Capítulo 13

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Hay razones para desconfiar y temer

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Hay razones para desconfiar y temer. Razones que se relacionan a experiencias pasadas, situaciones traumáticas o que nos generaron mucho dolor. Un ejemplo de eso es Asheron, quien tuvo que pasar por cosas horrible para poder llegar a donde está ahora. En el sofá individual de mi casa, con Demi en sus piernas.

— ¡Hollie, enamorada de un hombre! —canturreó Demi por décima vez. Estoy tentada a tirarle mi taza de té caliente en su cara— Creí que no viviría para este momento.

La tentación creció y tuve que dejar mi té en la mesita de centro para no ceder ante ella.

Cuando Demi dijo que tenía que hablar conmigo, no creí que sería una charla sobre cómo pasé la noche con Nicolás. Aún que, si se me cruzó por la mente un par de veces. Sin embargo, las rechacé pensando que sería algo sobre ella y Asheron. No debí haber ignorado la vocecita de mi subconsciente advirtiéndome de las garras de mi malvada prima.

—Grace, deja a la pobre Hollie tranquila.

Suspiré agradecida cuando Demi dejó de cantar y sólo hizo un puchero. Esta mujer tiene una obsesión con los pucheros, pero al ver el rostro de Asheron, puedo asegurar que a él le encantan.

—Bien, ¿entonces dices que una mujer llegó a su apartamento y él le cerró la puerta en la cara? — me preguntó Asheron, pensando en mis últimas palabras antes de que Demi me interrumpiera. Asentí—Eso es algo extraño.

—Eres la amante—Asheron mordió el hombro de Demi con suavidad y ésta rió—Vale, lo siento. Sólo digo que si hay dos mujeres, un sólo hombre... No tengo explicación más que esa. Una de las dos es la amante.

—Puede ser la ex novia, alguna prima que odia, no sé. Pero lo que sí sé es que ningún hombre pasaría la noche con una mujer sin meterle mano —miró a Demi con ternura— Al menos que esté enamorado de esa mujer.

Ya te creo yo que no le metes mano a una mujer sólo por estar enamorado. Es cómo decir que Demi no le mete la mano en el pantalón cuando vemos películas en la oscuridad.

No soy tonta, Asheron. Soy virgen, no tonta.

— Hay que tener mucha fuerza y una bolas moradas para hacer eso —Asheron negó con la cabeza, dándose por vencido con Demi y su boca—Así cómo las bolas de Asheron cuando me hizo el amor por primera vez.

Sentí lastima por el pobre hombre. Creo que Demi nunca tendrá la boca cerrada ni aunque se la cosan.

—Sugiero que hables con él sobre eso.

—Sugiero que le pidas a tío Lucas que investigue sobre su pasado.

Los consejos de ambos son tan distintos y sin embargo, ellos son demasiado perfectos juntos. Me pregunto sí así nos vemos Nicolás y yo...

— Yo sugiero que le cuentes a tu madre tus problemas y no a la demente de tu prima.

Mamá me sonrió cuando Demi bufó molesta por las palabras de mamá. Asheron se levantó del sofá, poniendo a Demi de pie a la par suya y agarró su mano.

—Nuestro trabajo aquí está hecho—nos sonrió cuando Demi balbuceo un "tonto"—Me llevo a mi dulce novia antes de que decida empezar a gritarnos. Adiós.

Milagrosamente Demi no dijo nada y sólo se fue junto a él. Eso sí es amor...

Mamá se sentó a la par mía, agarró mi mano y me sonrió con ternura, una sonrisa que siempre viene antes del llanto y del "mi niña ya es una mujercita". Es la misma sonrisa que pone papá antes de su "Si tiene novio, le cortaré la cabeza." Es por eso que siempre suelo acudir más a Zac, él no es tan dramático.

—Así que pasaste la noche con un hombre.

Vaya forma de iniciar una conversación, mamá. Ahora tengo el rostro rojo como un tómate. ¿Cómo tengo que hablar de esto con mamá sin morir de la vergüenza?

— No pasó nada, sólo dormimos....

—Aunque hubiera pasado, no tendría nada de malo —acarició mi cabello con suavidad— Ya eres una mujer adulta y responsable. Es hora de que empieces a buscar el amor de tu vida y dejes de pensar tanto en la familia o en tu trabajo. Todos necesitamos amor, unos más que otros, pero al final es lo más esencial de la vida. ¿Sabes que pasa sin él amor? —negué con la cabeza— Te vuelves frío, arrogante y levantas mil muros a tu alrededor, sumergiéndote en soledad. Y ni yo, ni tu padre, ni nadie quiere que tú, nuestra dulce niña, acabe de esa forma.

—Es gracioso que digas eso porque él suele ser muy arrogante y a veces pareciera que levantara sus muros cuando toco ciertos temas, como su....—entonces entendí todo un poco más— familia.

—Un hombre con problemas familiares —asintió con la cabeza levemente—Podría ser el causante de su forma de ser.

Entonces la mujer que llegó a su apartamento anoche pudo haber sido alguien de su familia y como está molesto con su familia, por eso le cerró la puerta en la cara.

Tiene sentido...

—Cambiando de tema —mamá agarró mis dos manos entre las suyas. Sus pulseras de oro hicieron contacto con mi pulsera llenos de dijes, un regalo de Tory— Ya tenemos el dinero para los orfanatos contado y listo para ser entregado. Sólo necesitamos a una personita que vaya en representación a alguno de ellos. ¿Quieres ser tú?

Sonreí encantada con la idea pues amo a los niños y nada me gusta más que verlos sonreír.

— Lo haré —acepté sin tener que pensarlo— Y compraré algunos juguetes para ellos y un poco de ropa. ¿Está bien?

— Me parece perfecto, cariño. 

 

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Hamilton Lover |Serie Hamilton| #2 (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora