pt 18

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YoonGi había llegado a su casa con ayuda de NamJoon y HoSeok. Su madre, como se lo esperaban, de inmediato preguntó sobre lo sucedido. Muchas preguntas salieron de su boca pero, al contrario de las otras ocasiones, ésta vez cedió al diálogo para recibir una buena explicación aunque en el rostro de la señora Min había preocupación, molestia y algo de angustia. Era su hijo de quién estábamos hablando, no pudo evitar sentirse peor madre de lo que ya se sentía. Observó como sus amigos lo ayudaban a subir por las escaleras yendo detrás de ellos para poder abrir la puerta de la habitación de su hijo.

Recostaron a YoonGi sobre su cama, se había quedado dormido casi de inmediato. Su cuerpo se sentía agotado a pesar de haber descansado en la universidad, las pastillas controlaban un poco el dolor de sus músculos; sus muñecas, tobillos y plantas de los pies dolían demasiado, incluso le ardían. No recordaba exactamente de qué manera sucedió todo, de lo único que sí podía acordarse era que había ido al baño y de ahí todo sucedió rápidamente. Visiones de los amigos de SeokJin aparecían fugazmente en su memoria y nada más.

La señora Min estaba platicando con los chicos en la sala. Ambos enfrente de ella como si fueran a estar dentro de un interrogatorio... Aunque lo era.

—¿Qué ha ocurrido? —preguntó la mujer sintiendo su corazón encojerse un poco.

HoSeok estaba planeando hablar, pero al final cedió por darle la palabra a su amigo. NamJoon trató de explicar sin tanto lujo de detalle lo que ocurrió, quizás una que otra mentira... YoonGi realmente le había insistido para que no contara la situación. El moreno se las arregló para modificar la información y decirle a la señora Min que había sido uno de esos tantos locos que les gustaba molestar a los demás compañeros, diciendo rápidamente que el responsable ya estaba más qué listo para que el director tomara cartas en el asunto.

—Pero es que yo no me puedo quedar así —habló la señora Min después de que NamJoon terminara su relato—. ¿Cómo es posible que algo así sucediera? ¡Estaban en la universidad! Ese chico debería irse a la cárcel o algún lado, ¿por qué con mi hijo? No lo entiendo.

Nam y Hobi se miraron, ambos carecían de respuestas para eso. NamJoon se sentía aún más culpable por mentirle a la señora Min, pero se sentía entre la espada y la pared. La madre de Yoon en verdad se veía preocupada, y en un principio se asombraron por la actitud tan diferente que había conservado para con ellos, a diferencia de las veces anteriores. Estaba esperando ser echados como era la costumbre, sin embargo nunca llegó tal cosa.

—Lo sabemos —habló HoSeok—. Y también me siento culpable por permitir que esto sucediera, pero creo que lo importante es cuidar a YoonGi ahora, ¿no lo cree? Después veremos a los culpables.

Esto pareció ser razonable para la señora Min y asintió.

—Por favor, cuiden de él cuando vuelva a ir a la universidad. Nosotros a veces... A veces no podemos entender que él es diferente.

El pecho de la señora Min dolía, porque recordaba como ella había sido por el miedo y el resentimiento. Estaba tratando de hacer las cosas bien, a pesar de que su esposo ya no estuviera con ella.

—Lo sé —aseguró Nam—, cuidaré mejor de él.

Después de eso, HoSeok tuvo que marcharse, despidiéndose de ambos. Estaría al pendiente de Yoon, así que pidió ser llamado por si algo se ofrecía. También se fue porque sentía que NamJoon quería hablar con la señora Min a solas, y no hacía falta ser adivino para saber de qué tema hablarían.

—Gracias, Hobi —susurró Nam cuando éste lo abrazó antes de irse.

NamJoon volvió a la sala para sentarse en el mismo lugar que antes, sus manos sudaban y las restregaba contra la tela de su pantalón.

«Háblame» [NamGi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora