Camino ninja del sentimiento

Nuestros efectos bajo el alcohol - Pt2

• DÍA #215 •

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Naruto y Sasuke caminaban por la aldea en busca de una persona capaz de responder todas aquellas interrogantes vacías provocadas por la bebida, pero no eran los únicos que tenía lagunas a causa del alcohol, pues junto a ellos se encontraban Chouji y Kiba en camino a la casa de Shikamaru; quienes todos recuerdan como último vistazo su cuerpo aporreado contra el muro del edificio de frente al bar.

— Me siento horrible por lo que le sucedió al local. —expresó Kiba restregando los ojos y olvidando de momento la vergüenza de haber terminado en la casa de su hermana llorando y rogando su perdón por entrometerse en la relación con Shino; según lo que ella misma le platicó cuando estaba saliendo rumbo a su propio departamento (camino a su casa se encontró con los desmemoriados del equipo 7).

— Si todos aportamos la misma cantidad, será suficiente para reparar gastos y pérdidas de los clientes que se fueron sin pagar; además de una indemnización por nuestro comportamiento. —agregó Chouji con el ceño fruncido y deprimido por su comportamiento tan fuera de lo común. El celular sonó y el dueño respondió sereno. El resto de la pandilla se detuvo a contemplar como el rostro de Chouji se tornaba cada vez más rojo por las palabras incomprensibles de una mujer que gritaba del otro lado alterada hasta más no poder.

Chouji colgó.

— ¿Qué pasó, Chouji? ¿Quién era?

— Karui... —respondió cabizbajo— Parece que... que llamé a alguien que no debía una vez llegué a casa. —murmuró frustrado y arrepentido.

— ¿O sea que terminaron? —preguntó Kiba colocando su mano en el hombro.

— No lo sé. —guardó el celular y su mirada se plasmó en el suelo mientras Naruto y Kiba lo ayudaban a avanzar hasta la casa de quien podría dar algunas respuestas, pero al llegar a la vivienda de los Nara unos gritos les heló la sangre, los platos se escucharon quebrar en las paredes y de la puerta principal salió corriendo Shikamaru con los zapatos en las manos.

Los cinco se ocultaron tras un muro a unos metros.

— ¿Qué le pasó a tu mamá, Shikamaru? —preguntó Chouji todavía cabizbajo por su situación con Karui, pero pendiente de su amigo... ¿blanco por el espanto?

— Qué fastidio... —susurró mientras tomaba asiento para ponerse los zapatos, pero Naruto junto a los demás observaron el gesto de dolor en su rostro. Antes de que cualquiera le preguntase algo, ya sea por la noche ahogada en tragos como su gesto, éste se adelantó. — Debo ir al hospital. —expresó en un resoplido de dolor al intentar ponerse de pie— Tengo una costilla rota, pero si le decía eso a mi madre se encargaba de romperme las demás. —Chouji lo ayudó a levantarse.

— ¡Yo también estoy golpeado, de veras! Y el idiota de Sasuke también. —exclamó, pero en realidad el dolor era mucho menor a un comienzo debido a su rápida regeneración; no así tomó a Sasuke por el hombro y este reflejó una mueca de odio hacia Naruto por su falta de sentido común (pues el Uchiha no tenía chakra de un bijuu, así que sanaba como cualquier persona normal).

— ¿Y tú? —preguntó a Chouji— ¿Estás bien? Recuerdo que te desmayaste porque te atoraste con un pedazo de carne, Neji te estaba auxiliando y Lee, eh... Lee me golpeó cuando Kiba saltó sobre Shino.

— ¡QUE HICE QUÉ! —gritó Kiba preocupado. — ¡Por qué hice eso! —Sasuke y Naruto se miraron por un momento antes de recordar a Shino riendo como loco. — ¡Tengo que ir a verlo! —exclamó preocupado; no sólo porque pudo haberlo lastimado, sino por la reacción de Hana cuando se enterase (ahora comprendía que quizá por ello había terminado en casa de su hermana disculpándose, dejando a Shino quien sabe en qué condiciones).