Secuestrada para ser mamá (Finalizada)

16: ¿ Todo mejora ?

DELIA
La actitud de Sebastián a cambiado para bien pues desde el día de su cumpleaños es mucho más amable, se muestra más atento con los niños incluso les a regalado unos juguetes con los que ellos se divierten mucho.

Por fortuna las golpizas que Sebastián me daba ya no existe más, últimamente todo a mejorando con lo que poco a poco deja de ser tan malo estar aquí encerrada.

Los días pasan, mi vida estando en este lugar ya no resulta ser como antes, el único problema que tengo ahora sería que Sebastián recaiga regresando a sus antiguos hábitos de beber porque después de todo eso era lo que generaba las golpizas, aunque no se porque cuando estaba tomado me golpeaba a mi; de cualquier manera estoy muy bien porque ya no sufro sus agresiones.

Pero hablando de lo que pasó esa noche de su cumpleaños después de la cenar tan deliciosa que prepararon las trabajadoras de la casa. Todo eso para mi fue completamente nuevo porque desde el inicio yo nunca había cenado con un hombre solo nosotros dos, pero lo más impresionante fue lo que ocurrió en su habitación, estuvimos a punto de tener relaciones, pero por fortuna no sucedió de la manera tradicional porque solo nos besamos mucho y fue al parecer por eso que a Sebastián se le notaron las ganas que tenia de realmente hacerlo, le doy gracias por que no sucedió nada más allá de caricias, besos y nada después de yo darle placer a él, con lo que pude notar esa sensación nueva pero también placentera para mi cuando tenia su miembro entre una de mis manos mientras que con la otra acariciaba su torso desnudó.

Con cada movimiento de arriba hacia abajo que yo hacia en su miembro era agradable aunque un poco extraño ya que nunca lo había hecho pero fue agradable.
Entonces Sebastián me saca de mis pensamientos.

Sebastián: Delia podemos hablar un momento por favor.
Yo: Claro qué pasa dime.
Sebastián: Te molestaría hacerme eso que hiciste el día de mi cumpleaños cuando estábamos en mi habitación.
Yo: Quieres que yo lo haga pero que no lo puedes hacer tú mismo.
Sebastián: Bueno si puedo hacerlo mismo pero no es tan divertido ni tan placentero.
Yo: No estoy muy convencida de hacerlo, eso fue cosa de una sola vez pero no de dos veces.
Sebastián: Si yo lo sé de hecho no sé ni porque te lo dice, pues es algo vergonzoso, gracias de todas maneras.

SEBASTIÁN
Yo: Será mejor que regreses con los niños al parecer están llorando.
Delia: Si eso es lo mejor, ya me voy.
Yo: Gracias de todas maneras. _ella ya no me escucha por ya va algo lejos de mi_

Pero que gran pendejo soy como se me ocurre preguntarle eso a Delia, fue algo muy vergonzoso ella tienen razón yo puedo hacerlo solo, pero me gusto tanto que me lo hiera ella que no dejo de pensar en eso.

Voy a mi habitación serrando con seguro después de entrar, me recuesto en la cama no sin antes quitarme la camisa para tratar de estar lo más igual posible ha ese día logrando un poco de revivir ese día, desabrocho mi pantalón, bajo un poco mi bóxer solo para que pueda salir mi miembro ya erecto; entonces sierro mis ojos tratando de poner en mi mente las imágenes de ese día, cuando logro conseguirlo tomo mi miembro con una de mis manos mientras que con la otra acaricio mi torso imaginando que es Delia quien lo hace.

Empiezo el movimiento de arriba hacia arriba dándome placer yo mismo, con cada movimiento siento más placer, no muy rápido porque así fue como Delia lo hizo esa vez.

Tenía tanto tiempo con estas sensaciones dormidas en mi que cuando Delia llego y las despertó y ya no se quieren dormir otra vez.

Creo que realmente si me estoy enamorando. Sumergido en mis pensamientos por un pequeño momento olvido lo que estoy haciendo, pero entonces puedo sentir como aumenta mi placer hasta que termino más pronto de lo que yo hubiera querido.