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A media noche Jimin despertó, sorprendido de la música que resonaba por la habitación. Tardó varios minutos en captar que era, y cuando encontró el móvil debajo de su almohada, quiso golpear a Taehyung.

-¿Tienes idea de qué hora es maldito? -refunfuño, tallandose los ojos, nada más de responder la llamada. Al otro lado escuchó la risa pequeña de Taehyung, y lo escuchó suspirar-. ¿Tae?

-Hola hyung.

-Hola Tae -se dejó caer en la cama de nuevo, con el teléfono en su oreja cerró los ojos-. ¿Cómo fue el cumpleaños de Hobi?

-Bien... Sus padres le enviaron algunas fotografías, de las primeras con oficialmente el apellido Min. Se emocionó mucho.

-Me imaginó -aunque quiso, no había podido ir a felicitar el mismo al mayor, se sentía muy cansado y estuvo prácticamente todo el día en la cama, pero aun así Taehyung aseguro que le pasaría sus felicitaciones y el pequeño regalo que le había mandado-. Debió de estar feliz.

-Lo estuvo.

-Está bien, acababas de volver a suspirar, ¿qué sucedió? -inquirió demasiado curioso. No eran de esos suspiros cansados, sino de... enamorado, lo que era de una razón emocionante contando la hora que era para que estuviera sonriendo y no en el séptimo sueño.

-Lo hice -murmuró, y parecía tanto un secreto que era genuino, Jimin abrió la boca sorprendido-. Lo pensé durante todo este tiempo y me decidí. Él...

-Tae, oh Dios.

-Nos vamos a casar -susurró, y Jimin podía asegurar que todo su rostro era felicidad-. ¡Jimin, nos vamos a casar!

En eso, desde con Taehyung, se escuchó como se abría una puerta mientras alguien entraba corriendo, se escuchó el tronido de un sonoro beso y una risa pequeña.

-¡Nos vamos a casar! -gritó a todo pulmón Hoseok, con el fondo de la risa ahogada de su, ahora, prometido-. Por cierto, está muy lindo el dije, gracias Jimin, me encantó.

-Bueno, eso me alegra. De las dos cosas, quiero decir. De hecho, creo yo que ya se estaban tardando en dar ese paso.

Seguido fue un silencio, aunque era lleno de felicidad. Jimin estaba sonriendo, con los ojos cerrados medio cayéndose del sueño, pero un momento después, Hoseok volvió a exclamar:

-¡¡Nos vamos a casar!! -y con el mismo tono de voz, todo feliz y enamorado, volvió a decirlo-. ¡Jimin, Tae y yo nos casaremos!

-¡Se van a casar! -decidió unirse a la celebración, soltando una risa pequeña cuando Taehyung y Hoseok se rieron emocionados-. Estoy muy feliz por ustedes, en serio.

-Por supuesto serás el padrino de anillos ChimChim.

-No era necesario que me lo dijeras, yo ya lo sabía Taehyung.

-Oh -soltó, y volvió a reírse-. Mañana iré con Jin hyung al cine, pasaremos antes por ti. ¿De acuerdo?

Jimin se mordisqueó el labio, bajando un poco la mirada hasta su vientre. A pesar de haber seguido las recomendaciones del médico, la acidez no le había dejado de molestar los últimos días. Pero, al oír el entusiasmo de su amigo, y pensando en que no lo había visto la última semana, no pudo negarse.

-Que duerman bien, futuros esposos.

-¡Tú también Jimin! -exclamó ésta vez Hoseok, y parecía que tenía tanta energía como si se acabara de despertar-. Te queremos.

Primero una noche, después una eternidad ೃ  YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora