𝑯𝑨𝑹𝑹𝒀 𝑷𝑶𝑻𝑻𝑬𝑹: 𝑰𝑴𝑨𝑮𝑰𝑵𝑨𝑺 𝒀 𝑷𝑹𝑬𝑭𝑬𝑹𝑬𝑵𝑪𝑰𝑨𝑺

50.Infidelidad (parte 1)

Te enteras que te engaña:

HARRY
Volvías de una clase de Cuidado de Criaturas Mágicas cuando al lado de la gran puerta de entrada al castillo te encontraste con Malfoy mirando directo hacia ti. Intentaste evadirlo pero su clan de seguidores cabezas hueca te lo impidió.

—¿A donde vas tan apurada, ___? —Te preguntó con un tono de burla en su voz.

—Vete al diablo, Malfoy.

—Oh, veo que tú noviecito Potter te enseñó un par de insultos a tus superiores. Y dime, ___, ¿crees que a la Weasley le esté enseñando lo mismo?

Draco marcó un punto atrás suyo. Volteaste a ver para encontrar con Harry abrazado a Ginny, más cariñosos de lo que esperabas.

—¿Algo para decir?

Aferraste con fuerza el libro de CDCM y pasaste por al lado de tu novio y quien creías tu amiga. Dejando atrás hasta las bromas que hacía el Slytherin.

RON
Habías decidido ir junto a Hermione al callejón diagon para comprar lo que restaba de tu material para Hogwarts.

Cuando terminaron de comprar todo optaron por tomar un helado, pero al intentar entrar a la tienda no pudiste dejar pasar de lado el hecho de que la castaña casi te obligaba a quedarte fuera mientras ella compraba.

—Por Merlin Hermione, ¿a caso es una de tus tácticas para pagar? —te reíste empujándola y así abriéndote paso.

—¡Nono! Por favor ___

Ni bien pusiste un pie en el local, y la campana posada arriba de la puerta sonó dando indicio de que un nuevo cliente se acercaba, divisaste a aquel pelirrojo que tanto querías en una de más mesas más apartadas, besándose con una rubia a quien no pudiste reconocer. Rápidamente tus ojos se llenaron de lágrimas. Volteaste a ver a Hermione quien te admiraba con un deje de tristeza y remordimiento.

—Tu sabías esto —susurraste.

—Yo...___... te juro que... Le dije, pero Ron...

—Oh claro que lo sabías. Lo sabías incluso antes de llegar aquí y no me dijiste nada.

—Perdón —susurró ahora Hermione.

Volviste la vista a donde estaba Ron, aún sin creerlo y esperando que fuera todo una broma de mal gusto, pero no era así. Él estaba ahí, junto a aquella chica, sonriéndole como creías que solo te sonreía a ti y mirándola como creías que solo te miraba a ti. Sin fijarte atrás, sin importar los gritos de Hermione,corriste entre el callejón, entre la gente, perdiéndote en tus lágrimas y pensamientos.

DRACO
—debes escuchar esto —te dijo una amiga arrastrándote entre las mazmorras hasta uno de los salones de clases vacíos del tercer piso.

Cuando llegaron te pegó junto a la pared de entrada. Desde tu lugar pudiste escuchar a unas chicas hablando en voz bastante alta y entre risas.

—Y dinos otra vez, ¿como fue? —dijo la única voz que pudiste reconocer: Pansy Parkinson.

—Increíble —respondió otra chica con voz chillona. —. Era verdad lo que decían de Draco. Ya saben...

Otras tres voces rieron a coro. Tu por tu lado no podías creer lo que escuchabas, pero como el instinto te lo marcó, seguiste oyendo.

—Solo piensen lo idiota que se ve ___ ahora —habló la chica de la voz chillona con aire despectivo —mientras se preocupe por los exámenes otras conocen a fondo a su noviecito. Pero era de esperarse que le fuera infiel. ¿Draco Malfoy enamorado? Aquí todas somos una más.

—a mi no me importaría ser una más en la cama de Draco —dijo Pansy.

Miraste a tu amiga, intentando no llorar a la vez que ella dibuja en un susurro "tenias que saberlo" para luego abrazarte.