Capítulo 13: Damnatio Memoriae. Parte II

1.6K 152 49
                                    

|| The Beginning Of The Chaotic Destruction.





En serio iba a ir al hospital a ver a mi hermana. De verdad que sí. Pero mientras aguardaba a que un semáforo cambiara a verde, me di cuenta de que mi herida estaba sangrando otra vez. Y no quise preocupar a Meredith con la creciente mancha escarlata manchando mi camiseta, así que vine a casa para cambiarme de ropa y también limpiar la herida.

No me preocupa que no haya sanado todavía, después de todo Theo me intoxicó con cenizas de serbal y supongo que todavía queda un poco en mi sistema, pero me molesta un poco tener que cambiar la gasa tres o cuatro veces al día cada día. Tampoco me agrada tener que lavar mi ropa con tanta frecuencia o las constantes punzadas de dolor en mi pecho. ¿Pero qué puedo hacer?

De pronto, escucho a Castiel ladrar en el piso de abajo. Supongo que Isaac debe haber llegado ya y me pregunto si sería buena idea preguntarle en dónde estuvo o ir directo al grano y preguntarle acerca de lo que Malia planea hacer. Sacudo la cabeza en medio de una ligera mueca, el agua oxigenada arde como los mil demonios.

Por el rabillo del ojo veo a Stiles entrando a mi habitación con cierta dificultad puesto que Castiel camina alrededor de sus pies, mordiéndole el pantalón a modo de pedirle algo de atención. Desde que Mer está hospitalizada, hace eso a cada persona que entra a la casa, en cierto modo es como si estuviera preguntándonos por su dueña.

—Hey. —Hago un gesto con la cabeza en señal de saludo. Stiles se para bajo el umbral del baño, golpeando sus puños entre sí con aire distraído—. ¿Todavía no se cura?

Bajo y me obligo a no hacer otra mueca.

—A veces toma más tiempo —expreso con calma antes de preguntar—: ¿Qué haces aquí?

Tiro en el lavabo la gasa con la que estaba limpiando mi herida y pego los otros tres extremos de la gasa nueva y limpia que la cubre.

—Uh, escuchaste del tipo que asesinaron en las torres de comunicación, ¿verdad? —Asiento y cojo mi sudadera para ponérmela—. Creo que pude haber descubierto algo.

—¿Quieres mi ayuda? —Doy un paso al frente, quedando a menos de medio metro de él, y enarco una ceja en señal de asombro.

—¿Quieres mi ayuda? —Doy un paso al frente, quedando a menos de medio metro de él, y enarco una ceja en señal de asombro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

A su vez, Stiles saca su teléfono celular.

—Sí, bueno, dijiste que podías encontrar las pistas que yo no. Además, así evito que Mer se entere de esto y escape del hospital —me dice, a lo que asiento un poco, luego se mueve hacia mí de modo que pueda ver la pantalla de su teléfono—. Mira esto. Es de cuando llegó el técnico —explica, un video reproduciéndose ya y en cámara rápida. Lo que Parrish me mostró ayer por la mañana no incluía esta parte—. ¿Lo ves entrar? Luego entra la oficial Clark. Luego algo muy grande y veloz sale, después Clark y eventualmente, el técnico moribundo es sacado por los paramédicos.

El video llega a su fin y Stiles presiona el botón que lo regresa a la pantalla principal. Apenas alcanzo a ver que de fondo tiene una foto de mi hermana antes de que el aparato esté devuelta en el bolsillo de su pantalón.

About Dread Doctors and Quimeras | AW&W: 4 | Teen WolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora