Capítulo 4: Dreamcatchers. Parte III

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|| Mystery Masked Men.


—Oye, Deaton ¿cómo demonios cruzó la línea de serbal? —inquiere Stiles en tono alterado.

Él, junto con mi jefe, cayeron bocabajo. Mer y Malia lograron mantenerse sentadas, con el peso de sus espaladas sobre uno de los muebles metálicos a mi derecha, y puedo verlas a ambas porque caí bocarriba.

—No lo sé. Es una barrera que las criaturas sobrenaturales no deberían ser capaces de cruzar —responde Deaton.

—Scott y Mer lo hicieron —alega mi mejor amigo.

—Una vez, pero casi me mata —intervengo.

—Deberíamos haberla matado a ella —escupe Malia.

—¿Saben? Me acabo de dar cuenta de que esta es la primera vez que la coyote no ha hablado sobre matarme a mí en todo el día —comenta Mer al instante en tono casual—. Eso es lindo. Creo.

Al igual que yo, Malia frunce el entrecejo ante las palabras de mi hermana menor.

—Mer, bebé, enfócate —le pide Stiles—. Tracy quizás esté yendo a matar a alguien más en este preciso momento.

—Sí, lo siento.

—Escuchen todos, debemos concentrarnos —nos dice Deaton con calma—. Scott, Malia y Meredith, probablemente ustedes puedan moverse mucho antes que Stiles y yo. Quizás Meredith lo haga incluso antes que ustedes dos. Pero tienen que concentrarse.

—Okay, primero que nada, no me agrada en lo absoluto esa idea; en segunda, no quiero ir sola tras Tracy y en tercera, ¿concentrarnos en qué? ¿En cómo no puedo mover ni un solo músculo del cuello para abajo? —balbucea mi hermana.

—Mer, concéntrate —vuelve a pedirle mi mejor amigo.

—¿En qué? —le pregunta ella desesperada.

—En sanar —me encargo de responder.

Meredith no tarda en dedicarme una mirada pletórica de irritación.

—Gracias, genio, pero recuerda que no puedo sanarme a mí misma —me dice con frustración—. ¿Por qué no lo intentan tú y la coyote? ¿O si los sano yo a ustedes?

—Meredith.

—De acuerdo, lo admito, tengo miedo de Tracy. En realidad, me aterra, especialmente desde que descubrimos que es un kanima. Nuestra ultima experiencia con uno de ellos no fue para nada agradable y...

—¡No sé cómo ordenarle a mi cuerpo que sane! —grita Malia de pronto, sonando desesperada y asustada—. ¡Nunca me enseñaron a hacer eso!

—¡Oye! ¡Yo estaba hablando! —reclama Mer—. Y cálmate, ¿quieres? Tus gritos me alteran.

—¡No puedo calmarme, no me puedo mover! —contesta Malia en el mismo tono de antes.

—¡Y no eres la única! ¡Ninguno de nosotros puede moverse!

—¡Chicas! —exclamo a modo de reprimenda, logrando por fortuna que ambas cierren la boca y dirijan su atención hacia a mí—. Doc, ¿cómo nos enfocamos?

 Doc, ¿cómo nos enfocamos?

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About Dread Doctors and Quimeras | AW&W: 4 | Teen WolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora