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Capítulo 38. El baile de graduación (parte 1).

El baile de fin de curso es el evento más significativo de un alumno de preparatoria, pero este es mucho más importante cuando eres de último grado, ya que es el último baile. Además de que tienes una última oportunidad para hacer todo lo que siempre quisiste hacer, como cambiarte de look o declararte a la chica que te gusta desde el primer día de clases, porque probablemente esa sea la última vez en que la veas.

— ¿Dónde coloco eso? —preguntó un chico que tría unos adornos en sus manos.

—Donde sea, no importa donde estén, solo son unos adornos —respondió Liam, el cual estaba sentado en una silla observando todo lo que hacían sus compañeros.

Liam tenía una última responsabilidad como presidente del consejo estudiantil: organizar el baile. Agradecía que esa responsabilidad al fin terminara, nunca más se postularía para un cargo como ese, ser presidente tenía muchas responsabilidades, como asistir a una fiesta a la cual no quieres ir.

Después de insistir demasiado, Logan convenció a Liam de asistir a su ultimo baile, él le dijo que debían disfrutar porque ese momento nunca más se repetiría y en menos de dos meses todos estarían en diferentes ciudades y tendrían muchas responsabilidades. Cada alumno del último curso estaba nervioso con este asunto de la universidad, tenían que pensar en su futuro y lo que querían hacer con su vida, todos tenían miedo de equivocarse y decepcionar a sus familiares y no ser la persona que ellos esperaban, pero este no era el momento para pensar en eso, debían disfrutar su último baile.

La noche finalmente llegó, el gran baile había comenzado, Caroline ya había tomado una decisión: la universidad de la costa del este la había aceptado, ahora solo esperaba que esta funcionara.

—Caroline, ¿segura que no quieres ir a tu baile? —preguntó su madre en la habitación de Caroline.

—No, ya se los dije, además mi vuelo saldrá en unas horas, tengo que hacer los trámites de la universidad.

—Eso puede esperar a otro día —comentó su padre.

—Tengo que irme ahora —decretó decidida, ya que realmente no se sentía con ganas para asistir a un estúpido baile en donde estaría el estúpido de Liam.

—Caroline, es tu baile de graduación, ahí estarán todos tus amigos, tal vez esa sea la última oportunidad de verlos, es una gran noche que no debes perderte —recomendó su madre.

—Realmente la única que me interesa es Ashley y nos podemos ver cualquier día, vive a tres calles y asistirá a una universidad en la misma ciudad que yo, así que nos podremos ver los fines de semana —respondió con una sonrisa.

—Bien, ya que te no convencimos, el momento ha llegado, tu vuelo saldrá en una hora, debemos irnos ya —anunció su padre tomando las maletas de Caroline.

— ¿Están llorando? —cuestionó viendo como los ojos de sus padres comenzaban a mojarse—. Porque si ustedes lloran, yo lloro.

—Solo... mírate, muy pronto entrarás a la universidad y nos dejarás, nos estamos preparados para ese momento, te vamos a extrañar demasiado.

—Mamá, aún falta tiempo para que me vaya, ahora solo serán por unos días.

—Ven aquí —pidió dándole un abrazo.

—Abrazo grupal —exclamó el padre uniéndose al grupo.

—Gracias por convertirme en lo que soy y por todo, los amo como no tienen idea, siempre estaré en deuda con ustedes.

—Y nosotros te amamos —dijeron ambos padres en sintonía.

Caroline se separó de sus padres, bajaron de su habitación y fueron al auto, subieron y comenzaron un viaje hasta el aeropuerto. Caroline ya había decidido todo lo que quería en su vida y no había vuelta atrás, ahora solo tenía que esperar que todo le saliera bien.

Por su lado, Liam se estaba alistando para asistir al baile, sí, iba tarde, pero iría, realmente no sabía porque lo haría, solo quería disfrutar su última noche como preparatoriano y que ninguna chica lo arruinara. Esto era raro ya que el codiciado de Liam asistiría solo a su baile. Cuando termino de ponerse su esmoquin y acomodarse su moño negro, salió de su casa, subió a su auto y arrancó hacia el instituto, entre más rápido pasara la noche, mucho mejor.

Al llegar a la escuela, se estacionó, al parar abrió la guantera y sacó una botella pequeña de metal, la observo por un tiempo, pero finalmente decidió guardarla nuevamente, no necesitaba alcohol esa noche, porque podía cometer demasiados errores, el Liam alegre que todos conocíamos ya no estaba más. Bajó del auto y entró a la escuela, se comenzó a sentir mal cuando vio a la mayoría de sus compañeros acompañados por sus parejas, hasta el tipo que nunca había tenido novia tenia pareja, haber ido había sido una mala idea, estaba a punto de marcharse, pero decidió entrar, no por él, sino por su amigo.

Entró al gimnasio de la escuela y vio que todos en el centro estaban bailando, buscó a Logan con la mirada entre la multitud, pero cuando no lo vio pensó que ir a la mesa de botanas y bebidas era una buena idea, cuando Liam estaba solo no era nadie.

— ¡Liam! —gritó Logan caminado hasta la mesa donde él estaba.

—Mi gran y fiel amigo —recordó dándole un abrazo.

Esa reacción hizo que Logan se pusiera a pensar si Liam estaba ebrio, pero no, realmente lo estaba apreciando, algo que nunca había hecho antes.

—Yo te estaba buscando.

—Ya no busques más —respondió con una sonrisa.

—Liam, yo no sé cómo tomes esto, pero me gustaría presentarte a mi compañera —dijo nervioso señalando a la chica que estaba atrás de él.

—Hola Ashley —saludó poco sorprendido.

—Hola —respondió ella.

—Liam, iremos a bailar un rato, regresamos en unos minutos para estar contigo, ¿no te importa?

—No, disfruten, yo estaré aquí con mis nuevos amigos —permitió señalando a dos tipos que estaban en la mesa de bebidas.

Esto era realmente deprimente, ellos eran unos tipos raros, nunca nadie imaginaria que él estuviera con ellos, pero en verdad estaba sucediendo y además le habían caído bien a Liam. Lamentaba no haberle hablado antes.

—De acuerdo—respondió preocupado Logan.

Logan y Ashley estaban a punto de marcharse cuando ella hablo.

—Logan, necesito hablar con Liam un momento a solas, ¿no te importa? —dijo susurrándole al oído para que Liam no escuchara.

—No, yo estaré con los nuevos amigos de Liam —respondió con una sonrisa.

Ashley se acercó a Liam, el cual estaba tomando un bocadillo, cuando el notó que ella estaba enfrente de él, Ashley comenzó a hablar.

—Hola Liam —dijo ella nerviosa.

—Hola Ashley, ¿sucede algo? —preguntó sorprendido.

En verdad estaba sorprendido, ¿Qué era lo que ella le quería decir?