Sus ojos se encontraban mirando el reloj que se encontraba en la pared, se sentía nerviosa al estar en aquel lugar, no le gustaba y quería irse de inmediato pero sabía que debía quedarse por su bien.
-Señorita Lombrad- Hablo la enfermera haciendo que la castaña saltará un poco de su asiento.
-Buenos días.- saludo torpemente la chica levantándose de su asiento.
El hospital no era el lugar favorito de Evangeline, quien lo evitaba lo más que podía pues aun cuando lo odiara era necesario para su vida.
-El doctor puede atenderla ahora.- dijo mostrando una pequeña sonrisa que la castaña ni noto oír estar nerviosa al entrar a el consultorio.
Camino y abrió la puerta dejando ver una habitación blanca y perfectamente ordenada, una camilla podía verse al fondo de la habitación, al igual que varios objetos médicos.
Nada que la hiciera sentir menos incómoda.-Hola Evangeline.- saludo el doctor con una gran confianza.
-Doctor.- dijo en modo de saludo.
El hombre sonrio de lado por la forma tan tosca de tratarlo.
-No hay necesidad de tanta formalidad y lo sabes.- dijo mirando significativamente a la castaña quien sólo fruncio el ceño algo molesta.
-Dejalo Victor. Sólo quiero terminar con esto de una vez.- dijo secamente.-odio los hospitales.
-Bien si así lo quieres..- dijo suspirando levemente.-Primero que nada... sabes las probabilidades ¿cierto?-Le pregunto.
-Si.-dijo y el hombre vio un poco de miedo en los ojos de Evangeline.
-Bien.
[............]
Sus ojos miraban fijamente el techo en una busca de alguna solución a su situación, ella realmente se sentía triste al saber que la azabache había renunciado a ella.
Ese día luego de que ambas chicas se fueron del lugar juntas Chloe sintió su mundo caer en pedazos, lloro toda la noche en los brazos de su amigo y se culpó por permitir que eso sucediera.
La opción de dejar a Marinette seguir con su vida a lado de la chica castaña cruzó por su cabeza causando un gran dolor en el pecho de la chica, lo cual la hizo deshacerse de la idea tan rápido como esta apareció.
Había decidido no rendirse. Sabía que no sería fácil, sabía que tratar de acercarse a Marinette sería aun más complicado que antes, tal vez ni siquiera la pequeña dejaria que se acercara.
Miro el reloj de su celular y notó que eran las 2 de la tarde, no se había levantado de su cama en todo el día y tampoco tenía ganas de hacerlo, quería y extrañaba a Marinette.
-Vamos Chloe.- se dijo a sí misma para levantarse pues sabía que más daño se haría a ella si se seguía lamentando de esta manera.
Así que se levantó tomo una larga ducha con agua caliente, se vistió con la mejor ropa de marca que tenía y salió de su casa decidida a no perder a Marinette.
Salio de su casa con una mirada llena de determinación, su paso era firme y decidido, pero su camino fue interrumpido por el sonido de un claxon, volteó a ver de quien podría tratarse sólo para encontrarse con una castaña sonriendole de manera amistosa.
-Chloe.-dijo en modo de saludo la chica lo cual provocó una confucion en la rubia.
-¿Que? - pregunto pero su tono no fue el más suave que tenía por lo que sonó molesta.
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Lo que te quiero decir....|Yuri|
Fanfictionescribió en el pizarrón. -Que rara es...-dijo una chica de cabellera rubia. Todos los del salón rieron ante el comentario de la rubia. escribió abajo de su nombre y sonrío débilmente. Todos callaron.... Un universo alterno de ladybug, aquí no habrá...