Kayla POV
Terminé convenciendo a Sean de dejarme ir con el a buscar a Jason. Realmente estoy bastante asustada y hago esto porque necesito sacarme de arriba la curiosidad de ver si es el mismo Edward del que suelo hablar con Danielle.
Sean estacionó el auto en un callejón que parecía estar abandonado.
-Llegamos-Suspiró.
-¿Y ahora que toca?-Pregunté nerviosa.
Sean volteó a verme y me hizo señas dándome a entender que debemos salir del auto.
-Si no me equivoco, el lugar está a dos calles. Cuando lleguemos te pido que no te separes de mí, a menos que yo te lo indique.
-¿Por qué te parqueaste tan lejos?-Me quejé-Tendremos que caminar dos calles.
-Primero, tu decidiste venir-Me señaló-Y segundo, aquí nadie encontrará mi auto. Nadie puede saber que estamos aquí o todo puede salir mal.
-Entiendo...
-Vamos-Tomó mi mano y ambos comenzamos a caminar.
Cada paso que doy me pone más y más nerviosa. No se que haré cuando llegue, tengo miedo de que alguien salga herido y yo no pueda hace nada al respecto. Me estoy arrepintiendo de haber venido. Sean tiene razón, esto es peligroso.
Seguimos caminando hasta que a lo lejos logré divisar una especie de casa que al parecer está abandonada. Nos encontramos caminando en un monte bastante solitario y alejado de la ciudad.
Esto me daba cada vez mas miedo.
Sean POV
Nos estábamos acercando cada vez más al lugar, estoy completamente seguro de que Jason está aquí. Edward no es tonto, el sabe muy bien que vendré a buscar a Jason. Saqué el arma que llevaba en el bolsillo de mi chaqueta y la sostuve con ambas manos. Ya estamos aquí y debo estar preparado para cualquier cosa.
Kayla soltó un grito ahogado y yo volteé a verla con confusión esperando a que me dijera que sucede.
-Traes un arma-Susurró con un tono de nerviosismo.
-¿Creíste que vendría aquí sin nada para defenderme?-Solté una risa seca-No conoces a Edward, si llega a pasar algo, tendré que disparar.
Justo cuando iba a voltearme para poder adentrarme al lugar, escuché un disparo y sentí la bala enterrarse en mi pierna izquierda. Edward estaba detrás de mi y me había disparado.
-¡Sean!-Gritó Kayla con fuerza.
-Estoy bien, tranquila-Me quejé.
Pasé una mano por mi pierna y mi mano quedó completamente embarrada de sangre. El dolor me esta matando pero no puedo rendirme, no sabiendo que Jason sigue en peligro.
-Llegaste Sean-Dijo Edward con una sonrisa en su rostro-Y veo que trajiste una amiga.
Edward pasó por mi lado y yo estaba intentando reincorporarme pero se me hacía imposible. Edward soltó una carcajada al darse cuenta de mi cara mostrando dolor y dio una patada justo en el lugar donde me había disparado.
-¡Basta!-Volvió a gritar Kayla con lágrimas en sus ojos. Edward volteó a verla y mostró una sonrisa llena de odio.
-¿Sabes Sean? Nunca creí que traerías una chica contigo. Te pareces cada vez mas a tu padre, esas ganas de deshacerte de las mujeres que tiene tu padre también salen de ti, pero tranquilo, esta vez seré yo quien se encargue de esta. ¿Para algo están los amigos no?
Las palabras de Edward me cabrearon mas de lo que ya estaba. No podía dejar de quejarme por el dolor, Edward esta logrando lo que quería.
-Kayla vete-Miré a Kayla esperando que haga lo que dije, pero ella se quedó inmóvil-¡Que te vayas Kayla!-Grité bastante enojado.
Kayla me miró aterrada por unos segundos y luego comenzó a correr hacia el lugar donde estacioné el auto.
-¿Donde está Jason?-Pregunté.
-Si me hubieras pagado desde un principio, nada de esto estuviera pasando ¿no crees?
-¡No tenemos dinero Edward!-Grité y me levanté del suelo sintiendo un horrible dolor en mi pierna-Trabajamos día y noche, pagándote lo que te debíamos.
-¿Sabes? Estuve pensado y te contaré la verdad. Todo esto es culpa de tu padre Sean.
-Tal vez si tenga la culpa, pero el nunca mandaría a hacerme daño. No se ni siquiera cómo conoces a mi padre, el no sabía nada sobre que trabajábamos para ti.
-Siempre fuimos buenos amigos tu padre y yo. No nos parecemos en absolutamente nada, pero una de las cosas que tenemos en común es que ambos amamos el dinero, haríamos lo que sea por obtenerlo...
-Mi padre no es así-Interrumpí-El no es un aficionado por el dinero, hace lo que puede por conseguirlo para mantenernos a mi y a Jason.
-¿En serio crees eso?-Rió-Tu padre lo gasta todo en drogas Sean, no le importan lo demás, no le importas tu.
-Ya basta Edward-Tomé el arma que había traído y apunté a Edward sintiendo como el enojo dentro de mi iba aumentando-Dime dónde está Jason.
Estoy comenzando a sentirme mareado y seguramente es porque mi pierna se está desangrando. No se que hacer, mis manos están temblando y mi pierna está bañada en sangre. Lo último que pude pensar antes de caer desmayado fue en que Kayla estuviera bien.
******
Abrí los ojos rápidamente y me di cuenta que me encontraba en una camilla de hospital. No recuerdo absolutamente nada y no tengo la menor idea de que hago aquí. Me levanté de la camilla sintiendo un ligero dolor en mi pierna izquierda y ahí fue cuando comencé a recordar lo que había pasado. Lo último que recuerdo ver fue a Edward llevándome adentro del lugar abandonado.
Estaba dispuesto a salir de aquel cuarto de hospital pero justo cuando iba a abrir la puerta, una enfermera se adelantó y entró a la habitación.
-¿A dónde piensas que vas?-Se cruzó de brazos-Aún no te dan de alta, vuelve a la camilla.
-¿Que hago aquí?-Pregunté desesperado-¿Que pasó con Jason?
-Te dispararon en una pierna y no tengo idea de quien es Jason. Vuelve a la camilla, avisaré al doctor que despertaste.
-De acuerdo-Me dirigí hacia donde se encontraba la camilla.
La enfermera salió del cuarto y yo me quedé mirando el techo.
No le vendría mal una capa nueva de pintura-Pensé.
-Sean-Escuché la voz de Kayla detrás de mí.
Volteé a verla y me di cuenta de que estuvo llorando, tenía los ojos bastante hinchados por llorar y llevaba la nariz en un tono rojizo. Noté que llevaba un moretón en su mejilla derecha, cerca de su ojo.
-¿Que diablos te paso?-Toqué su mejilla suavemente.
-No fue nada, me tropecé al bajar las escaleras-Dijo alejando mi mano de su rostro.
-No me mientas Kayla, se que fue el imbécil de Edward.
Ella no dijo nada y volteó la mirada hacia la ventana.
-Se lo llevó-susurró.
-¿Qué?¿A quién?
-Se llevo a Jason, yo lo vi Sean-Volteó a verme nuevamente y comenzó a llorar.
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Sean
أدب المراهقينDesde que su padre murió las puertas de la felicidad se cerraron por completo dentro de ella. Lloró como nunca antes lo había hecho, Sufrió como un bebé al que le quitaron su juguete favorito. Para ella todo estaba acabado, nada podía hacerla feliz...