Quiero que Vuelvas

Frente a Frente

Frente a Frente

–Andrea tenía entre sus manos una foto de ella y sus hermanas, había pasado tanto tiempo desde aquel día en que tomaron esa foto, sus ojos se aguaron inmediatamente al recordar los felices que eran las tres en ese momento–

Cayetana – ¡Mi niña! –se acercó a Andrea emocionada para abrazarla–

Andrea – te extrañe mucho mami –se limpió con sus dedos las lágrimas que escurrían por su mejilla al sentir el abrazó de su madre–

Cayetana – ¿Dónde está Carlitos? –Preguntó con dulzura–

Andrea – este fin de semana le tocó estar con Samuel –Cayetana frunció el ceño molesta–

Cayetana – no entiendo Andrea cómo dejas que ese hombre este al cuidado de mi nieto

Andrea – ya mamá, ¡por dios es su padre!

Cayetana – por favor tú, ese hombre que va a ser un buen padre

Andrea – mamá te pido que dejes el odio a un lado

Cayetana – nunca, los Gallardos nos han hecho mucho daño –Andrea negó con fastidio–

Andrea – mamá ¡basta!

Cayetana – no me digas que todavía sientes algo por ese bueno para nada –Andrea rodó sus ojos con fastidio para después negar–

Andrea – claro que no mamá, yo estoy con Rubén y sabes que...

Nieves – ¡llegó! Por fin ¡llegó! –Cayetana observó a Nieves quien se encontraba emocionada–

Cayetana – te puedes calmar un poco y decirme ¿Quién llegó?

Irina – ¡Mami! –Corrió a los brazos de su madre–

Cayetana – ¡Irina! Mi amor –abrazo a su hija emocionada, más de cinco años en los que Irina se encontraba fuera del país–

Andrea – y ¿para mí no hay un abrazo? –Irina se separó de su madre para abrazar a su hermana–

Irina – las extrañe tanto –se fundió en un abrazo con Andrea–

Andrea – y yo a ti, mi cabrita loca –Irina se separó del abrazó de su hermana, sus ojos estaban cristalizados–

Irina – siento mucho, todo lo que pasó, después de... –suspiró con tristeza–

Andrea – yo también lo siento –los ojos de Andrea también estaban llenos de lágrimas–

Fernanda – ¡mami! ¡Mami! –la dulce voz de una pequeña hicieron que Andrea y Cayetana giraran a observarla, él rostro de las dos cambio completamente–

Cayetana – ella ¿es?

Irina – mi hija –la niña dibujó una sonrisa en su rostro– ven cariño –extendió su mano haciendo que su hija se acercara a ella–

Andrea – ¡tú hija! –Estaba sorprendida, Irina asintió– yo... –observó a la pequeña se puso a la altura de ella– soy tú tía

Fernanda – ¿Andrea o Sofía? –Andrea sonrió con ternura, sus ojos se cristalizaron–

Andrea – Andrea, mi amor puedo darte un abrazo –Fernanda asintió para luego dejar que su tía la abrazara– eres hermosa –Cayetana no podía salir de su asombro, al observar a la pequeña y es que era tan parecida a Irina pero con una peculiaridad que no la hicieron dudar acerca de quién era su padre–

Fernanda – quiero conocer a Carlitos –Andrea sonrió al escuchar el nombre de su hijo–

Andrea – por lo visto, tú si sabes quienes somos –la niña asintió, Irina observaba a su madre la cual seguía impresionada–