d i e c i s e i s

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Don't waste your talent❤️

Con el pelo húmedo, la capucha puesta y todo el cuerpo adolorido, se encuentra esperando a Taehyung en la acera de la calle. Hace pocos minutos ha vuelto a llamarle y le ha pedido que le espere afuera ya que está llegando. No entiende porque el castaño va por él y tampoco le importa demasiado ya que al menos no tendría que caminar hasta su casa, lo que sus piernas agradecen bastante.

Un bocinazo le hace dejar de mirar sus pies y sacar las manos de su bolsillo, para caminar al auto frente a él con total confianza. Un Taehyung bastante alegre le mira desde el interior y en cuanto se adentra al vehículo no tarda en sentir un cálido abrazo por parte del castaño.

— ¡Hola! – Le saluda en cuanto se separaron.

— Hola. – Responde con una sonrisa y se acomoda en el suave asiento. – ¿Por qué has venido por mi? – Pregunta enseguida ante la curiosidad que hay en su ser.

— Vamos a una cena. – Suelta como si nada, poniéndose en marcha nuevamente.

— ¿¡Ah!? – Se alarma Jimin por su tono serio. – Pero...yo estoy así...– Dice apuntando su sudadera gris y sus shorts negros. No estaba para nada vestido para la ocasión.

— Estás bien así, no te preocupes. – Intenta convencerle el castaño, haciendo un gesto con su mano restándole importancia y ensanchando aún más su rectangular sonrisa.

Claro, él iba como vagabundo y Taehyung prácticamente había salido de una pasarela. Llevaba una camisa blanca con líneas, pantalones negros y dos cadenas de plata colgaban de su cuello con bastante elegancia.

¿En serio no importaba su ropa?

— Además solo seremos los de la compañía. Jin ha organizado esto. – Continúa hablando, sin darle chance a Jimin de pedir ir a su casa a cambiarse. — Y él me ha pedido que te pase a buscar.

Pero por más que el rubio ruega para que le deje ir a su hogar, Taehyung insiste en que se ve bien vestido así y que nadie le prestaría atención. Pero en cuanto nota a donde se dirigen, las manos comienzan a sudarle y su corazón se acelera por completo.

— Tae...– Murmura, recibiendo un asentimiento por su parte. – ¿L-la cena...es d-dónde Yoongi hyung? – tartamudeó.

— Sip. – Confirmó, regalándole una sonrisa. – Y ya deben estar todos allá, así que no tienes tiempo para ir cambiarte.

— Pero...

— ¡Nada de peros! Ya estamos llegando. – Le calló y subió el volumen de la radio para no escucharlo.

Jimin molesto en su asiento, infla sus mejillas al no ir tan elegante como Tae y le mira con odio, lo que el otro toma con diversión en cuanto se estaciona en el edificio de Yoongi. El castaño no tarda en apretar sus mejillas y decirle lo adorable que se ve haciendo berrinche. A lo que el rubio se zafa de su agarre y se baja del auto molesto. En esos precisos momentos agradece al menos haberse bañado en el estudio y cambiado de ropa, porque si que le daría vergüenza andar todo sudado y hediendo.

— En serio, deja de pensar en ello. Harás que me sienta mal. – Le habla Taehyung haciendo esta vez un puchero, mientras caminan hacia el elevador.

Boy in Black | MYG & PJM. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora