Noches de verano.

Capítulo 36.

Cuando salimos de la habitación de Martín y Villamil, nos encontramos enrollandose como si les fuese la vida en ello a Camila y Juan Pablo, contra la puerta de la habitación de Isaza.

La escena tanto a Simón como a mi nos sorprende, y aunque intentamos ir hasta mi habitación sin que se percaten de nuestra presencia, nos ven y avergonzados se separan.

—Creo que mejor me voy a dormir. —anuncia Camila y se va corriendo hasta mi habitación, que la comparto con ella.

—Si, creo que yo haré lo mismo. —dice Isaza para entrar también en su cuarto, que a la vez también es el de Simón.

—¿Y ahora que hacemos? —Le pregunto a Simón, viendo que nos quedamos sin habitación para dormir juntos.

—Pues nada, ir a dormir cada uno a su habitación. —me comenta algo resignado.

—Entonces, buenas noches, te quiero. —me despido y le doy un beso.

Así que Simón, me baja (ya que me tenía cogida en brazos), y tras besarnos otra vez, nos vamos cada uno a su habitación.

Abro la puerta, y me encuentro a Cam tirada sobre la cama, mirando fijamente al techo, con la mirada perdida.

—¿Todo bien? —Le pregunto, preocupada por verla así.

—No lo sé Abi... Estoy hecha un lío. —me responde, sin mirarme.

—Cuéntame. —le pido y me tumbo a su lado en la cama.

—Pues que estoy hecha un lío, siento algo muy fuerte por Juan Pablo, aunque sólo quiero estar lejos de él porqué me hace daño... Y por otro lado está Pedro, que me da lo que quiero, pero no es igual... No siento lo mismo que por Juan Pablo. —me confiesa, mirándome ahora a los ojos.

—Pues deja de verte con Pedro y dale una oportunidad a Isaza... Sé que le gustas de verdad y quiere algo serio. —le aconsejo, ya que sé que es lo mejor que puede hacer.

—Es que estoy segura que siendo su novia voy a sufrir. —me réplica y esconde su cara entre sus manos.

—No lo sabes y así también lo estás pasando mal... —Le contesto, intentando hacerla entrar en razón.

—No sé, creo que lo mejor que puedo hacer es volver a Barcelona y poner distancia... —me responde y siento que se me rompe un poquito el corazón, ya me acostumbre a tenerla a mi lado, y volver a tenerla lejos me duele bastante.

—Pero yo no quiero que te vayas. —Le digo triste.

—Y si me voy no es por ti, sabes que te quiero mucho pequeña. —me dice y me da un gran abrazo.

—Y por cierto... ¿Que pasó en el pasillo para que te besases con Juan Pablo? —Le pregunto, ya que me muero de curiosidad.

Cam me mira y suspira y me comienza a explicar.

"Salí de la habitación de Villa y Martín con la intención de irme a la de Pedro, donde sabía que también me lo pasaría muy bien, pero entonces, alguien me agarra por el brazo, cuando me giro y veo a Isaza, con el rostro invadido por la tristeza y la rabia.

—¿Qué tengo que hacer para que seas mía? —me pregunta, a lo que yo solo reacciono deshaciendome de su agarre.

—No tienes que hacer nada Juan Pablo, yo no pretendo ser de nadie... —Le respondo intentando sonar lo más segura de mi misma posible, no quiero que note que me afecta verle de esa forma.

—¿Por qué Pedro? ¿Me quieres dar celos con él? —me pregunta ahora enfadado.

—Yo no te quiero dar celos con nadie, ese estúpido juego lo comenzaste tú. —Le respondo ahora también cabreada.