Mi nueva vida... ¿Como una chica? (Pt. I)

Capitulo 5: Casi listo

Luego de haberme quitado el uniforme escolar lo dejé a un costado para dirigir mi atención hacia el buzo escolar o como algunos le dicen, la ropa deportiva escolar. Pensé que debería probármelo también pero confiaba en que me quedaría bien así como el uniforme lo había hecho así que ambos atuendos los guardé en mi closet para usarlos después.

Sam: Entonces... ¿Qué haras mañana?

Gabriela: Si sigo así pues... Tendré que ir al colegio siendo una chica.

Sam: ¿Y que dirás si te preguntan que pasó?

Gabriela: No lo sé Sam... Algo se me ocurrirá.

Mientras estaba conversando con mi prima escuchamos como es que la puerta de la casa era cerrada por lo que supimos que nuestras madres habían llegado así que decidimos salir a la sala para reunirnos con ellas y así tener una conversación sobre lo que habíamos hecho en las últimas horas.

Gabriela: Hola... ¿Que tal les fué?

Tía: Bien, salimos un rato para distraernos y de paso intentar buscar alguna solución a tu...

Gabriela: ¿Problema?

Mamá: Pensamos en situación pero si.

Sam: ¿Y encontraron algo?

Mamá: Si, una especie de bruja que parece saber algo sobre cómo arreglar todo esto.

Gabriela: ¡¿Enserio?!

Mamá: No te emociones tanto cariño... El pequeño problema es que está fuera de la ciudad y volverá dentro de un mes.

Gabriela: ¡¿Un mes?! ¡¿Debo estar así un mes?!

Mis sueños y esperanzas rápidamente subieron muy alto para luego caer en picada al subsuelo, por un segundo pensé que volvería a ser un chico y toda mi vida volvería a la normalidad pero al parecer tendría que ser paciente y esperar... No sé si lo saben ya que apenas nos estamos conociendo pero yo no soy para nada paciente.

Mamá: Sé que no te gusta la idea pero... No creo que tengas más opción hijo.

Gabriela: Lo sé... Al menos tengo un nombre femenino ahora.

Mamá: ¿Enserio? ¿Cuál?

Gabriela: Gabriela... Literal es mi nombre en femenino.

Tía: Es un lindo nombre...

Gabriela: Si... Estoy algo cansado así que me iré a mi cama... Descansen.

Mamá: Tu igual.

Sam: Descansa.

Me despedí de mis tres familiares y me dirigí a mi habitación para poder descansar dónde poco después de dar un par de vueltas pensando en lo que tendría que pasar mañana terminé por desvestirme y ponerme simplemente una camiseta mía sin importarme que esta me quedara muy grande ahora.
¿Cómo explicaría lo que me sucedió? ¿Cómo volvería a hablar con mis amigos y compañeros de siempre? Estás y más preguntas rondaban por mi mente siendo ya casi las 2am antes de quedarme dormido.

Al día siguiente...

Siendo ya de día fui despertado por los rayos del sol que entraban por mi ventana y llegaban a darme en el rostro, me moví un poco intentado cubrirme de estos cuando me dí cuenta que mi prima se encontraba escribiendo o jugando en su celular sentada en mi escritorio sin aún haberse dado cuenta de que ya estaba más o menos despierta.

Gabriela: Hola prima...

Sam: Vaya, finalmente despiertas.

Gabriela: ¿Que haces acá? Son las 7 de la mañana.