Temptation

Capítulo 55

Narra Ana:

-Se supone que debería estar estudiando-Digo separándome de los labios de mi chico.

-No seas aburrida-Dice tumbándonos a ambos en la cama.

Intento zafarme de sus brazos, pero es imposible, me tiene aprisionada por la cintura.

-Liam, me agobio-Le digo algo molesta, cuando se lo propone puede ser muy pesado.

-Así estaba yo el otro día cuando me abrazabas con ese horrible pijama.

Comienzo a reír a carcajada limpia.

-¿Otra vez con eso? Tienes un trauma-Me burlo quedando enfrente suya.

-Sí, exijo que te compres otro pijama.

-Pues ya sabes, cómprame uno...-Me acerco y le distraigo besando cuidadosamente sus labios hasta que siento cómo va desenredando las manos de mi cuerpo, es ahí cuando en un rápido movimiento consigo ponerme de pie.

-Eres mala-Me dice con un puchero en sus labios.-Además, no te voy a comprar pijama, has dicho que la próxima vez estarás en ropa interior.

-Calla anda-Le digo mientras comienzo a recoger los apuntes, sabía perfectamente que esto iba a pasar, al final no estudiaría nada, y ya la verdad, viendo la hora que es y sobre todo viendo la disposición de mi novio, me doy por vencida.

Cuando recojo todo puedo escuchar la puerta de mi casa, seguro que es mi madre que ha llegado de trabajar. Liam se incorpora algo nervioso y se sienta el la cama colocando la manta bien. Me da algo de pena, antes esto no era así, pero ahora sobre todo la relación entre Liam y mi madre se ha enfriado.

-Hola Anita-Dice mi madre entrando en mi cuarto, frunce el ceño a ver a Liam.-Ah, hola Liam.

-Hola-Saluda más cortado de lo normal.

-Me llevo a las hermanas a dar un paseo, cuando recojas bájate con nosotros un rato.-Se da media vuelta y sin despedirse de Liam cierra la puerta. Me dedico a seguir recogiendo hasta que escucho de nuevo la puerta de calle, suponiendo que ya han salido.

-Li...-Me acerco a él sentándome en su regazo.

-Esto es patético, me odia-Dice sin ser capaz de mirarme.

-Esto ya lo hemos hablado...Le digo besando su mejilla repetidas veces.-Me da igual lo que piense, te quiero y eso debería bastarte.

-Pero no lo entiendes Ana, antes era muy diferente.

-Bueno, sí han cambiado cosas, pero podrán volver a cambiar, no te quiero ver triste mi vida-Mis labios llegan a los suyos, y los rozo con cariño, sin embargo él no se lanza a besarme. Me rio, buscando su nariz y le doy pequeños besos.

-Es mejor que me vaya...-Dice de repente intentando apartarme.

-¿Qué? Ni lo sueñes.-Como puedo me tiro encima de él, quedando este totalmente tumbado en la cama-Tú no te vas-Le digo besando su cuello, sonrío al sentir sus manos en mis caderas mientras que un gruñido sale de su boca.-Te quiero-Digo entre beso y beso en la base de su cuello. Me incorporo para llegar a sus labios, pero apoyo mal el brazo y acabo cayéndome con todo mi peso en su pecho, estaba a punto de pegar una carcajada por mi torpeza pero entonces escucho su quejido.

-Ana me aplastas-Me sorprendo y me retiro inmediatamente como si quemase, le aplasto, eso significa que peso demasiado.

-Lo siento-Me levanto y me pongo de pie, aún mirándolo tirado en la cama, se incorpora un poco con el codo y me mira riendo, pero yo ya no puedo reír.