36: Mamá y Papá

10.7K 475 17
                                    

SEBASTIÁN
Delia duerme al lado mío, la noche anterior note que no pudo dormí nada bien, imagino que por los nervios de ver a su familia. Quiero que ella esté en contacto con ellos, yo sé perfectamente lo que es no tener familia y no quiero que ella viva lo mismo, sobre todo si es por mi culpa.
Su familia estará feliz de verla de nuevo, aunque no sé cómo reaccionar ante el hecho de que esta embarazada, lo dijo porque por lo que ella misma me ha platicado que ella siempre fue como la niña de la familia principalmente para su padre y ahora su niña va a tener un niño o una niña, además no he dejado de pensar en que podremos decir cuando le pregunten sobre que es lo que le pasó durante todo este tiempo. Creo que lo mejor sería utilizar su caída por las escaleras, a nuestro favor, argumentando que perdió la memoria o algo así y que no recuerda lo que pasó antes de eso, porque no le veo otra salida, es eso o que revele toda la verdad y yo vaya preso por ser quien la mando secuestrar.

Los niños están jugando con algunos de sus juguetes que empaco Delia, gracias a que vamos en mi avión privado es que ellos puedan hacer esto pues están en el piso del avión, ellos están felices, mientras que yo bueno estoy haciendo un doble trabajo porque estoy trabajando mientas que a la misma vez estoy vigilando a los niños, sobretodo a los bebes pues como ya gatean, son más de cuidado y vigilancia, de hecho ahora mismo Daniel viene hacia mí, hasta estar a mis pies, yo dejo aún lado mi computadora para tomarlo en mis brazos.

Yo: ¿Que pasa pequeño?
Daniel: Mamá.
Yo: Mamá está dormida y es mejor que dejemos que descanse.
Daniel: Jugar.
Yo: ¿Que pasa, quieren que yo juegue con ustedes?
Daniel: Jugar. _ Daniel con sus manitas, me señala primero a mí y luego indica el lugar en el que están todos jugando_.
Yo: Tomare eso como un sí.

Me levanto del sillón con Daniel en brazos, para posteriormente sentarme con dónde están todos, en eso Daniel se baja de mis brazos, y empieza a darme algunos juguetes, como un señal para que juegue con ellos.

Jugamos un momento hasta que los niños me dicen que tienen hambre y a decir verdad yo también. La esposa del piloto que es la azafata en mi avión, ella nos trae unos ricos bocadillos para comer, acompañados de una infusión de frutos rojos con almendras, es una excelente infusión, además de ser perfecta para este clima pues está haciendo algo de frío.

Entró en razón de que tengo que despertar a Delia pues ella también debe de comer algo, por lo tanto dejó a los cuatros pequeños que jueguen un momento más en lo que despierto a Delia.
Me acero a donde está Delia, me inclino poniéndome en cuclillas junto a Delia, le hablo despacio y delicadamente, a manera de que poco a poco ella valla despertando con cuidado.

Yo: Delia, despierta
Delia: ............
Yo: Delia, vamos es hora de comer.
Delia: .............
Yo: Delia, despierta ya, necesitas comer algo, tú y el bebe lo necesitan.
Delia: No mamá ........., hoy no quiero ir a la escuela.
Yo: No soy tu mamá, y vamos que ya tienes que despertar. _ ella abre sus ojos por completo con una expresión de cansancio pero también de adormilada _.
Delia: Hay perdón, eras tú estaba teniendo un sueño muy bonito.
Yo: Así, que estabas soñando, de seguro soñabas conmigo.
Delia: Sueñas. Porque no, no estaba soñando contigo, tú no estuviste en ningún momento en mi sueño.
Yo: Entonces si no estabas soñando conmigo, de que era tu sueño. Digo si se puede saber, recuerda que hay niños presentes.
Delia: Cálmate que no es nada de lo que te estás imaginando. Soñaba con mi familia y con mi cumpleaños.
Yo: Bueno entonces, te perdono por no haber soñado conmigo.
Delia: Entonces creo que debo decirte gracias. Pero ¿para que me hablaste?
Yo: Para decirte que es hora de comer, es necesario que comas algo.
Delia: Si, bueno ahora que lo dices, si tengo algo de hambre.
Yo: Bueno pues no se diga más, vamos a comer.
Delia: Sabes primero necesito ir al baño.
Yo: Muy bien, ve al baño nosotros te esperamos.

Secuestrada para ser mamá (Finalizada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora