Sin complejos.

Capítulo 31.

-Yo no lo creo.
-¿Por qué no? –me miró desanimado.
-Porque si conseguiste a Rebecca, que sinceramente es una chica muy... atractiva, puedes conseguir cualquier otra Justin.
-Pero te digo, fue suerte de principiante, o algo así.
-No, no –negué con mi cabeza–. Justin, el conquistar a una chica no necesitas físico, y vaya que si lo necesitaras tu tienes suficiente –el me miró tímido y sonrió–, no tengo porque mentirte.
-Pero de igual forma, Evelyn. No me creo capaz.
-Vaya vaya Justin, si yo pensaba que tú eras de esos chicos rompe corazones. Te doy mi palabra de que si dejas a una chica que solo te hace sentir mal, conseguirás cien más, muertas por ti, y entre ellas estará la indicada –sonreí y Justin se levantó a abrazarme. –¿Por que siempre agradecen cuando se dice la verdad? –sonreí.
-Porque algunos mienten, y otros dicen cosas solo por compromiso... Tú no. Bueno, al menos quiero creerte en esto.
-¿En serio? –Justin me miró tiernamente.
-Lo juro...
-Justin, ¿que querías decirme sobre Ryan?
-¡Claro, que egoísta soy! Casi lo olvidaba.
-Bueno, ahora dime –me senté de nuevo y Justin me imitó.
-Es sobre Ryan...
-Bueno, eso ya lo sé –reí–, lo dijiste al principio.
-Bueno, es sobre Ryan y tú –dijo con un tono tenebroso que hizo que me erizara. Lo hacía apropósito, lo sé. ¿Que querría decirme sobre Ryan y yo?–. Sé que esto hace tiempo que no se usa, pero los amigos están cada vez que los necesites... Tú, debes saberlo –asentí– le gustas a Ryan, y creo saber que él a ti también –sonreí sonrojada.
-¿Que tiene todo eso?
-Sabes precisamente a lo que voy, Eve...
-No –negué incomoda– nada que ver.
-Si tu lo dices, el punto es que le gustas a Ryan, ahora dime ¿él te gusta a ti?
-Yo, eh... –dije nerviosa– ¿Que si me gusta Ryan? No entiendo.
-Ya te delataste –soltó una risa que se me contagió por los nervios. Era cierto, había dicho una tontería, me estaba hundiendo facilmente– ¿Y entonces?
-Ya, de acuerdo, sí me llama la atención.
-¿Se besaron, no? Eso creo que viniendo de ti significa un gran: SI, ME GUSTA.
-¡Buena ya, basta de dejar de demostrar lo mucho que me conoces! ¿Qué quieres con saber eso?
-Que Ryan quiere algo, tú sabes, que ustedes dos... –dijo sin encontrar palabras–. ¡Quiere andar contigo!
-¿Andar, a caballo?
-Evelyn!!!! –dijo quejándose mientras soltaba un par de risitas traviesas–. Me refiero precisamente a que el me pidió que te preguntara, porque si decías que sí, él quiere que te pida ser su novia... La de Ryan, obvio ¿no? –dijo nervioso.
-Sí, sí, obvio... Yo...
-Dices que sí ¿cierto? –rió.
-No lo sé –miré a todos lados.
-¡Vamos! Ustedes tienen buena química –dijo sonriente.
-¿Y que con eso? Es decir... muchos tienen química, pero no por eso van a andar de una.
-Ya va, ¿te preocupes el poco tiempo que se conocen?
-Lo dices por ser amigo de Ryan.
-Y por ser tu amigo te digo que no te preocupes, además que, ¿te va a importar lo que dicen los demás? Si tú eres pionera de ignorar esas cosas.
-Ya, Justin, deja la psicología inversa.
-Es solo una duda  –sonrió divertido– depende de lo que tu pienses.
-¡Dile que sí! –sonreí ansiosa–. Dile que si, Justin –Justin me miró sonriendo y se levanto corriendo dirigiéndose a la casa.