NamJoon tenía 11 años cuando su familia se mudó a un lugar un poco "más tranquilo".
Sus padres gozaban de una buena estabilidad económica, por lo que se podían permitían esos lujos. Cuando el pequeño Nam llegó al vecindario se asustó al notar el silencio, para sus padres era lo que estaban buscando pero él, un pequeño que sólo quería jugar no, ¿y los niños?, ¿dónde estaban los niños cómo él?, ¿con quién jugaría?
No tenía hermanos, y sus primos eran mucho más grandes que él, sus amigos se habían quedado en su ahora antigua escuela, no les podía decir algo como: tienen que venir conmigo porque no quiero quedarme solo. Era injusto.
Encerrado en su cuarto tratando de jugar por su cuenta, llegó a la conclusión de que tendría que hacer, al menos, un amigo nuevo cuando ingresara a su nueva escuela.
Y tan rápido como un parpadeo, el primer día de clases llegó. La mañana fue tranquila, silenciosa, ¿armoniosa? Se estaba acostumbrando al leve cantar de los pájaros y a que el sol apareciera brillando, alumbrando todo, a que el sonido de los coches ni se escucharan pues eran pocas las veces las que pasaban por esa calle en particular.
Escuchaba a su mamá mover algunos trastos en la cocina, mientras su papá veía las noticias de la mañana.
Esa clase de tranquilidad le estaba empezando a sofocar. Quería ruido, quería ser ruidoso, pero no quería hacerlo solo.
Este día tendría que hacer al menos un amigo. Adiós a la pena, adiós al nerviosismo.«¡Tengo que hacer un amigo nuevo!», pensó emocionado.
Bajó directo a la cocina, su madre estaba colocando los platos sobre el desayunador. Miró a su hijo que se estaba sentando y emitió un sonido de ternura.
—Mi hijo está muy guapo hoy —dijo sonriente.
Nam se sonrojó. Su uniforme le quedaba un poco grande pero de esta manera le hacía ver realmente adorable.
—Buena suerte hoy, campeón —dijo su padre al tiempo que sacudía sus cabellos.
NamJoon necesitaría toda la suerte del mundo, sin dudas.
Cuando llegó a su salón asignado notó a sus compañeros de clases, algunos balbuceaban algo, otros simplemente veían sus cuadernos y había un niño que miraba a la ventana desinteresadamente.
—¿Kim NamJoon? —Escuchó a alguien preguntar detrás de él. Alzó su vista y vio a una mujer adulta sonreírle. Él sólo pudo asentir—. Entra, ya vamos a iniciar —dijo dándole palmaditas a su espalda para que hiciera caso.
Minutos después se enteró que era su maestra asignada, y lo hizo presentarse ante el grupo.
—Mi nombre es Kim NamJoon, ¡espero llevarnos bien! ¡Gracias! —chilló emocionado haciendo una sutil reverencia para después ir a su lugar correspondiente.
Hasta ese instante se percató que a lado de él estaba el niño que miraba por la ventana, un pequeño pálido con ojos como gato. Lo observó fugazmente para después poner atención a la clase, aunque no pudo del todo. Sentía una incomodidad palpable, alguien lo estaba viendo, lo sofocaba.
Miró de reojo a su izquierda, ¡el chico pálido lo estaba mirando! ¡No te asustes, NamJoon! ¡Él podría ser tu amigo!
Sin poder soportar más la mirada y con ganas tremendas de empezar a socializar, giró bruscamente su cabeza para mirar a los ojos a ese chico.
Estaba por sonreírle cuando éste apartó su mirada para dirigirla al pizarrón. Nam hizo lo mismo algo triste, ¿lo había asustado?
Segundos después sintió una mirada sobre su persona, ¡el chico pálido lo estaba haciendo de nuevo!
Nam lo miró una vez más, deteniéndose en sus ojos y el pequeño volteó su cara otra vez.Pero ¡¿qué?!
«¡Niño pálido, no seas así!», pensó en decirle pero se detuvo. Quizás sólo lo miraba para hacerlo enojar y así la maestra lo llevaría a detención. No, él no iría a detención. Él podría hacer otros amigos.
Total, ese niño pálido se lo pierde.
Al final de la jornada sí que había hecho al menos un amigo, estaba realmente feliz por su logro. Y más porque él vino solito, ¡nadie lo obligó!
—Mi nombre es HoSeok, ¿quieres ser mi amigo? —Había preguntado un pequeño con cabellos castaños, casi de su estatura.
NamJoon le sonrió y asintió contento. Jugaron durante el receso y HoSeok compartió su almuerzo con él.
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Editado 4/11/18.
Editado 13/07/19.
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«Háblame» [NamGi]
FanfictionEl amor que siente NamJoon se ha ido descubriendo poco a poco. ¿Cómo podría decirle "te quiero" a YoonGi sin arruinar su amistad? O ¿Cómo podría YoonGi amarse a sí mismo? ¿Cómo podría decir "te quiero"?