He quedado en ir a casa de Nathan hoy, estoy lista para salir, para mí mala suerte en la entrada está papá... Y Karen.
-Kelly ¿A dónde vas?
-A casa de Nathan.
-Ten cuidado - me dice papá.
-Lo sé.
-Está bien, ve.
-Y buenos días para tí también - le digo a Karen.
-Hola - me responde tratando de ocultar su indiferencia hacia mí.
-No la soporto - susurro para mí.
Tomo un taxi hacia el edificio donde vive Nathan, el baja para recibirme.
-Vamos, tengo comida.
-Genial, olvidaba que tú a apartamento quedaba muy arriba. Por cierto ¿Hay alguien más a parte de tí?
-No, papá está trabajando como siempre y mi tío se mudó hace un mes.
-Así que estamos solos...
-Pues sí - dice mientras entramos al ascensor.
Ríe y me besa, nos besamos todo el transcurso del ascensor. Salimos del ascensor y entramos a su apartamento.
-¿Qué hacemos primero? - pregunta.
-Bueno, tengo hambre, podemos preparar algo.
-Suena bien, tengo unas tortillas y... Bueno otras cosas.
-Está bien... - río.
Noto un rincón que está lleno de reconocimientos todos dicen Kevin Benett, el padre de Nathan, desde que estaba en la policía hasta el FBI.
-¿Que hay ahí? - le pregunto a Nathan señalando una habitación con la puerta cerrada.
-Es la oficina de papá, no le gusta que entren, ahí guarda documentos importantes, ni siquiera yo entro - ríe.
-Bueno, vamos a preparar esas tortillas.
Me doy cuenta de que en su cocina hay alarma contra incendios, y yo necesito que Nathan se aleje para poder entrar en la oficina de su papá. Por suerte conozco un truco que el abuelo me enseñó para hacer salir humo de la sartén.
-Oh, mira hay helado, no lo sabía - dice Nathan riéndo.
-Lo comeremos después.
Derrepente mi plan funcionó y la alarma contra incendios comenzó a sonar muy fuerte.
-Oh, demonios, otra vez...
-¿Otra vez? - pregunto gritando.
-Sí, esa cosa está malograda, tengo que apagarla desde abajo.
-Está bien.
La verdad que ese ruido es insoportable, pero esta es mi oportunidad para conseguir la información que necesito.
-Te llamaré desde abajo para saber si se apagó.
-Está bien.
Apenas Nathan cierra la puerta yo entro en la oficina de su padre y comienzo a buscar todo lo relacionado con el caso de mi papá. Tomo todas las fotos que puedo a los documentos, solo pude tomar a unos pocos porque Nathan llamó en ese momento, guardo todo en su respectivo lugar, como si nunca hubiera estado ahí.
-Hola, lo siento no había escuchado el celular - contesto a Nathan.
-¿Ya se apagó?
-Sí, justo ahora.
-Ok, ya subo.
Cierro la puerta de la oficina y Nathan entra de un rato.
-Lo siento, aún no la han arreglado, es un fastidio.
-No, está bien - río.
La comida ya está lista y ahora vemos una película, en parte me siento aliviada por haber hecho ya lo que tenía que hacer y también me siento muy culpable por traicionar a Nathan y su confianza, se siente horrible.
-¿Te sientes bien? - te noto algo distraída.
-Estoy bien, no te preocupes.
-Bueno - me da un beso - te quiero.
-Te quiero.
POV - Don
Salir a por un buen trago es lo que necesito.
-Amigo, sírveme otro.
-Claro señor.
-Él siempre llega tarde.
-Hola Donovan.
-Hablando del rey de Roma. Kevin Benett...
-Y bien Don ¿Qué es tan importante que tuve que mentirle a mi jefe? - ríe.
-Benett... Tu siempre tan directo, tomemos un trago antes.
-No suena mal.
El cantinero nos sirve a cada uno.
-Por todos los años que has intentado arrestarme - digo riéndo.
-Idiota - ríe.
-Ahora sí - digo bajando el vaso - tenemos que hablar...
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El próximo capítulo va a estar super interesante 😱.
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Bye.
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Una Chica Entre Mafiosos
Ficção AdolescenteKelly Ashton es una chica de 16 años, ella es dulce, divertida, inteligente y amable con todos, bueno, casi todos... sin contar que fué adoptada por uno de los más grandes jefes de la mafia irlandesa, un día se da cuenta de que la están siguiendo mi...