35~ Su regreso

84 4 1
                                    

Multimedia ~ Padrino de Jess

P.O.V. Omnisciente (Mio mio)

Hace mucho no venía a este lugar, unos tres a cinco años, pero para él seguía igual de horrible y repulsivo.

Había cumplido su trabajo, pero el tiempo se le fue de largo mientras se divertía con mujerzuelas.

Lo único que se le antoja es ver a su perrita.

Así que camino hasta el antiguo colegio en que la dejo, pues era obvio que no saldría de allí hasta terminar la media, se escuchó la campana y él estaba detenido frente al portón, mirando aquella avalancha de adolescentes empujándose para ir a sus casas desesperados después de una jornada escolar de 9 horas.

El gentío se deshizo en unos cinco minutos o más y allí la vio.

Su rostro había mantenido aquellos rasgos que le excitaban y su cuerpo ya era el de una mujer, estaba hablando con un muchacho un poco más alto que ella mientras salían de su liceo.

Jess había cambiado, y mucho, mientras él, era el mismo sádico hijoputa que se mostraba años atrás.

Así es, David había vuelto, y para quedarse.

Fue ese momento en el que David poso su vista en Jess, que ella sintió un aire frio pasar por su espalda, se detuvo en media conversación, rediciendo solo la preocupación de Pay.

-...- miro hacia atrás, hacia los lados, y no vio a nadie.

David ya se había marchado, pero su presencia no abandonaba a Jess, asustándola.

-C-cambio de planes...- dijo al rato mirando a todos lados menos a su receptor -iremos a hacer el trabajo a mi casa...- camino en dirección contraria, tomando la mano de Pay temblorosa.

-¿Qué pasa Jess?- dijo el preocupado.

-... t-te lo cuento c-cuando lleguemos...- la voz le temblaba y demostraba que nada estaba bien en ese momento, su mente le recordaba su infancia, luego a David, luego a su padrino, a su primo, a Bruce y a Pay, estaban en peligro. Y ese era un presentimiento que asechaba su corazón y su mente, una corazonada que la estaba destruyendo.

Finalmente llegaron a la mansión de su padrino y ella abrió la puerta con rapidez, jalando a Pay, y aunque no respondió a la pregunta él no insistió, sabía que ella estaba perdida, y que pronto podría ayudarla, ahora no.

Ella y él llegaron a la sala de estar, y allí estaba ese bastardo, sentado con total naturalidad.

P.O.V. Jess

El dolor en mi pecho era insoportable, apenas respiraba, y nada mejoro al verle, sino que se me detuvo el corazón, el miedo me erizó la piel y me dejo inmóvil.

Sentí un abrazo de Pay recorrerme y un susurro a su oído, estaba tan tensa que hasta su cabello era algo nuevo y escalofriante.

-¿Es él?- dijo suavemente

-...- asentí levemente. Y su abrazo se asió un poco más fuerte, protegiéndome.

Sonreí muy leve, tome su mano y lo lleve a mi habitación, pero me detuve.

-David- le mire y él se volteo -Cuánto tiempo- le dije sin ser muy amigable.

-Mucho, unos cuantos años- miro a Pay -y veo que las cosas han cambiado- mostro sus malditos perfectos dientes atreves de su sonrisa de mierda -aunque no todas perrita-

La Venganza [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora