Cuatro

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Medio día

Faltaban pocos segundos para oír el timbre e ir a comer y Theo Pierce aun no aparecía en el instituto.

Estaba cada vez más nerviosa.

Vería a mi ¿amor platónico? ¿ídolo? ¿chico que me gusta?

Aun no sabía lo que sentía por Theo, pero estaba segura que no sería una de sus fangirls.

Camine por el pasillo principal con mi bolso en el hombro junto a mis compañeros, como en las películas las puertas de entrada se abrieron causando que todos los ojos se posaran en ella.

Era alto y delgado, su cabello castaño estaba peinado hacia arriba, haciendo que luciera sexy.

Varias chicas chillaron cuando el comenzó a caminar por el pasillo, no se detuvo pero sonrió, su sonrisa era perfecta.

Theo Pierce estaba aquí.

Caminaba acompañado de dos chicos casi tan guapos como él, jugando con su labio habló a uno moreno y este rió asintiendo con la cabeza.

Apunto en mi dirección, me mantuve aún más quieta de lo que ya estaba, pegada a los casilleros, como todo el alumnado.

Su mirada me intimido, pero rápidamente supe que no me miraba a mí, sus ojos eran de un marrón oscuro, estaba segura que nunca antes había visto algo así.

Avanzó y se detuvo a un par de metros de mí, a centímetros de otra chica, era del curso de Leyna.

— ¿Sabes dónde está la cafetería?

Su voz ronca llenó el silencio en el que estaba el pasillo. Las chicas junto a él chillaron.

Inconscientemente suspire y me apoye en el casillero.

— Por allí —susurró la pequeña señalando la puerta a mi lado.

Con una triunfal sonrisa él paso por mi lado, su perfume llego a mis fosas nasales, volví a suspirar.

(...)

— ¡Llegué! —grité cerrando la puerta detrás de mí.

— ¡Keila! —fruncí el ceño—. ¡Keila!

Caminé a la sala y vi que Leyna me hacía señas para que caminara junto a ella.

— ¿Qué pasó? —cuestioné confundida.

—Necesito que hablemos cosas de mujeres —me miró seria.

—Para eso está mamá, Leyn tengo un año más que tú.

—Vamos.

Me arrastró escaleras arriba y nos encerró en su cuarto.

—Leyn —me quejé.

—Nunca pensé que un chico me gustaría —comenzó a hablar y caminar en su habitación.

—Pero te gusta Justin —alegué.

—Nunca pensé que me gustaría un chico además de Justin —se corrigió.

— ¿Te gusta un chico?

—Si —rió—. Y tengo una cita hoy.

— ¿Cómo que tienes una cita hoy? —interrogué sorprendida.

—Se llama Luka, entró a estudiar hoy.

—Tu sí que eres rápida hermanita —estallé en carcajadas.

¿Cómo es posible que en un día mi hermana se consiga una cita y yo en dieciséis años aun no tenga ninguna?

—Necesito que me ayudes a vestir —se sentó en su cama.

—Llama a Blaz, soy un asco para esto —murmuré triste por no poder ayudarla.

—A mí me gusta cómo te vistes —sonrió.

— ¿Segura?

—Dime, ¿cómo te vestirías para una cita?

—Usaría una falda, y un crop top, con mis zapatillas —pensé en voz alta.

—Y ¿qué podría usar yo?

—Un short con una camisa —hable pensativa—. O una blusa suelta.

—Me gusta, simple, usaré mi short y mi camisa.

—Te verás hermosa.

—Necesito pedirte otro favor.

— ¿Qué más?

Caminé y me senté a su lado al verla tímida.

— ¿Podrías ir conmigo? Tengo miedo, tú quédate lejos, o sea ve y cuando me junte con él tú te vas a algún lugar y luego vuelves por mí —habló muy rápido y luego hizo un puchero mirándome.

Como buena hermana mayor hice la pregunta del millón.

— ¿Y que gano yo?

—Luego hablamos de eso, te prometo que te gustará.

— ¿Segura?

—Sí, muy segura.

Lo pensé unos minutos.

—Está bien, te acompañaré.






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Capítulo dedicado a @Alizz141409 espero te guste♥

Fangirl: Solo por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora