27 - Confesiones

3.7K 354 95
                                    

En todas las épocas hay una mujer que cambia el curso de los acontecimientos, que cambia la historia, el destino de todos aquellos que la rodean.

***

Eran las siete de la mañana cuando Hyeyeon se despertó sobresaltada. Mientras miraba alrededor, recordó que estaba en casa de Yoongi y vio a Jimin a su lado, profundamente dormido. Yoongi estaba de pie delante del espejo, poniéndose la corbata.

—Arriba —le dijo a Jimin, dándole un golpecito.

—Cinco minutos más...

Yoongi suspiró y siguió arreglándose. Una hora más tarde, estaban delante del edificio de oficinas donde trabajaba Hyeyeon. Jimin estaba raro, lo había notado ya desde el domingo, pero supuso que estaría preocupado por el trabajo e intentó no darle más importancia. La acompañaron a la cafetería donde solía desayunar cada mañana. Cuando entraron, muchos de sus compañeros, incluidas sus dos amigas de departamento, estaban en la barra. Al verla, la saludaron efusivamente.

—Señoritas...

Yoongi besó las manos de ambas chicas, que se rieron tímidamente, y fue detrás de Jimin a la única mesa libre del bar. Hyeyeon sentía ojos por todos los lados, sobre todo cuando Jimin, sin darse cuenta, le pasó un brazo por los hombros y la besó en el cuello. El gesto de prácticamente todo el local fue de sorpresa. La imagen era extraña: Hyeyeon tomando un café con el brazo de Jimin sobre los hombros, mientras éste miraba la portada de una revista, y Yoongi hablando por el móvil con la mano en la pierna de ella.

Se dio cuenta de que la situación era poco usual al ver el gesto de sobresalto de sus dos compañeras y tres chicos más del departamento de marketing. Hyeyeon se levantó para ir al aseo en un intento de disimular, pero ya era un poco tarde, sería la comidilla de todo el edificio.

—¡Mierda! Han bajado las acciones —dijo Jimin—. Por cierto, ¿no venía Taehyung?

«El que faltaba», pensó Hyeyeon.

Y el que faltaba apareció por la puerta casi derrapando. Repasó a las dos compañeras de Hyeyeon y se sentó con ellos, pidiéndole un zumo y un dónut a la camarera.

—Buenos días por la mañana, trío. Tengo a Hyun Ji en casa. Tuvo movida con el marido anoche —musitó—. Deberías llamarla, Hyeyoeni~.

—Vaya... Sí, lo haré.

—Yo me voy de viaje toda la semana, no sé cómo hacer...

—Puede quedarse en mi casa, si os parece... —propuso Hyeyeon.

—Pues sería de agradecer, no quiero que esté sola.

La cogió por el mentón y se acercó a ella.

—¿Qué haría yo sin mi Hyeyeoni? —dijo con sorna, dándole un beso.

—Taehyung, todos nos están mirando. —Yoongi se volvió y disimuló.

Taehyung se comió el dónut en dos bocados mientras leía el periódico, se bebió el zumo y se levantó.

—Voy a ver a tus jefes, Hyeyeoni, por la campaña de publicidad que os contraté, y me voy. Os llamo. —Dio una palmada en el hombro a Yoongi y pasó la mano por la cabeza de Jimin en un gesto cariñoso—. Cuida de mi Hyun Ji —le dijo a Hyeyeon, inclinándose hacia ella—. Y mira a ver si se le pega algo de tu indecencia...

Todo era ambiguo, el mejor cliente de su compañía había resultado ser Taehyung, el día que se enteró, había sido igual de sorprendente para ella como para él, y ahora estaba en aquella cafetería sentada entre dos hombres, con todos sus compañeros cuchicheando y el cliente más importante acababa de salir por la puerta después de darle un beso.

Revenge » Min Yoongi; BTS✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora