba con Ashley, ambas se tomaron fotos con algunos animales y juntas para luego subirlas a sus redes sociales, una visita como esta no podía quedarse sin fotos, de hecho, ya estaban pensando los hashtag's que usarían, como #loveanimals y #zoo.
Al llegar la hora indicada, todos se encontraban sentados en el autobús, Liam estaba tomando lista para comprobar que todos estuvieran, cuando terminó, el autobús arrancó para regresar a Claymont. Todos habían disfrutado el viaje, todo había salido perfecto, ¿qué es lo que podía salir mal ahora? Que el autobús se descomponga en el camino y de noche, y es exactamente lo que sucedió, los demás autobuses estaban bien y continuaron su camino, pero precisamente el autobús donde estaba Caroline y Liam se había descompuesto.
— ¿Por qué se detuvo el autobús? —preguntó un chico al profesor de historia.
—No tenemos idea, en este preciso momento lo sabremos, así que mantengan la calma y esperen en su lugar —ordenó el profesor.
Todos se encontraban desconcentrados con lo que había sucedió, Liam estaba hablando con el director de la escuela y el maestro estaba con el chofer viendo la falla que el autobús presentaba.
—Algo se averió, pero no puedo ver qué es, además ya es noche, ya no se podrán conseguir piezas a esta hora —anunció el chofer.
— ¿Qué fue lo que te dijo el director Liam? —preguntó el profesor.
—Que pasemos la noche en un hotel, y mañana cuando arreglen el autobús nos regresamos.
—De acuerdo, subiré con los chicos para informarles.
Todos estaban hablando y gritando entre sí, así que el profesor gritó para que todos le prestaran atención.
— ¡Guarden silencio!
Ya que todos guardaron silencio volvió hablar.
—El autobús se descompuso, ya es tarde para que un mecánico venga a repararlo. El director decidió que la solución es pasar la noche en un hotel y esperar a mañana.
Algunos alumnos gritaron alegres y otros de tristeza, era un hotel y treinta alumnos con las hormonas en revolución, ¿qué podía suceder? Demasiadas cosas.
—Salgan todos, no olviden sus mochilas, sigan a Liam y a mí, no se pierdan. El hotel está a menos de un cuadra y sí, caminaremos.
Todos los alumnos bajaron del autobús y comenzaron a caminar, la noche complementaba obscura los rodeaba, este suceso parecía una escena de terror, pero al estar muchas personas no se sentía tan terrorífico.
—Este es —señaló el profesor el hotel... que más bien, era un motel.
Y todos saben que la calidad baja con el simple hecho de cambiar la "h" por la "m".
—Esperen en recepción, ahí se les darán las demás indicaciones —ordenó Liam.
Todos entraron y se quedaron en la recepción como había dicho Liam. El profesor y Liam fueron los encargados de rentar las habitaciones, al terminar se acercaron al grupo de estudiantes.
—Solo hay seis habitaciones disponibles, lo que significa que compartirán las habitaciones con más personas, serán cinco personas por habitación.
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Love Games ©
Teen FictionCaroline Cárter es una chica que tiene sola una cosa en mente, venganza. La devastación empieza cuando la mejor amiga de Caroline, Ashley es herida por un chico: el guapo y genial capitán del equipo de fútbol americano de la escuela, Liam West. Amb...