Capítulo 8

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Fue irse Liam, y empecé a buscar esa lista con desesperación

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Fue irse Liam, y empecé a buscar esa lista con desesperación.

Hace un par de años, en medio de una borrachera con Marcus, decidimos hacer una lista de "cosas para ser mi mujer ideal", Claro que la de Marcus era "Hombre ideal", y por supuesto que me obligó a hacerla. Fue un dolor de cabeza, mayor que con la migraña que desperté al día siguiente, el tener que soportar su voz de borracho rogándome que hiciéramos la bendita lista. Así que, acepté como el buen amigo que soy.

Mientras que la lista de Marcus incluía cosas como "Saber dar la parte trasera", la mía contenía lo más importante que quería de una mujer. Nada sexual, solo características emocionales importantes. La regla de que ame los libros, resultó ser la más importante debido a mi trabajo, y la de "ser tierna" junto a la de "que quiera muchos hijos" están en segundo lugar. Por ello, aquí estoy como loco buscando la lista para ir comprobando si Hollie Tomson Hamilton, realmente cumple con todas las características de la lista. Eso significaba, tener que conocerla un poco más.

— ¡Marcus, Me voy!

Marcus llegó corriendo hacia la puerta de entrada, donde yo estaba ya con mi abrigo puesto y la sombrilla en la mano. Anoche le conté sobre lo que Liam y yo descubrimos y mis intenciones en descubrir que otras características cumple Hollie. De nuevo, mi lado bueno quiere que las cumplan todos, mientras mi lado malo quiere que me olvide de la lista y solo disfrute una noche de su muy atractivo cuerpo. Lado romántico contra lado pervertido siempre en disputa.

—Recuerda ser siempre amble, llevarle una casta de frutas y tener la aprobación de su familia —arregló el cuello de mi camisa de vestir, que llevaba debajo del abrigo, antes de subir el cierre de este— Usa tu encanto y si todo sale bien, pronto usaras tu lengua.

Por supuesto que no podía faltar un comentario típico de Marcus el pervertido satiriasis.

—Mi encanto está siempre activado, querido —Le guiñé el ojo para molestarlo y él idiota se abanicó el rostro con la mano.

—Por eso eres mi mejor amigo, Nico —Palmeó mi hombro— Porque un ser tan atractivo como yo, solo puede rodearse con gente atractiva. Ley de la vida.

Me despedí de él y fui rumbo a la casa de Hollie, dirección que Liam me consiguió con sus contactos misteriosos.

Cuando pasé enfrente de una floristería y vi unas preciosas rosas blancas en el escaparate, no pude evitar pensar en lo hermosa que se miraría Hollie, desnuda en la cama, rodeada de rosas blancas. Ya que no puedo tener ese tipo de actos con ella, aun, decidí comprarlas como un regalo y una disculpa por haber sido, en parte, el causante de su caída. No suelo comprar flores para las mujeres, pero la ocasión lo amerita.

Al crecer siendo un "Anti-mujeres" y un "anti-afecto", me he perdido pequeños placeres de la vida. Por ejemplo; el primer beso lleno de ternura e inocencia o la primera vez con romanticismo. Mi primer beso fue a los 15 años, en un momento loco de lujuria con una chica de 17 años. Sí, mi primer beso fue también el día de mi primera vez. Obtuve un dos por uno, volviéndome el rey del lugar. Hubiera dejado ese título por algo de amor verdadero... pero no se puede tener todo en la vida. Tienes que decidir: Sexo o amor. Ese día me decidí por el sexo y fui feliz, soy feliz. ¿A veces quiero algo de amor? Todos queremos amor. Pero nos toca aguantarnos y vivir con lo que tenemos.

En este momento, la vida me puso a Hollie en el camino, es momento de saber si puedo obtener las dos cosas juntas, por primera vez en mi vida.

Tuve que revisar la dirección en mi GPS unas seis veces. Incluso le tome foto a la casa y se la mandé a Liam, preguntándole si al entrar me encontraría con una fiesta sorpresa, llenas de stripper para sacarme la loca idea de que Hollie podría ser mi mujer ideal. Pero solo recibí un mensaje mandándome a la mierda por interrumpir el único momento del día que puede disfrutar de su esposa. Alguien necesita algo de atención urgentemente.

Así que... ¿Me están diciendo que Dimitria Hamilton y mi gran modelo a seguir, Derek Tomson, viven en una casa normal? ¿Nada de una mansión con un enrome lago al frente? Seguía mirando la pequeña casa hechas de ladrillos color rojo, con una pequeña chimenea en lo alto, pocas ventanas con cortinas color crema, y un pequeño jardín al frente. El camino hacia la puerta estaba decorado con unas pequeñas flores color rosa. ¿Esta es la dirección? ¿En serio? Oh, tal vez es la casa de los sirvientes y la mansión esté al fondo. Si, podría ser.

— ¿Deseas algo?

Me voltee para ver al dueño de la voz. Un hombre alto, musculoso, cabello oscuro y con una mirada curiosa, agarraba fijamente la mano de su novia, Demitria Hamilton. Dios mío, este hombre es el sueño imposible de Marcus... No lo culpo, hasta podría volverme gay por este hombre. ¿Pero que mierdas digo? ¡Al punto!

—Sí, busco a Hollie —levanté el ramo de rosas para que pudiera verlo— Le traje unas rosas para animarla un poco.

Me miró algo desconfiado pero cuando Demitria se rió, su rostro se llenó de ternura. ¿Así nos vemos los hombres cuando estamos enamorados?...

—Él es Nicolás Grant, el escritor de novelas eróticas —le explicó por mí. Dio un paso hacia adelante, examinando las rosas— Muy lindas, pero te hizo falta la caja de chocolates.

—Mierda, no lo había pensado.

Ella se dio la vuelta y le hizo un puchero a su novio. Ah, mujer manipuladora. Sabía que no todo puede ser bueno en una mujer con cuerpo tan pequeño y un lindo rostro. ¿Hollie será manipuladora también? Tal vez debería regresarme por donde vine y olvidarme de ella.

— ¿Le das la caja de chocolates que compraste para mí? —Él la fulminó con la mirada— Sher...—ronroneó con sensualidad. Vaya... Esa es una muy buena carta.

—Bien –accedió el, dándose por vencido— Pero cuando vuelva del trabajo, hablaremos sobre hurgar en mi maleta de gimnasio.

— ¡Si no lo hago, tu ropa sucia seguiría sucia!

Él abrió a puerta trasera del coche, un lujoso porsche color negro. Empezaré a considerar el cambiar de carrera y ser modelo. Me tendió una caja rosada, que acepté después de agradecerle.

—Me voy antes de que tenga que darle mis bóxers también —Ella rio y se colgó de su cuello. La rodeo con sus brazos y le dio un pequeño beso en los labios— Prométeme que no destruirás la casa de tus tíos.

—No prometo nada, Sher...

Pareja derramando de miel a la vista. Me di la vuelta para darles su momento de privacidad, me voltee solo cuando escuche el motor del auto encenderse. Demi me sonreía con una sonrisa que me provocó escalofríos. Esta mujer da miedo...

—Entremos antes de que llueva.

Pensé que daríamos la vuelta a la pequeña casa pero no, ella abrió la puerta con toda la confianza del mundo y me hizo pasar. Lo primero que vi fue un cuadro colgando de una pared, de tres niñas y tres chicos. De inmediato reconocí a la pequeña de ojos azules con sus lentes de niña nerd. Una adorable nerd.

Luego vi a la dueña de esos ojos azules en carne y hueso, mirándome sorprendida desde el sofá. No escuche lo que dijo Demi ni el hombre a la par de Hollie, estaba perdido en sus ojos azules.

Salí de mi trance cuando un trueno se escuchó... Luego quedamos en completa oscuridad.

¿Traje la mala suerte conmigo o qué?

¿Traje la mala suerte conmigo o qué?

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Hamilton Lover |Serie Hamilton| #2 (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora