Sin complejos.

Capítulo 15.

 Comencé a caminar por el pueblo con Ryan, estábamos mirando, me regaló una bebida y un pendiente del cuál me enamoré. Era detallista y caballero, siempre que íbamos caminando y yo estaba de lado de calle, me hacia de lado y me decía: "Debes ir de lado del aparcado, no puedes correr riesgo" y debo admitir que entonces, los dos sonreíamos. Estuvimos andando hasta que decidimos sentarnos, pues según él, Justin se tardaría muchísimo antes de aparecerse con Rebecca por aquí.

-¿Quieres que esperemos a Justin? –preguntó Ryan.
-Sí, ¿pero vendrá con su novia?
-Lo más probable, ahora que ha logrado verla de seguro vendrá a presentártela...
-¿Por qué estás seguro?
-Porque así es Justin, no tiene amigas, así que tú eres la niña de sus ojos ahora –sonrió tímido.
-Que ternura –sonreí–, yo nunca había tenido amigos... No tan unidos. Ya, corrijo, casi nunca había tenido amigos –sonreí melancolica–, de ningún tipo.
-Evelyn –te miró enternecido–, quisiera creer que solo exageras. No me gusta cuando dices esas cosas... Y te pones  tan así –tomo tu mentón con dulzura.
-¿Como me pongo? –sonreíste.
-No lo sé, acongojada –sonrió contigo–. ¿Y, una amiga a quien contarte tus secretos?
-Sí –sonreistes–, Rorie. Una tía.
-¿Tía? –Ladeo su cabeza–. Me refiero a una chica, de tu clase.
-Muchas se metían conmigo.
-¿Nunca pensaste que sería envidia?
-¿De qué?
-De ti, eres muy bella.
-¿Belleza? –reíste a carcajada limpia–. ¿Belleza, Ryan?
-Claro que sí Ev. Eres hermosa.
-¿Y quien lo piensa? Por que, mientras yo sepa, ningún chico se ha interesado ni se interesará en mí.
-Dios –bufó–, debes quitártelos a golpes.
-No, no tengo ningún pretendiente, en serio Ryan.
-Eso cambiará entonces –dijo tímido–, me alegra no tener competencia.
-¿Que dices? –pregunté comenzando a sentirme incontrolablemente nerviosa.
-No nada –peinó su cabello con la mano–. Mira, allá viene Justin...
-¿Y esa es Rebecca? –miré a Ryan–. Es muy linda...
-Sí, es Rebecca, y sí, también, es linda...
-Hola chicos –llegó Justin saludando sonriente, tomado de la mano de la chica delgada con cabellera y pollina perfecta. Su pelo era liso, tan largo a la altura de su cintura y negro como el azabache, su pollina estaba cortada rectamente y caía sobre su frente de porcelana, sus labios eran rojos y su piel blanca como un algodón y sus ojos eran tan oscuros como su cabello. Era un poco tenebrosa, pero sobre todas las cosas hermosa. Entiendo por que no deja de hablar de ella–. Ella es Rebecca, mi novia.
-Hola Rebecca –comentó Ryan sin importancia, ella respondió con una voz muy suave.
-Hola Ry.
-Evelyn –comentó Justin–, ella es Rebecca. Rebecca, ella es la famosa Evelyn –sonrió.
-Hola Eve –me ofreció su mano sonriéndome–, es un placer por fin conocerte.
-Gracias –sonreí–, digo igual Rebecca, había escuchado mucho de ti.
-Puedo decir lo mismo –respondió bruscamente, mirando a Justin.