Iron Man mi Guardaespaldas ❨sin editar❩

Capítulo 52.

(...)

—... y justo cuando todo andaba perfecto... apareció él. —le conté a Jack, sentada, mientras tanto él me apreciaba de pie, con una mano rozándole por la barbilla, y sus ojos llenos de atención hacia mí.

Parecía que mi historia le había resultado tan profunda, quizá por mis métodos tan realistas como para explicarle. Era como si Jack hubiera visto una película en su propia cabeza. Tal me hacía ver que le entretuve por mucho tiempo.

—¿Y a qué te refieres con el momento en el que todo andaba perfecto? ¿Su primer cita?¿Acaso Peter te ha pedido ser su novia? —su inocencia me parecía totalmente adorable. No podía juzgarlo. Cómo hermano tenía sus razones para decir cosas como estas,

—Sí. —hice un rápido movimiento con las manos, como si las estuviera abriendo para abrazar. No dije más. Sólo una afirmación. Una afirmación que había dejado a Jack más confundido que antes.

Frunció el ceño y desvío una leve mueca.

—Me has dado mejores respuestas que ésta. ¿Cuál de las opciones que mencioné es la cierta?

—¿La uno? —alcé la ceja mientras enseguida hacia un nuevo comentario—. O la dos (?) No lo sé, yo... quizá... ninguna de ellas... —me encogí de hombros, esperando que me resultara fácil desviarle la mirada, pero él me obligó a mantener mis ojos con los suyos.

—¿Hablas enserio?

—Sí, quizá... estabamos por... tu comprendes...

—¿Georgie? —de nuevo habla en un tono interrogativo, pero esta vez tenía más el propósito de asegurar lo que acababa de mencionar. Su reacción parecía como de asombro.

—Oh! Vamos, ¿crees que a estas alturas seguiré aun sin relacionarme con alguien sexualmente? —me puse de pie frente a él, alce un poco la voz mientras le confesaba. Puse los ojos en blanco y me preparé para lo que fuera que estuviera por decirme.

Su expresión seguía siendo la misma, pero igual parecía que ya lo veía venir.

—Tal vez. Bueno, yo no pasó todo el tiempo pensando sobre un tema como ese donde la protagonista sea mi hermanita. —se defiende—. No era necesario enterarme.

—Lo sé, ahora me arrepiento de confesarte tal cosa. —con resentimiento, volví de nuevo a sentarme, con pesadez. —Cielos! Esto es tan bochornoso! —Con mis manos cubrí mi cara por un momento, y pensé, y pensé, y pensé: sobre lo mal que pude hacer quedado, pero al momento de dejar de taparme la cara, me había encontrado con Jack sentado a un lado mío, abrazándome y a la vez dándome palmadas por la espalda.

—Deja de sentirte así. Sabes que puedes contarme cualquier cosa, inclusive temas como estos. —me sonríe un poco incómodo—. Y si ya has contado mayor parte, ¿por qué no terminas de decir la plática completa? Cómo, por ejemplo: ¿Con quien ha sido?

¿Con quien ha sido? Cielos! Si él supiera...

—¿Qué? Oh! No, no! —de inmediato me puse de pie y lo miré de frente—. Oye, por un momento estaba de acuerdo con que sería buena idea contarlo, pero ¿enserio preguntas algo como eso? Por Dios! Nunca te respondería algo así... Además de que sé que perderías totalmente la cabeza.

Jack río, quizá por como reaccioné, y al lograr contagiar su buen humor, yo también comencé a reír.

—¿Entonces no sabré nada del chico misterioso?

—Muy bien, sólo sabrás que lo conoces...

—Vaya! Que buen trabajo me has puesto a hacer con adivinar de todos mis conocidos quien fue el afortunado. —vuelve a reír. Una vez que logro mantener la calma volvió a hablarme—. Y de acuerdo al tema que hablábamos en un principio... resuelve lo que sea necesario con ambos. Peter debe sentirse totalmente abochornado: debes hacerlo sentir tranquilo y demostrarle que no estás para nada mal con él. Y en cuanto a Stark trata de resolver tus conflictos con él, mínimo te pido que hagan las paces para dejar de escuchar de él por tí una y otra vez que me pides escuchar y aconsejarte.

(...)

Me sorprendía la razón que Jack podía tener. Y vaya que me serviría de mucho seguir sus consejos, así que me dirigí antes con Tony, pues la situación que llevaba con él era más grave que con Peter. Llamé a su puerta una vez. Y nadie abrió. De nuevo lo hice, y nada. Comencé a desesperarme, y supuse que podría estar ocupado con  otros asuntos, o quizá ha salido de la ciudad... seguro debe estar tenso por lo que ha pasado y se ha decidido por relajarse un poco. Cuando mis esperanzas de verlo abrirme la puerta habían desaparecido me aleje de la puerta y caminé en dirección contraria a su casa, mientras tanto intenté llamar a Peter para ver si podía verlo, pero la señal no andaba muy bien, pues la llamada no entraba.

—*¿Hola?* —era la voz de Peter desde el otro lado de la línea.

Justo la llamada había entrado. Él había contestado, cuando entonces escuché un ruido. Habían hecho sonar a propósito un ruido que era exacto cuando se carga un arma. Así es, provenía detrás mío. Estaba detrás de mí.

Quedé paralizada cuando escuché como los pasos de quien quiera que fuera se acercaban cada vez más y más. No podía mover ni un músculo. No veía posible la posibilidad de correr, ni siquiera sabía hacía donde podría dirigirme. Mi cuerpo comenzaba a soltar unas ligeras gotas de sudor. Mis manos temblaban. Y mis piernas quedaban débiles, cada vez con la posibilidad de que podría caer al suelo.

Sentí su respiración chocar contra mi pelo. Había hecho una inhalación profunda, como si quisiera que yo supiera que tan cerca se encontraba de mí.

—Shhh... —susurra mientras veía como me cubría la boca con un pañuelo. No pude hacer más que caer a sus brazos. Era un aroma muy fuerte lo que tenía aquel pañuelo, quizá un olor más intenso que el alcohol.

Poco a poco fui cerrando los ojos, y quedé perdida, no sin antes darme cuenta que estaba en los brazos de Bucky.

Respiré una vez más, y luego todo se volvió oscuro...