Reconozco que volver a la residencia después de pasar un día completo con el dios del sexo que era Louis había sido demasiado difícil, sobre todo porque no sabía qué iba a pasar con nosotros a partir de ahora. Sin embargo, lo peor fue cuando llegué a mi habitación y mis amigas no tardaron en bombardearme con preguntas a las que ni siquiera podía responder.
¿Dónde habéis estado? ¿Qué habéis hecho? ¿Besa bien? ¿Sois novios? ¿Cómo es Louis en la cama?
- ¡Doris! - gritó mi amiga alarmada - ¡No quiero saber cómo es mi hermanastro en la cama!
- Entonces sal y te llamamos cuando nos lo haya contado todo - respondió mi mejor amiga.
- Estás bromeando, ¿no?
- No, en absoluto - respondió - quiero saberlo todo.
- ¿Por qué no quieres saberlo tú? - preguntó mi compañera de habitación.
- ¿No es evidente? - contestó Hope - ¡Louis es mi hermanastro!
- Chicas - intervine.
- Exacto. Louis es tu hermanastro, no tu hermano. ¿No te da ni un poquito de curiosidad? - dijo Doris.
- ¡Por supuesto que no!
- Chicas - dije de nuevo.
- Eres una aburrida, Hope.
- Y tú eres demasiado cotilla - respondió ella.
- ¡Chicas! - grité.
- ¿Qué? - dijeron las tres al unísono.
La manera en la que mis amigas me estaban mirando me causó tanta gracia que no pude evitar estallar en una sonora carcajada a la que ellas no tardaron en sumarse.
- Sois unas niñas pequeñas - dije limpiando las lágrimas causadas por la risa que habían en mis mejillas.
- Seremos unas niñas pequeñas, pero ¿vas a contarnos qué ha pasado entre Louis y tú? - respondió mi mejor amiga mirándome fijamente a los ojos.
- Por favor, omite detalles escabrosos - pidió Hope.
- Está bien - respondí - primero, Louis y yo no somos novios.
- ¿Por qué? - preguntó Cléa.
- ¿Entonces no eres mi "cuñastra"? - preguntó Hope.
- Eso suena demasiado feo - respondió Doris.
- ¿Me dejáis terminar? - pregunté.
- Sí - respondieron a la vez.
- Segundo, Louis y yo hemos estado en un hotel.
- ¿Te ha llevado a un hotel? - preguntó mi mejor amiga asombrada - Madre mía qué nivelazo... en la primera cita.
- Técnicamente no ha sido la primera cita - respondí.
- ¿Y cómo es que no nos lo has contado hasta ahora? - me preguntó Cléa.
- Porque no había nada que contar. Solo fueron un par de besos y ya está - dije intentando sonar calmada - y por último, no os voy a contar lo que hemos hecho - añadí viendo las expresiones de disgusto de Cléa y Doris y la de alivio de Hope - pero no os puedo negar que ha sido increíble.
Mi mejor amiga y mi compañera de habitación intentaron sonsacarme información por todos los medios posible, pero ni siquiera un ataque de cosquillas hizo que dijera ni una sola palabra.
- ¡Parad! ¡Parad! - supliqué gritando mientras reía como hacía bastante tiempo que no lo hacía - mis labios están sellados.
- Entonces me imagino que no tendrás hambre - respondió Doris.
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Los polos opuestos se atraen
Novela JuvenilSegunda temporada de "Te conocí en París". Alice comienza una nueva vida lejos de Francia y del que pensó que era el gran amor de su vida. Tras trasladarse a su nueva residencia, lucha cada día por superar el engaño de Philip, aunque esta tarea será...