Estaba ahogada, sumergida en la vergüenza dentro de mi propio cuerpo, no tenía escapatoria, había dicho que sí, pero algo dentro de mí no se estaba quieto. Me sentía nerviosa, no quería ver ni a Justin ni a Ryan a la cara, por mi mente pasaban ideas descabelladas como: "¿Y si es solo una broma de Justin y Ryan para ver si era capaz de decirle que sí, con el poco tiempo que nos conocemos? Y lo hice". Pero enseguida las descarté, confiaba plenamente en ellos. ¿Pero y si me traicionaban, o lo consideraban sólo como una broma? Después de todo, Matilda me había dicho que algunos chicos no miden esas cosas, que llegan a ser crueles sin darse cuenta... Y que tampoco podíamos confiar completamente. ¡Me estaba desesperando! Sentía una impotencia increíble y no sabía que hacer, pero cuando sentí que realmente iba a explotar con tantas emociones juntas, fue en el preciso instante que alguien tocó la puerta de mi habitación. ¿Era Justin para contarme la broma que habían provocado? ¿O era Matilda para decirme que...? Dejé de pensar y me giré hacia la puerta, Ryan estaba con la cabeza gacha y las manos en los bolsillos, mmh, síntomas de culpa. ¡Basta Evelyn, basta!
-¿Puedo pasar?
-Sí, pasa Ryan –dije penosa.
-¿Podemos... hablar? Es decir, tengo que hablar contigo. Tú sabes, me refiero a que...
-¡Ryan siéntate! –Le ordené– Por favor.
-Lo siento es que... Siento que cometí un error.
-¿Un error Ryan?
-Sí, más que un error, lo lamento.
-¿Que lamentas Ryan? No te entiendo –titubeé nerviosa.
-Haber hecho eso, sé que está mal, después de todo tengo que afrontar las cosas por mi mismo.
-¡Ryan Butler, déjate de rodeos y dime de una vez! –Ryan de inmediato me miró sorprendido, como diciéndose: ¿Que diablos?
-De acuerdo –dijo como intentando calmarme–, lamento haber mandado a Justin por mí, tenía que haber sido yo el que te preguntaba todo, pero es que no estaba seguro... O bueno –soltó una risa–, sencillamente no me armaría de valor tan fácil, no soy de esos.
-Tranquilo –susurré fuera de onda, no me esperaba esa respuesta, nada parecido siquiera. ¿Ryan se estaba disculpando por no ser él, quien me dio la cara? La última vez que un chico me pidió ser su novia, fue en sexto de primaria, y si, definitivamente fue un amigo quien lo hizo por él. Sentí como él se acercaba peligrosamente a mí y me rodeaba con sus brazos, su aire estaba en mi oreja, susurrándome como un viento soplando hacia este/oeste, me sentí con escalofríos, nerviosa.
-Lo siento Evelyn, pero recrearé de nuevo esa propuesta, te espero afuera en media hora... ¡Y arréglate para algo, uh, como un picnic quizás! –comentó apoyado en el marco de la puerta mirándome, con esos ojos azules que me hacían sentir en el cielo. Sí, en el propio cielo con nubes y un ángel incluido, quizás ahora, solo para mí.

ESTÁS LEYENDO
Sin complejos.
Fanfiction«Sin complejos es saber vivir solo bajo tus propios paradigmas. Y recuerda que tus paradigmas, son los lentes con los que ves el mundo. Una historia de amor, experiencias y muchos lentes por limpiar.» Segunda publicación. Primera publicación en nue...