La navidad es una festividad que celebra una vez al año, en la cual disfrutas tiempo con tus familiares, recibes regalos y pasas una noche maravillosa, cada familia festeja de una manera diferente; Como la familia de Caroline, sus padres y ella se quedan en su casa, hacen una cena para tres y miran las mismas películas de navidad que pasan año tras año en la noche, ella no invita a su mejor amiga, ya que se va fuera de la ciudad con unos familiares, por otro lado, Liam como todo los años viajaría a la casa de sus abuelos... Este año la celebración sería totalmente diferente para todos.
Claro que sería diferente, para empezar el día, la familia de Liam había perdido el vuelo y no podrían ir a la casa de sus abuelos, porque el próximo vuelo disponible era dentro de cuatro días, así que por primera vez pasarían la navidad en su hogar, aunque Liam no lo haría ya que estaba enojado con sus padres por haber perdido el vuelo, así que decidió ir a la casa de Caroline a pasar la noche con ella, claro si se encontraba en su casa, tomó el regalo que tenía planeado dárselo cuando regresara de su viaje, le dijo a sus padres que se iría y fue lo más rápido posible a la casa de Caroline.
En la casa de Caroline el ambiente era agradable, los padres de ella estaban preparando la cena y Caroline estaba hablando por teléfono con Ashley.
—Me alegro que la estés pasando bien —Se alegró Caroline caminado alrededor de su habitación.
—Yo igual, lamento no estar contigo —lamentó a través del teléfono.
—Caroline, un chico te estaba buscando —avisó el padre de ella en la puerta de su habitación.
—Dile que ya bajo —dijo a su padre, esperó a que él se marchara y continúo hablando con Ashley—. Me tengo que ir, alguien me estaba buscando.
—¿Liam? —preguntó Ashley curiosa.
—No, según yo, él está en la casa de sus abuelos, la cual queda a miles de kilómetros.
—De acuerdo, baja a ver quién es, mañana continuamos hablando, me saludas a tus padres.
—Igual tú, y por cierto, feliz navidad —deseó colgando el teléfono.
Caroline bajo de su habitación y se dio una gran sorpresa al ver al chico que estaba sentando en el sofá con un regalo.
—Liam, ¿no estabas en la casa de tus abuelos? —interrogó acercándose a aquel muchacho.
—Se suponía, pero hemos perdido el vuelo y pensé que podría, bueno, si tú quieres, pasar la noche aquí.
—Yo... —Caroline se encontraba confundida, no sabía que responder, pero después de pensarlo por uno segundo, finalmente lo hizo—. De acuerdo.
—Tenía planeado dártelo cuando regresara, pero ya estamos juntos, así que toma —Entregó el chico el regalo a Caroline.
—Espera —Detuvo antes de tomarlo—, yo también tengo un regalo, subiré por él.
Caroline subió a su habitación, tomó el regalo que tenía la de etiqueta de Liam y bajó, ya en la sala, se sentó a un lado de él y se entregaron los regalos.
—Abrámoslos —animó Liam.
Ambos comenzaron a arrancar el papel de regalo y se dieron cuenta una gran sorpresa al ver el regalo del otro, los dos se habían regalado un suéter.
—¡Estamos conectados! —exclamó Liam riendo.
—Al menos yo lo hice con mis manos —comentó Caroline.
—¿Enserio? Esta etiqueta que dice "Made in China" dice lo contrario.
—Trate de hacerlo, pero el resultado final fue un suéter sin cuello, ¿cómo te ibas a poner eso?
—¿Sabes? Prefiero el hecho en china —aceptó mientras ambos reían.
—Lamento interrumpir las risas, pero ¿me harían el favor de ir al supermercado a comprar unas cosas que hacen falta para la cena? —dijo la madre de Caroline.
—¿Quieres ir? —preguntó Caroline dirigiéndose a Liam.
—De acuerdo —respondió—. Pero con la condición de que llevemos nuestros nuevos suéteres.
—De acuerdo.
—Las llaves del auto están en la mesa, esto es lo que traerán —dijo la madre dándole una pequeña lista.
—Iremos caminado, es navidad, el centro de la ciudad estará lleno de personas comprando los regalos de último minuto y la nieve está comenzado a obstruir caminos.
—De acuerdo, cuídense.
Caroline y Liam salieron de la casa, cada uno llevaba el suéter que se habían regalado. Caroline tenia suerte de vivir cerca del centro de la ciudad, este quedaba a tres cuadras de donde vivía, sin embargo, Liam vivía al otro lado de la ciudad, así que no le quedaba nada cerca.
Entraron al supermercado, tomaron las cosas que la madre de Caroline les había encargado y se fueron a las cajas para pagar, en la cual duraron una casi una hora, las filas eran extremadamente largas.
—Te dije que debíamos quedarnos en la primera caja —Se quejó Liam cargando las bolsas mientras caminaban por las calles de Claymont.
—Ya no soportaba a las señoras que estaban hablando enfrente de nosotros, conocimos a toda su familia sin saber quiénes son —respondió riendo.
Ambos continuaron charlando mientras caminaban, pero un tropiezo hizo que Liam se cayera en la nieve, Caroline no pudo contenerse y explotó en risa. Liam estaba en suelo riendo, pero aprovechó un descuido de Caroline y le lanzó una bola de nieve, acto seguido se levantó del suelo.
—¡Liam! —exclamó molesta.
Caroline se agacho, hizo una bola de nieve y se la lanzó a Liam, pero Caroline recibió un impacto de Liam, ambos comenzaron hacer bolas de nieves y se las lanzaron por un rato como niños felices, cuando finalmente se agotaron tomaron las bolsas del suelo y regresaron a la casa de Caroline.
—¿Que les sucedió? —preguntó la madre de Caroline en la puerta.
—Tuvimos una guerra de nieve —respondió Caroline mientras ambos se sacudían la nieve que traían en su ropa.
—¿Quién ganó? —preguntó el padre.
—Yo —respondieron al mismo tiempo Caroline y Liam.
—Lleven la cosas a la cocina y ya que estarán ahí, acomoden la mesa —ordenó la madre riendo, ya que Liam pensaría que era mandona.
Ambos obedecieron, dejaron las bolsas en la cocina y acomodaron la mesa, ya lista, la madre comenzó a servir la cena. Todos estaban sentados en un lado de la mesa cuadrada, por primera vez en mucho tiempo la cuarta silla había sido ocupada por alguien, los padres de Caroline habían comprendido que su hija había crecido y a partir de hoy esa silla no iba a estar sola por más tiempo.
Dieron gracias por la cena, todos comieron entre pláticas y risas, estaban felices de estar reunidos. Año tras año, al terminar la cena, los padres de Caroline y ella siempre veían una película.
—Nosotros limpiaremos, ustedes vayan buscando una película —avisó la madre de Caroline.
Fueron a la sala de estar, se sentaron en un sillón, encendieron la televisión y buscaron una película, al cabo de unos minutos encontraron una película que cada año repetían, pero que nadie se cansa de verla, esta trataba sobre un niño que es olvidado en el aeropuerto en las fechas de navidad.
Todos estaban sentados en el sofá disfrutando de la película, Caroline estaba recostada en Liam y él la tenía abrazada, ambos tenían que aprovechar las oportunidades que el destino les ofreciera, en especial Liam.
Al final, Caroline se quedó dormida en el pecho de Liam y para no molestarla los padres de Caroline permitieron que él se quedara a dormir, claro iban a estar en constante vigilancia para que no hicieran nada indebido. Al final de unas horas observando a Caroline, Liam se quedó dormido. Ambos estaban de acuerdo que esta había sido la mejor navidad de todas, sin deseos ni espíritus que te visitaban para hacerte recordar el pasado, solo Caroline y Liam disfrutando la noche juntos. Estar con los que amas, ese es el sentido de la navidad ¿o no?
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Love Games ©
Teen FictionCaroline Cárter es una chica que tiene sola una cosa en mente, venganza. La devastación empieza cuando la mejor amiga de Caroline, Ashley es herida por un chico: el guapo y genial capitán del equipo de fútbol americano de la escuela, Liam West. Amb...