VII

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Las mañanas en el aeropuerto suelen ser frías, tediosas. Para Frank era así, trataba de distraerse con algo mientras esperaba la salida de su vuelo.

Estaba acompañado de su mamá y sus dos mejores amigos.

—Frank, cariño ¿no quieres que te traiga un café? — le preguntó su madre.

—No gracias, mamá. Prefiero no consumir ningún tipo de drogas.

—Pero si no es para tanto — mencionó Jamia.

—Me conformo con un poco de agua.

—Bien, ¿Jamia me acompañas?

—Sí.

Jamia y su madre se levantaron de sus asientos en busca de un poco de café, mientras Patrick se quedó a acompañar a Frank.

—Aún no puedo creer que estés a punto de ir a Inglaterra.

—Lo sé, debo admitir que estoy un poco nervioso por el hecho de que voy a vivir solo. Ya sabes, odio los cambios, convivir con personas que no conozco, no lo sé...

—Será extraño pero te acostumbrarás, con el tiempo será más fácil. Solo piensa que en ese lugar tendrás todo para hacer los estudios que quieras.

—Tienes razón... ¿puedo pedirte un favor?

—Claro.

—Tu te llevas muy bien con mamá, por favor no dejes de visitarla, la conozco y sé que se sentirá muy sola. También Jamia, sabes como es su familia a ella no le gusta y es por eso que te pido que no te alejes de ella.

—Sí, supongo que tú eres el único que piensa que la relación entre su familia es idónea para una persona.

—Correcto, en fin, solo no las dejes... son un poco... sentimentales.

—Tranquilo, pero Jamia es la que me preocupa.

—¿Por qué lo dices?

—Mira, eres mi amigo, pero también eres un chico que no puede notar los sentimientos de las personas... y bueno Jamia, ella esta enamorada de ti.

—¿Qué?... no es cierto, ella es mi amiga, no es algo que se amolde a nuestra relación.

—Lo sé, pero ella ha estado enamorada de ti desde que te conoció.

—Por favor — dijo con sarcasmo — eramos niños y el amor es...

—Ya sé, el amor es ridículo para ti. Pero entiendela, son sus sentimientos, no los puede cambiar.

—Ahora me dejarás con esta inquietud por todo el viaje...  ¿por qué ella no dijo nada?

—Ella te conoce, sabe como eres y supongo que no quería complicar las cosas.

—¿Te dijo algo a ti?

—No, cualquiera podría notarlo... cualquiera excepto tú.

Frank se quedó procesando toda la información. Si bien era demasiado bueno para muchas cosas definitivamente los sentimientos de las personas no era su fuerte.

Pasó exactamente media hora para la salida del vuelo.
Una vez que escucharon la llamada Frank caminó hasta la puerta para despedirse de su familia.

—Cuidate mucho, cariño. Recuerda comer bien.

—Tranquila mamá, estaré bien.

—Frank, recuerda que a las personas les molesta que les digas que eres más inteligente — le dijo Patrick.

—Procura hacer amigos, no me gusta que estés solo — le dijo Jamia.

—Tranquilos, sé como comportarme.

Polimatía [Frerard]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora