|| A Novel Approach.Stiles.
Meredith ha estado bastante callada desde que la encontramos a ella y a Malia en el sótano de la comisaría. En casi cinco horas, apenas y ha hablado lo suficiente para preguntarme si podía quedarse a dormir conmigo y luego avisarle a Scott de sus planes, usando el mínimo de palabras y un tono de voz bajo, débil y triste. Asimismo, la expresión en su mirada ha mantenido un aire pensativo, serio y a su vez consternado. Incluso ahora, mientras cura la herida que me hizo Tracy en el pecho para paralizarme con su veneno de kanima, su mente parece estar en otro lado.
—Gracias —enuncio cuando ella tira a la basura la gasa humedecida con agua oxigenada con la que limpió la herida. Mer me mira con las cejas enarcadas, de forma inquisitiva, al tiempo en que empieza a guardar las cosas dentro del botiquín de primeros auxilios—. Ahora, déjame curar tu herida.
—No hace falta —me dice, arremangándose el delgado suéter verde azulado para mostrarme su antebrazo izquierdo—. Fue solo un rasguño. Supongo que por eso pude moverme antes que ustedes.
—El mío también es solo un rasguño, no tenías por qué limpiarla.
Sus facciones se suavizan ante mis palabras, mas todavía puedo ver rastros de tristeza y preocupación en ella. La herida en mi pecho no es profunda, de hecho ni siquiera me duele, pero cuando llegamos a mi casa, Mer fue directamente por el botiquín de primeros auxilios y me pidió que me quitara la camiseta de manga larga que traía puesta, y de la cual por cierto tendré que deshacerme.
—Es lo mínimo que podía hacer —replica por lo bajo, cerrando la caja metálica tipo maletín de color blanca con una cruz roja pintada en el centro.
—Lo dices como si tuvieses la culpa de lo que pasó —suelto confundido, entendiendo que eso es justo lo que pasa con ella al momento en que baja la cabeza y empieza a jugar con sus dedos—. Hey, amor —coloco una mano bajo su mentón, con suavidad elevándolo para que sus ojos se posen sobre mí—. Lo que pasó, que Tracy escapara de la clínica, no fue culpa tuya.
—Pude haberlo evitado —musita, lágrimas comenzando a acumularse en sus bellos ojos—. Pude evitar que los paralizara, que saliera corriendo de allí.
—Nos tomó desprevenidos. Ninguno de nosotros tuvo tiempo para reaccionar.
—Lilith dijo que soy la bruja más poderosa del mundo, por ende debí haber tenido el tiempo suficiente para saber lo que ocurriría.
—También dijo que tenías mucho que aprender sobre tus poderes y que probablemente no sería fácil, que llevaría tiempo —le recuerdo, tratando de hacerla sentir mejor.
—Sí, pero se supone que puedo ver el futuro, Stiles. Y no vi esto —expresa con un deje de desesperación—. No vi a Tracy convirtiéndose en kanima; no vi a Lydia resultando gravemente herida; no vi a los sujetos que mataron a Tracy y tampoco pude hacer algo para impedir que lo hicieran.
—Bebé, yo sé que estás preocupada por... Aguarda un segundo, ¿qué dijiste? ¿Cuáles sujetos? —acabo preguntándole, mi cerebro empezando a trabajar a mil por hora—. Amor, ¿hablas de las mismas personas que mencionó Malia? ¿Los enmascarados?
Meredith traga con fuerza, un par de lágrimas derramándose por sus mejillas cuando cierra los ojos por un breve instante y asiente. Mi corazón se acelera. Si soy honesto, creía que todo ese asunto de los sujetos con máscaras había sido algún invento de Malia para encubrir el hecho de que había asesinado a Tracy, pues en todo el día esa fue la única propuesta que salía de su boca cuando nos preguntábamos qué hacer con ella.
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About Dread Doctors and Quimeras | AW&W: 4 | Teen Wolf
FanficEN EDICIÓN LENTA. [Libro #4 de la saga "About Werewolves and Witches"] NOTA: por favor, lee la tercera sección del libro Steredith antes de empezar con este. Preparándose para su último año de preparatoria, las únicas preocupaciones de la manad...