Cap 33

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Elena viajó con Dante y al llegar fue a visitar a sus amigos Lou y Miranda y habían invitado a Laura y los demás compañeros que apreciaban a Elena grandemente. Todos estaban sorprendidos por la noticia de su embarazo y más sabiendo quién era el padre. Pero le ofrecieron todo el apoyo del mundo y eso a Elena la tranquilizó. Y dime Elena. ¿Cómo es Willous de padre primerizo? Es un dolor de cabeza en realidad. No deja de preguntar que si tengo hambre, te acomodo mejor, te acompaño, no camines, no levantes eso. El colmo fue que quería entrar al sanitario en el aeropuerto. Y le dije: "Hasta ahí Dante Willous." Parece que será un buen padre. Tal vez pero eso es sin nacer no quiero imaginar cuando nazca. Me alegra que tú y Willous hayan resuelto todo y estén juntos. Dijo Laura. Pues juntos no. Solo tratamos de llevar la fiesta en paz por el niño. Pensé que estabas enamorada de él y pues él de ti. No todo lo que vemos es realidad Laura. Lo importante es que tendrá unos tíos y tías que lo amaran demasiado. Dijo Lou acariciando el vientre de su amiga. Todos dijeron si al unísono muy alegres por el bebé. Lou tú y yo tenemos una conversación pendiente. Lo sé.

¡Un hijo! ¡Pero eso es maravilloso! ¡Voy a tener un nieto! ¡Dante hijo me has hecho tan feliz! Al fin veré un niño correr por aquí. Dijo su madre muy emocionada por la noticia. ¿Dónde está Elena? ¿Porqué no vino? Ella esta saludando a unos amigos. ¿Pasa algo? Pues en realidad si. Dímelo hijo. Pues que puedo decir madre. Todo lo que me dijiste se cumplió. Su madre se acercó y acarició sus manos tomándolas entre las de ellas. Ella me perdonó pero no quiere nada conmigo. Dante cuanto lo lamento hijo. No más que yo. Elena es lo mejor que me pudo haber pasado y por mi estupidez la perdí. A penas pude lograr que me dejara estar en la vida de mi hijo y fue muy clara al decirme que no quería nada conmigo madre. La sentí sincera en sus ojos. Dante es normal después de lo que ocurrió. No puedes pretender que con solo sentirlo ella confíe y te reciba con los brazos abiertos. Sé que te duele hijo pero todo acto conlleva unas consecuencias. Pero no todo está perdido Dante. ¿A que te refieres? Dante en esta época no me sorprendería que al enterarte de que estas embarazada de un hombre que no te quiere y teniendo tantas dificultades en tu vida, la mayoría opta por abortar y eso es un hecho. No lo digas por favor. Por lo mismo Dante, si Elena decidió tener esa criatura es porque el amor que sintió fue fuerte y eso; eso debes de aprovecharlo hijo. El amor aún está ahí solo que está herido. Deberás trabajar duro Dante para reconquistar a Elena. Lo sé. ¿Y Albert? Albert está de viaje Dante, después de lo de Elena y lo tuyo ha decidido poner tierra entre ella y tú. Es lo mejor y dado las circunstancias ahora definitivamente hizo lo correcto. Yo debo hablar con él también madre. Lo sé, pero por ahora no es conveniente. Albert debe sanar y olvidar. Si en eso tienes toda la razón.

Bien ya todos se marcharon si y me alegra porque tú me debes una explicación y espero que sea muy buena Lou. En todo caso quién te debe la misma acompañada de una disculpa soy yo. Dijo Miranda. Elena yo hablé demás pensando que Dante era otra persona y pues aunque tampoco debí decir nada no importa quién fuera pues lo dije. Solo estaba tan frustrada por toda esta situación que te tocó. Elena perdóname no quise hacerte daño y mucho menos a Donovan, pero sabes de sobra que siempre te he dicho lo que pienso al respecto y aunque respete la decisión que ambos habían acordado pues tenía mi opinión y sin querer le dije a Dante sin saber que era él. No cargues la culpa tú sola amor. Elena escucha, aunque Miranda fue la que hizo explotar todo, fui yo quien decidió decirle dónde estabas. ¿Porqué? ¿Porqué traicionarme así? No te he traicionado Elena, no digas eso porque me hieres. Es que no puedo verlo de otra manera Lou. Confié en ti y me juraste que no permitirías que nada ni nadie volviera a hacerme daño. ¡Si! Y por ello creo que lo mejor era esto Elena, no puedes alejar a un hijo de su padre. Mi madre lo hizo y eso me destrozo porque cuando me enteré Elena y busque a mi padre él sufrió por eso por no saber que yo existía y solo pude compartir dos años con él porque murió. Era cierto que era un hombre casado y pues mi madre pensó que era lo correcto porque esperaba que él la rechazaría pero no le dio la oportunidad de saber. Tarde o temprano Elena por más que lo ames Donovan querrá saber. ¿Y que le dirías? Nada exacto lo mismo que has dicho en respuesta a esa pregunta. ¿Y porqué? Porque su padre no sabría nada. Malo o bueno elegiste tener a su bebé y con ello cargas la responsabilidad de afrontar la realidad y si él no hubiese querido pues seguías tu vida pero tranquila sabiendo que hiciste lo correcto por tu hijo. Y sabes Elena que te amo y que eres como mi hermana pero si crees que te he traicionado por herirte y dañarte entenderé que me quieras lejos de ti. Lou iba a irse. ¡Lou! Se detuvo y Elena corrió a abrazarle. Jamás podría alejarte porque eres parte de mi familia.

Tiempo después Elena estaba frente a la mansión de los Willous. No sabía si tocar o largarse pues temía enfrentar a Albert y en realidad no deseaba ver a Dante pero si a Margaret a ella si ansiaba verle. Señora. Si. Una señora la procura en la estancia. Dice llamarse Elena Evans. ¡Elena! ¡Pero hazla pasar muchacha! Dante y su madre corrieron a su encuentro y allí estaba parada en aquella estancia. Margaret fue a su encuentro con un abrazó cálido que ella recibió. Dante veía la escena y su corazón se alegró al verle allí. ¡Elena estás tan hermosa! ¡Y! La Sra. Willous comenzó a llorar a ver su vientre y acariciarlo. Madre no llores. Es que es una emoción tan grande. Pero no, nada de llanto que debemos estar felices porque pronto tendremos un hermoso niño correteando por aquí. Pasa hija; pasa iré por un jugo de frutas para ti, eso le hará bien al niño. Lo he preparado yo misma con frutas frescas. No debió molestarse. ¡Como que no! Serás la madre más consentida de este mundo hija. Ven siéntate y vuelvo ya. Elena estaba sentada en aquella sala y Dante estaba en una esquina observándola y eso la incomodaba. Podrías dejar de mirarme así. ¿Porqué no me llamaste para irte a buscar? Porque no estoy invalida Dante solo estoy embarazada. Además existen los taxis. ¡Taxi! ¡Viniste en un taxi! Eso es muy peligroso, que tal si él conductor choca, o te asalta o...¡Basta Dante! De veras que estas paranorico. Elena debes cuidarte, no ves los peligros a los que te expones amor. Elena le miró extrañada. No soy tu amor Dante. Dante se sentó a su lado. Lo eres aunque no quieras aceptarlo. Si te vas a poner en ese plan mejor me marchó. ¡Marchar! Nadie se va a marchar. Aquí te traje tu jugo y hemos preparado una cena que te va a encantar Elena. Entró la Sra.Willous. Gracias. La cena fue tranquila y Elena se sintió cómoda con la Sra. Willous quién le hacía anécdotas de su embarazo lo cual en un punto le hizo entristecer por acordarse de Albert. Margaret. Si. ¿Y Albert? Dante se tensó al ver cómo Elena hacia esa pregunta en una manera de añoranza. Bueno él...Él decidió viajar al extranjero. Entiendo.  No se dijo más sobre ello. ¿Y donde te hospedaras? Pues en mi casa madre. ¡Perdón! Dijo Elena. Pues me parece bien pues debes estar bien cuidada y que mejor que Dante. Sí, es lo que digo, no podría estar tranquilo si no sé qué pasa con ella. Pues eso habla de lo mucho que amas a ese niño y a su madre por supuesto. Claro madre ambos son muy importantes para mí. Elena miraba a ambos anonadada de como ellos decidían. Pues agradezco su preocupación pero ya tengo donde quedarme. ¿Y donde es eso? Preguntó Dante. Me quedaré con Laura ella me ofreció su casa. Bueno eso está bien Elena pero creo que estarías mejor con Dante o tengo una mejor idea. ¿Porqué no te quedas aquí? Es muy amable de su parte pero no quiero molestar. De ninguna manera así estaré tranquila de que estas bien. Déjame disfrutar de tu presencia aquí Elena. Me siento muy sola. Elena le miró y sonrío. Está bien acepto quedarme. Perfecto iré a preparar todo. ¡Feliz! Dijo Elena molesta mirando a Dante antes de dejarle allí en la mesa. Dante sonrió sabiendo que se salió con la suya.

Por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora