MÍO [NamJin]

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[Narra Namjoon]

Los rayos de sol que traspasaban las cortinas de mi habitación me habían despertado temprano, pero gracias a eso pude estar más tiempo viendo a Jin descansado plácidamente. Tengo que guardar estos momentos en mi mente, es que como puedo expresar en palabras lo que es ver a Jin durmiendo, unos pequeños destellos de sol le llegaban en su rostro que hacían ver su piel de una forma muy radiante, sus pestañas brillaban al igual que sus labios. Sus suaves y esponjosos labios. Su cabello cubriendo una mayor parte de su rostro, corrí un par de esos mechones rebeldes y Jin empezó a moverse, sabiendo que había sido yo el que había movido su cabello, con sus brazos rodio mi torso acercándome más a él.

-Bueno días Principe- dije acariciando su cabello, mientras él se estiraba.

-Buenos días, amor- me dijo acomodándose en mi pecho.

-Cómo amaneció el dormilón más bonito?- Jin se rió y me miró avergonzado.

-Que vergüenza, ayer me quede dormido cuando tus padres me estaban mostrando su programa favorito, pero tenía mucho sueño-

-No te preocupes, lo entendieron- dije divertido.

El sonido de la puerta interrumpió nuestra conversación.

-Oh... hola- dijo Sungmin en pijama, entrando a la habitación.

-Buenos días. Qué te trae por aquí?-

-Cómo que qué me trae por aquí? Bobo, hoy día están de aniversario nuestros padres, hagámosle un desayuno- se me había olvidado que estaban de aniversario, asentí y me levanté rápidamente, Jin me siguió y los tres fuimos a la cocina a preparar un delicioso desayuno para mis padres. Fui a comprar los dulces favoritos de mis padres, mientras Jin y Sungmin se quedaron adornando la mesa con fotos y regalos que había hecho mi hermana. De pasada compre dos regalos por parte de Jin y mía, los puse en la mesa ya adornada y el desayuno para mis padres ya estaba listo. Sentimos ruidos y eran mis padres que se habían levantado, al llegar a la cocina se emocionaron con lo lindo que había quedado la mesa toda adornada. Abrieron los regalos con felicidad y después tuvimos un agradable desayuno, lleno de alegría.

Después del desayuno nos arreglamos con Jin, para seguir conociendo mi pueblo. Hoy día lo llevaré al camino del mar. Es un camino para parejas, recorre toda la orilla del mar, uno puede hacer picnic, pasar el rato, lo que uno quiera la verdad.

Llegamos al camino, había un negocio de granizados, Jin quería uno así que compramos dos granizados que nos acompañarían en todo nuestro camino por la orilla del mar. Jin estaba maravillado con el color del mar y la tranquilidad que había, sacaba a cada instante fotos, ponía el celular en temporizador y salía corriendo para llegar hacia mí para sacar la foto.

-Ellos no son...-dijo Jin jalando mi chaleco, miré hacia donde él lo hacía y divisé a Zico con Taehyung, sentados mirando el mar mientras se reían.

-Ay no...- dije desanimado, teníamos que pasar si o sí por al frente de ellos, no había otro lugar para pasar. Tomé la mano de Jin y seguimos caminando hasta que nos acercamos a ellos y los dos miramos para al frente.

-Pero mira a quien tenemos por estos lugares- escuche la voz de Taehyung dirigida hacia nosotros.

-Nam...- dijo Zico en tono bajo. Los miré mientras pasábamos por al frente de ellos.

-Cómo es que no tienes otro lugar para pasear a tus parejas? Jin, sabias que a mí también me trajo por este camino y a Zico también...- Taehyung empezó a reírse y Jin paro su caminar.

-Jin, vamonos...- dije jalando de él.

-Eso, hazle caso- dijo Taehyung entre risas.

-No te cansas? Qué sacas con molestarnos cada vez que nos ves? Te hice algo a caso para que me trates de esta forma?- Jin se había molestado y le hablaba a Taehyung tocando su pecho.

-Claro que me hiciste, me quitaste a Namjoon, no crees que eso basta y sobra par tratarte como se me de la gana- quede confuso con lo que acababa de decir Taehyung.

-Yo no te quite a nadie, imbecil, él no se hubiera ido de tu lado si no lo hubieses dejado solo. Adónde estabas tú cuando lo golpearon, cuándo se sentía solo? Adónde? En casa? Con otros hombres? Y sabes quien estuvo en esos momentos difíciles? Yo! Yo estuve! Y por eso él se dio cuenta que personas como tú es mejor no estar, por eso se enamoro de mi. Imbecil!- Yo sujetaba el brazo de Jin mientras miraba a Zico con malestar, él igual me miraba a mí pero con lastima, tenía una conversación pendiente con Zico, pero claramente no era el momento.

-Ya Jin, ya está. No le tienes que dar explicaciones a él, vamonos- Tome a Jin de la cintura, y empezamos a caminar nuevamente.

-Lo detesto, que asco de persona y Zico que hace con él, claro, son tal para cual esos dos, por eso se llevan bien- Jin en todo el camino de regreso hablo de Taehyung y Zico, no me tomaba en cuenta, caminaba más adelante.

-Jin...- dije un poco molesto, Jin me miró y se acercó a mi.

-Y tú! Para la próxima llévame a un lugar en donde no hayas llevado a todas tus parejas- Jin estaba muy molesto y me dolió que haya dicho eso, la verdad nunca me había dado cuenta que a ese camino he llevado a mis parejas, pero es que es un lugar muy lindo y tranquilo. Entendía el molestar de Jin, en estos momentos no sabía que hacer para calmarlo. Llegamos a casa, no había nadie en ella mis padres habían ido a cenar y mi hermana estaba con sus amigas.

Jin fue a la habitación y empezó a guardar todas sus cosas.

-Pero...Jin, por qué te vas?- ahora el que ya se estaba molestando era yo.

-Por qué? Lo preguntas? No quiero estar aquí- dijo metiendo sus cosas con brutalidad al bolso.

-Pero por qué eres tan niño pequeño!? No podemos hablar las cosas? Te tienes que ir como el niño taimado?- le estaba gritando pero es que ya estaba colmando mi paciencia.

-No me grites! Que te gritó más fuerte!- me hizo sacar un suspiro profundo y un grito de saturación.

-Jin, te vas y de verdad que ya no te iré a buscar, como me molesta que hagas esto, siempre es lo mismo, te taimas y quieres desaparecer. Por qué no hablas las cosas? Por qué escapas? Si quieres ándate, no me hables más, pero ten en tu mente, en tu conciencia que yo no iré más detrás de ti- Jin cerró su bolso y me miró.

-Es que si seguimos discutiendo te haré daño con mis palabras. Cuando estoy enojado digo cosas sin medirme, entonces prefiero irme antes de arrepentirme.

-Me estás haciendo daño por comportarte de esta forma.

-Es mejor que me vaya- Jin tomó su bolso y camino hacia la entrada de la habitación, me puse en medio y lo miré con lágrimas en mis ojos. -Amor, por favor, no llores...- Jin soltó su bolso y acarició mis mejillas que en ese momento se estaban mojando con mis lágrimas.