MÍO [NamJin]

39

[Narra Namjoon]

Sigo preguntándome cómo es que Jin se pudo fijar en mi, cuando tenía toda su vida resuelta, porque quiso complicársela por mi, que hice para que se fijara en mi, siempre pienso eso y no dudo sonreír al poder tener la fortuna de poder abrazarlo, besarlo y tener su amor, para mi y solo para mi. Sin duda estas vacaciones son lejos las mejores. Podemos estar haciendo nada y ya son momentos inolvidables para mi mente.

Ahora vamos camino a la casa de mis padres que me han llamado casi todos los días para que vaya con Jin por unos días. Tuve que obedecerles y aquí estamos llegando a casa.

-Jin!- exclamó mi madre abriendo toda la puerta de la casa, yo me esperaba un "Hijo, estás aquí" pero al parecer están más feliz al ver a Jin. Entramos a casa y en unos segundos mi hermana se presentaba, toda maquillada, nunca la había visto tan maquillada. Mi padre estaba bastante perfumado y sin fijarme mi madre también lo estaba, en este año que he estado lejos de casa nunca me han recibido así. Esto no puede ser así.

-Bienvenido- dijo mi hermana, sonriéndole a Jin, jugando con su cabello. La mire sin entender.

-Ajá, yo también estoy aquí- dije sonriendo sarcásticamente. Fui a dejar nuestros bolsos a mi habitación y volví a la sala de descanso y Jin conversaba con mis padres mientras mi hermana lo miraba embobada. Le hice una señas de que parara con las miraditas y se sentó derechamente. Es que no le cabe en la cabeza que es mi novio?

-Los extrañe mucho!- dijo Jin sonriéndoles haciendo que mi familia explotara en halagos hacia él y su bella sonrisa.

Después de una tarde entera en hablar de Jin y solo de él. Cada uno se fue a su cuarto y por fin pude tener a Jin para mi.

-Que fastidio- solté después de cerrar la puerta.

-Estás molesto?- dijo Jin tomándome de la cintura.

-No- saque las manos de Jin de mi cuerpo y me estiré en la cama.

-Amor...- dijo Jin, abalanzándose encima de mí, acariciando mi cabello. -Un bebé está molesto porque no dejan a su otra mitad en paz?- dijo Jin con voz tierna, trataba de contener mi risa, pero escuchar la voz de Jin en ese tono, me hacía erizarme pero también me daba risa.

-En todo caso, te puedes ir a la habitación de mis padre para que tengan una pijamada- dije sacando las manos de Jin de mi rostro.

-Oye!- dijo Jin, subiéndose encima de mí. Quede sorprendido al tener a Jin en esa posición, volvieron las imágenes de cuando tuvimos nuestras primera vez y un escalofríos recorrió mi cuerpo.

-Bájate, antes de que sea tarde- dije apresurado, la parte de abajo empezó a moverse. Jin, sonrió malvadamente, sus manos empezaron a recorrer mi abdomen y en unos segundos mi pecho, mientras los labios de Jin se acercaban cada vez más a los míos.

-Cuando te enojas y tratas de poner cara de malo, no sabes las ganas que me dan de morderte por todas partes y besarte hasta que se te quite el enojo- dijo Jin susurrando en mi oído.

-Y por qué no lo estás haciendo?- mi corazón empezó a latir desenfrenadamente. Jin acercó sus labios a los míos y mordió mi labio inferior con fuerza pero después bajando la intensidad. -Te lo advertí- dije tomando a Jin de su cadera, levantándolo, dejándolo bajo de mi, para poder besar cada parte de él.