Una escritora de novelas románticas que le huye al amor... Irónico, ¿no?
¿Cómo se puede vivir la vida cuando sientes un vacío? ¿Qué pasa cuando te rompen el corazón y luego te quedas... sola? ¿Puedo seguir mi vida como si nada? No sé y de igual form...
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La pregunta más frecuente en la vida es: ¿Cómo sobrevivir a tu familia? La respuesta a esa pregunta es muy fácil y funciona muy bien... al menos con nuestra familia.
— ¿Chad? —pregunté incrédula, mirando a Demi colgada del cuello de su querido hermano/tío.
—Hola, Hollie.
Mi relación con Chad es buena, normal en realidad. Mientras que él se encargaba de lidiar con Demi y Gregg, también de proteger a la pequeña Tory de la maldad de los chicos, yo estaba... apartada, leyendo o con Zac. Al ser el mayor de todos nosotros, se sentía un poco raro el jugar con él y su estatura me daba algo de miedo. Era una niña muy miedosa y tímida. Pero Chad me cae bien, le quiero mucho al igual que a todos y no negaré que si me ayudó en muchas cosas... como salvarme de la vez en la que Demi intentó cortar mi cabello o cuando Alex quiso que fuera su "probadora" de comida. En otras palabras, una me quería dejar el cabello más feo que el de "Dora, la exploradora" y el otro quería envenenarme. Es por eso que cuando él se fue y ya no había nadie que pudiera controlarles a todos, dejé de ser miedosa y empecé a defenderme, dejando atrás mi timidez.
—Demi, deja al pobre de Chad en paz —dijo tía Alaska, mirando mal a Demi. Ella obedeció pero Chad la cargó en brazo, dándole vueltas como cuando era una niña— Y luego dices que Chase es quien la consiente mucho.
— ¡Alguien está celosa! —gritó tía Lucy, entrando en la sala seguida de tío Lucas, quien solo caminó hacia mí y me envolvió en sus brazos, mirando mal a Chad— Hablaba de Alaska pero veo que tu también estas celoso, cariño.
—Ya me quitó a mi bruja desalmada —Demi gritó un "oye". Tío Chase suele hacerlo mismo siempre que tío Lucas le hace un comentario ofensivo. De tal palo, tal astilla— No me quitará a mi dulce sobrinita.
¿Alguien dijo familia de locos? Pues no es la familia Adams, es la familia Hamilton.
— ¡Maldito! ¡Suelta a mi hija!
Y papá se une a la locura. Genial...
Para suerte de todos, quien cocinó a cena fue mamá y no la tía Alaska. Todos aquí sabemos que un poquito de su comida puede matarnos a todos. Bueno, esa ya es una broma porque la verdad es que ha mejorado mucho... lástima que no puedo decir lo mismo de Demi, quien hace una semana me llevó unas galletas horneadas a la editorial y terminé vomitando todo el día. Muy dulce de su parte... Ya cuando cada quien se sirvió su plato, yo me senté a la par de Zac y de Ian, él único que está un poco perdido con tanta comida en la mesa. Mamá es una exagerada a la hora de cocinar.
— ¿Sabes que hace Chad aquí? —le pregunto a Zac en susurros para que nadie más nos escuche.
—Pregúntale a Asheron o a Ian.
Oh vaya... Ahora entiendo todo. Me concentré en comer mi comida hasta dejar el plato vacio. A pesar de que las cenas familiares son casi obligatorias, Chad no siempre viene solo para eso. Sus visitas siempre tienen que ver con anuncios importantes o para poner orden, pues es el más "normal" de todos. Así que esta visita es por un anuncio... y un anillo de diamantes. Porque mientras Hollie progresaba en su fama de escritora, Demi y Tory formaban su familia. Yuju...
