Comencé a escuchar unas voces y fui abriendo los ojos lentamente. Mi cabeza me esta matando, tenía una bella resaca gracias a Andrew. En realidad esta claro que la resaca es mi culpa, ya que fui yo quien decidió tomar, pero culparé a Andrew porque la fiesta fue su idea.
Miré a mi alrededor y me di cuenta de que esta no era mi habitación.
Me levanté rápidamente de la cama y fui al baño que se encontraba en el fondo de la habitación. Estaba hecha un desastre y ni siquiera sabía donde me encontraba.
¿Qué pasó anoche?
La cabeza me dolía cada vez mas y yo estaba intentando recordar lo de anoche pero se me hacía imposible, solo recuerdo haber bailado con Andrew y la discusión que tuvimos antes de salir hacia la fiesta.
Volví a la cama y me di cuenta de que había un vaso de agua junto con una pastilla para el dolor en la mesita de noche. Me quedé observando el vaso, no sabía si debía tomarlo o no, ¡ni siquiera estaba en mi casa!
-Es para ti, tómala-Dijo alguien a mis espaldas.
Al voltearme me di cuenta de que era el mismo chico que fue grosero conmigo cuando lo desperté en clases. Me quedé observándolo un momento, llevaba el pelo bastante despeinado y estaba usando ropa deportiva. Parecía haber salido a correr durante toda la mañana.
-Me gusta que me miren, pero ya me estoy sintiendo incómodo-Habló el nuevamente.
-Lo siento-Dije sintiendo como mis mejillas comenzaban a sonrojarse.
El chico caminó hacia mi y se sentó a mi lado. No me había fijado muy bien en el, la verdad es que es bastante guapo.
Al darse cuenta que otra vez me había quedado mirándolo soltó una carcajada.
Yo volteé la mirada algo avergonzada y tomé la pastilla que estaba en la mesita. Luego de tomarla me decidí a preguntarle todo lo que estaba rondando en mi cabeza sobre la fiesta de anoche y el por qué yo me encontraba en su casa.
-¿Por qué no fuiste al colegio?-Pregunté con curiosidad.
-No tenía ganas.
Asentí y luego recordé que no había hablado con mi madre. Debe estar muy preocupada, tengo que llamarla.
Me paré de la cama sintiendo la mirada del chico sobre mi y comencé a buscar mi celular.
-¿Que estás haciendo?-Preguntó el chico.
-Busco mi teléfono, debo hablarle a mi mamá, debe estar demasiado preocupada-Comencé a caminar por toda la habitación.
-Ey Tranquila-Dijo el chico agarrándome por los brazos para que dejara de moverme-Ya hablé con tu madre.
¡¿Qué?!
-¡¿Estás loco?!-Grité bastante sorprendida-¿Qué le dijiste?
-Que te habías quedado dormida en casa de tu amiga-Dijo el haciendo que me calmara-Vi en tu celular que le habías dicho a tu madre que irías donde tu amiga en vez de a una fiesta.
-Bueno...¿Gracias?
El solo se limitó a sonreír.
******
Habíamos pedido comida china y ahora nos encontrábamos viendo Divergente en la televisión. Tomé el control y pausé la película.
-¡Era mi parte favorita!-Exclamó el fingiendo dolor.
-Quiero saber qué pasó anoche.
El me miró algo preocupado y luego comenzó a hablar.
-Te vi llegar junto a un chico que sinceramente no me genera confianza-Comenzó a hablar y yo lo miré con una ceja alzada, el solo continuó hablando- Al pasar el tiempo me di cuenta que estabas borracha, habías tomado demasiado y no parabas de decir estupideces. Tu amigo se había ido con una chica y te dejó sola en donde repartían las bebidas, un gran error, comenzaste a coquetear con el que daba las bebidas y seguiste tomando más...
-No sabía que podía tomar tanto-Dije interrumpiéndolo
-Y yo no sabía que iba a nacer tan guapo.
-Mejor sigue hablando-Dije volteando los ojos por su comentario.
-Vi que perdías el equilibrio y luego te vi desmayarte, me acerqué y decidí que sería mejor sacarte de aquel lugar, te la debía por ser grosero contigo-Dijo mirándome en forma de disculpa-Te cargué y te llevé a mi auto. Iba a dejarte en tu casa pero te habías quedado dormida, intenté despertarte pero parecías muerta. Te traje a mi casa porque no conozco tu dirección y te dejé dormir en mi cama. Luego, vi el mensaje que le habías dejado a tu mamá y decidí decirle lo que te dije hace un rato.
-¿Y qué pasó con Andrew?
-¿Andrew?
-El pelirrojo que entró conmigo a la fiesta.
-Estuvo llamándote hace unas horas, quería saber dónde estabas.
Es un idiota.
Me dejó abandonada en una fiesta en casa de alguien que ambos desconocemos y ahora finge estar preocupado por mí. Lo detesto.
-Gracias-Dije con sinceridad-Por cierto, mi nombre es Kayla.
El chico sonrió de lado y al decirme su nombre no pude evitar recordar el estado de Danielle cuando le hablé sobre el.
-Soy Sean-Dijo mientras volvía a reproducir la película.
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Sean
Teen FictionDesde que su padre murió las puertas de la felicidad se cerraron por completo dentro de ella. Lloró como nunca antes lo había hecho, Sufrió como un bebé al que le quitaron su juguete favorito. Para ella todo estaba acabado, nada podía hacerla feliz...