Quiero que Vuelvas

Lo siento...

Lo siento...

–Andrea observaba a Rubén no sabía cómo empezar, no encontraba las palabras indicadas para decirle todo lo que sentía y es que a pesar que estos años a su lado lo había intentado nunca pudo olvidar a Samuel y amar a Rubén cómo se lo merecía, y eso le dolía, le dolía tanto porque lo intentó, lo deseó y no fue suficiente–

Rubén – ¿aún lo amas? –Rompió el silencio–

Andrea – nunca te he mentido –respondió con sinceridad–

Rubén – a mí no, ¿pero a ti? –Andrea levantó la mirada y lo observó sus ojos estaban cristalizados– puedo entender que esto te duele

Andrea – no te imaginas cuanto –se limpió con sus manos el rostro– yo lo que menos quería es hacerte daño

Rubén – no sólo me estás lastimando a mí –respondió con total sinceridad, Andrea bajo la mirada, él se acercó a ella– si aún lo amas lucha por ese amor –Andrea negó–

Andrea – Rubén por dios no me pidas eso –sollozó sintiendo los pulgares de él acariciando sus mejillas–

Rubén – y entonces ¿Qué quieres que te pida? –ella alzó la mirada– que sigamos en una relación donde es más que obvio que no me quieres

Andrea – lo intenté te juro que lo intenté –de nuevo sollozo– no te imaginas cuanto desee amarte

Rubén – yo si te amé Andrea, te amé y te amo a tal grado que necesito para ser feliz que tú también lo seas, me imagine a tu lado una vida, una familia grande –Andrea lo observaba, cada una de las palabras de él le dolían–

Andrea – yo también lo quería, yo pensé que a tu lado iba a ser muy feliz

Rubén – pero no lo eras y a mi lado nunca serás feliz, porque tú lo amas a él y no importa lo que el haga eso no va a cambiar lo que sientes, y sabes ¿por qué? –Ella negó– porque en el corazón no se manda, porque el corazón no entiende razones y porque cuando uno ama de la forma que ustedes lo hacen no importa cuántas personas aparezcan en su vida si su corazón ya está reservado

Andrea – Rubén yo... –él colocó su dedo en sus labios–

Rubén – no digas que los sientes, no me tengas pena ni mucho menos lastima Andrea, por favor –se limpió con su mano una lágrima que escurría en su mejilla– pensé que ya lo había superado, tontamente pensé que tú amor no había sido tan fuerte, pero ahora me doy cuenta que estaba equivocado, basto que la vida decidiera que deberían estar juntos para que todo esos sentimientos que tenían retenidos salieran, ustedes se aman

Andrea – me encantaría amarte a ti –Rubén la observó, sonrió con tristeza–

Rubén – lo sé, yo también hubiera deseado que me hubieras amado, pero no fue así, no puedo seguir reteniéndote a mi lado, no sería justo para mí y mucho menos para ti –alzó sus manos tomando entre ellas el rostro de Andrea– fuiste la casualidad más linda que he tenido –Andrea bajó la mirada, a pesar de no amarlo la despedida estaba siendo difícil–

Andrea – espero algún día me perdones –dijo entre lágrimas, él negó–

Rubén – no hay nada que perdonar, antes que todo somos amigos –ella sollozó más fuerte para posteriormente abrazarlo– y espero Andy que eso si lo podamos seguir siendo

Andrea – claro que sí –respondió entre llanto aún abrazada a él–

–Fer, Carlitos y Arturito terminaban de comer su helado en la cocina mientras los adultos palticaban en el comedor–