Lincoln x Lynn (The Loud House)

Capitulo 14 - Vínculos rotos, adiós familia

---Narra Lynn---

A pesar de las cosas que habían pasado en los últimos días. Al fin había hecho mi sueño realidad; si el sueño pervertido que tuve con mi hermano menor aquella vez. Aunque era algo enfermo o que cualquier persona no lo asimilara bien. Esto era algo que deseaba hacer con él desde entonces; aunque no pensé que me arrepentiría en el futuro por hacer esto con mi único hermano. Las cosas solo pasaron y me deje llevar, a pesar de que había tenido un día malo. Lincoln había logrado alegrarme, él siempre es bien comprensivo y atento conmigo. A pesar de haber cometido errores o cosas que lo hacen molestar. No sé que pensaba que no lo detuve, además era algo que no podía dejar pasar.

Aunque todo fuera muy pronto creo que yo; ni él no nos hubiéramos esperado tanto tiempo para llegar a este momento.

Estaba acostada en el sillón que se encuentra en la sala, frente al televisor. Pensativa y molesta por el castigo que había recibido, Lincoln dijo un montón de cosas intentando animarme y lo logro. Subimos rápido a su habitación, mis hormonas estaban al límite y mi excitación también. Todo paso tan rápido que no pensé que hoy sería mi primera vez; a pesar de que sentía dolor. Pues el placer mezclado con el dolor que sentía, era sensacional y las embestidas lentas que Lincoln hacía. Me daban un mayor placer, pero Lincoln al notar mis lágrimas saliendo de mis ojos. Me propuso cambiar de posición y yo acepte sin renegar; claro también quería saber que se sentía tener el control.

Así que me coloque arriba de él y con un poco de esfuerzo... me introduje su miembro lento, porque a un me dolía. Poco a poco lo iba metiendo, hasta lograr una penetración completa. Ahí sentí que mis emociones y la excitación me domino. Estar encima de él era mucho mejor, podía tener el ritmo que yo quisiera. Hacerlo más rápido o más lento dependía de mí, y sin pensarlo comencé a moverme muy rápido. Lincoln me tomo de la cintura con ambas manos; por su reacción le gustaba de esa manera. Mientras yo gemía sin parar; y me inclinaba para darle pequeños besos.

Hacer el amor con mi hermano era sensacional. Me había gustado no podía parar; no pensaba con claridad. Creo que ya no me importaba protegerme, a pesar de haber recibido clases de educación sexual en la escuela. Y conocer las consecuencias de un embarazo a temprana edad; todo eso en este momento no significaba nada. Solo quería llegar hasta el final.

Después de unos minutos no sé cuantos. No llevaba el tiempo, Lincoln me tomo con más fuerza y me decía "más rápido". A pesar de estar cansada y muy sudada; aumente una vez más la velocidad. Los sonidos sexuales que hacían nuestros miembros; al moverme de esa manera eran geniales. No pensé decir esto algún día pero "hacerlo con mi único hermano en mi primera vez, es fantástico". Lincoln estaba empapado de sudor al igual que yo, luego me le acerque al rostro una vez más para besarlo. Él me dijo tomando algo de aire por lo cansado que se sentía "siento algo extraño mi miembro". Esa palabra era algo que algunas de mis compañeras dijeron una vez. De cuando lo habían hecho con sus novios. No era ignorante sé que eso significa que ya terminara. Así que disminuí un poco el movimiento; para venirme al mismo tiempo que Lincoln. Pues también sentía que ya casi llegaba al clímax.

—¡L-Lynn. . . . mi pene se siente cada vez más extraño!

—. . .No te preocupes, pronto te sentirás mejor además. . . hoy es un día. . .seguro. . .—pero antes de volver a moverme más rápido, un grito me volvió a la realidad. Me asuste que me quite rápido de Lincoln; mientras Lincoln se puso pálido.

No entendía pero cuando logre recobrar mis cinco sentidos. Me di cuenta de un gran detalle; el cual era asegurar la puerta para entrar a la habitación. Era demasiado tarde no tenía idea de que alguien se despertaría; a estas horas de la noche.

Al ver a Lincoln de nuevo. Miraba que el solo se cubría con las sabanas el rostro mientras alguien lloraba cerca de la puerta para entrar; solo había alguien que lloraba de esa manera. Sentí que el tiempo se había detenido; aunque escuchaba por segundos los llantos, que venían desde la puerta para mi eran los segundos más largos de mi vida. Y un llanto que sin duda me puso mucho que pensar