Tú Eres Mi Ángel [Terminada]

Capítulo 32

El resto del día lo paso totalmente distraída, ¿que fue lo que paso con Uriel? ¿Quien era esa chica? ¿Por qué se portó así conmigo? Y para enojarme más no tengo su número para llamarlo. Ni siquiera le he visto un celular.

- Lizzy - Creo que es papá quien me llama. Quiero correr a buscarlo a su casa, pero de nuevo no se su dirección, nunca hemos ido a su casa. Si lo pienso así, no se prácticamente nada de Uriel, esto es tan extraño. - ¡Lizzy!

Me giró hacia mi papá, ¿y ahora que le pasa? ¿Porque me grita?

- ¿Papá, por qué gritas?

- ¿Que te pasa, Lizzy? - Mamá toma mi mano en la suya sobre la mesa - Estas demasiado distraída. Incluso para ti. - Tiene razón, pero mi cabeza está en otra parte... No se exactamente donde, pero si se en donde no esta.

- No me siento bien, ¿puedo ir a mi cuarto? - Papá pone su mano sobre las nuestras. Mamá asiente y me voy.

Esta noche Jane no me hace preguntas, sabe que necesito espacio. Nos acostamos en mi cama, me abraza y eso es exactamente lo que necesitaba, rápidamente se duerme, mientras, como algo extraño, yo no puedo hacerlo. Aunque no es de extrañar, en mi cabeza existe sólo un nombre, sólo una persona que la ronda.

Uriel.

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Cuando despierto siento como si no hubiera dormido, ni siquiera recuerdo cuando caí dormida finalmente. Creo que soy una tonta y estoy estrujandome el cerebro por nada. Quizá todo lo imaginé, o lo estoy exagerando. Si, eso es lo más seguro, acostumbro exagerar las cosas.

Con ese pensamiento en mente, trató de sentirme optimista y me preparó para el Instituto. Cuando bajo, tres pares de ojos me ven preocupados, no pude hacer nada por mis ojos desvelados.

- ¡Buen dia, manada! - Los saludo con entusiasmo. Todos me sonríen, pero nadie hace bromas, eso no me gusta. - ¿Que paso aquí? ¿Hoy no nos levantamos de ánimos? - papá intenta reírse pero no lo consigue ¿Que les pasa?

- ¿Pueden decirme que sucede? - Estoy comenzando a enojarme.

- ¿Tu estas bien, nena? - Papá llega hasta mi y me abraza, están preocupados, lo se, pero creo que ellos también exageran, no rompí con Uriel o algo parecido.

- Muy bien, papi ¿porque no debería estarlo? - Ahora su sonrisa es sincera - ¿Nos llevarás al Instituto?.

- Por supuesto ¿están listas? - me giró hacia Jane, como siempre ella estaba lista. Así que fuimos por nuestras cosas y nos dirigimos hacia el auto de papá. Antes que llegará ahí, mamá me detuvo.

- ¿Seguro que estas bien, cariño? - acaricio mi mejilla con ternura.

- Si mamá y lamentó preocuparlos por nada, soy una inventa historias en mi cabeza. Hago un gran alboroto por nada.

- ¿Entonces no fue nada? - Mamá aun esta escéptica.

- Te lo prometo, ahora me voy o llegaremos tarde y Jane me mata.

- Esta bien -  se despide con la mano mientras me alejo.

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- Que extrañó, hoy no vino ni Uriel ni Didi a estudiar - Sabia eso, Pam solo lo decía para sacarme información, si supiera que yo estaba en las mismas circunstancias que ella. No sabia nada. - ¿Estás bien, Lizzy?

- Supongo que si - Me encogí de hombros.

- ¿Como que supones? - Ahora era Adri.

- Pues si, supongo. No vivo con ellos para saber que hacen todo el tiempo. - A tiempo tocan el timbre de fin delreceso, gracias a Dios ya estoy harta del interrogatorio.

Llegamos a la clase y sucede lo que me faltaba, la maestra me pregunta por Uriel y Didi, no se que responder, si digo que todo esta bien y no lo esta, quedare como estúpida. Pero si digo que no lo se, quedare como la tonta. Así que elijo ser mentirosa y que me crean. Espero.

- Es algo de lo que no puedo hablarle a nadie, lo siento. - miro fijamente mi cuaderno y la maestra se dedica a su clase y ya no pregunta nada.

Este día esta siendo totalmente un fiasco y todo el optimismo de la mañana se me escapa con cada segundo que pasa.

Gracias a Dios se acaban las clases, recogemos las cosas, haciendo tiempo para que el resto salga. Nos disponemos a irnos cuando el conserje llega al aula. Nos ve sorprendido de que aun estemos aqui. Cuando pasamos a su lado me detiene.

- Tu eres la novia del niño bonito ¿verdad? - Lo miro confundida - Del europeo. - Ah Uriel.

- Eh... Si... No. ¿Porque me lo pregunta?

- Pues porque el otro día me estaba pidiendo consejo para una cita y como lo he visto mucho contigo, supuse que era a ti a quien quería llevar a la cita. - Su confesión me deja sorprendida. ¿Uriel esta preparando una cita?

- ¿De verdad? ¿Uriel esta preparando nuestra cita?

- Si, es un chico muy tonto - El conserje comienza a barrer - Le dije que las mujeres son infieles y que le romperán el corazón. Pero el insiste en la cita y en las mujeres.

- ¿Y porque le dice eso? sí usted no me conoce, no sabe como soy y le dice que yo podría romperle el corazón - ¡Viejito grosero! ¿Como se atreve a acusarme de infiel?

- Es la verdad. Todas son iguales - El deja la escoba a un lado y me mira fijamente - Y tu no tardarás ni dos segundos en ponerle los cuernos una vez que lo tengas comiendo de tu mano.

Estoy que no me lo creo, ¿que le pasa a este hombre? ¿acaba de insinuar que soy una zorra?

- En primer lugar me respeta, usted no sabe nada de mi, así que no le voy a permitir que me insulte - El bendito Viejito se atreve a rodar los ojos - Oh, ya veo ¿y se puede saber que lo hace estar tan seguro de lo que dice? - Jane y mis amigas llegan al aula, supongo que se dieron cuenta que no las seguía.

- Fácil, porque varias mujeres lo hicieron conmigo - aprieta fuerte la mandíbula, tengo miedo que su dentadura postiza salga volando - ¡Y la guinda del pastel fue que mi esposa lo hizo con mi hermano!

- Claro, ya salió el peine. Como a usted se lo hicieron piensa que el resto del genero femenino somos iguales.

- ¿Lizzy, que pasa? - Jane me pregunta preocupada. La ignoró.

- ¿Sabe porque le fueron infieles? - No espero que responda - ¡Por ser un grosero y abusivo! ¡Ninguna mujer aceptaria, ni siquiera enamorada, pasar tiempo con un viejo cascarrabias como usted!

- ¡Lizzy! - Jane me grita asustada, Pam se está riendo, Adri me ve horrorizada. Si, bueno, el abuelito comenzo, y cuando me buscan me encuentran. Le doy una última mirada asesina al abuelito y me doy cuenta que me ve con los ojos brillosos. Ah no, ¡él empezó! ¡Hace Y luego no se aguanta! Más enojada conmigo que con él, paso junto a las chicas, pero no me detengo.

Cuando llegó a la salida, bajo las escaleras corriendo y empiezo a caminar hacia mi casa.

- ¡Hey! - Me grita una voz detrás de mi, volteo a medias para toparme con la chica de ayer, estaba sentada con la espalda recostada en la pared junto a la puerta del Instituto. En mi precipitado escape no la note. Estira las piernas y lentamente comienza a caminar. Se acerca.

- Tu debes ser Lizzy - ¿Como sabe mi nombre? Y más importante ¿que hace aqui? - Se por Uriel como te llamas, sólo quería conocerte.

- ¿Uriel te hablo de mi?

- ¿Si, por qué no?

- Pues... Yo no se quién eres tú. - Ella me da una sonrisa de superioridad y ahora mismo no estoy de humor para esto. Me giró y sigo mi camino.

- ¡Espera! - Me toma del brazo para detenerme, un escalofrío espantoso me recorre, pero me suelta casi inmediatamente. - No quería molestarte, sólo quería conocer a la chica de la que esta perdidamente enamorado mi hermano.

¿Su que...? ¿Enamorado...?