Buscábamos lo mismo

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Fernando

Me aproveché de lo que estaban provocando mis preguntas en Harold para hacerlo cambiar de opinión sobre Daphne, necesitaba que se quitara de en medio.

—Kennedy era tu único y verdadero amor. Seguramente no le habría importado quedarse contigo durante este tiempo. Es más, creo que ni te hubiera pasado esto.

—creo lo mismo. Soñábamos con casarnos y formar una familia, vivir cerca de la playa y ser felices por siempre.

—quizá tu destino habría sido diferente si no te hubieras involucrado con Daphne.

— ¿a qué te refieres?

—mírate: estás en cama y en parte es porque Alessander también odiaba a Collins con todo su ser. Compartía el mismo odio hacia los dos, fácil pudo haberlos matado.

—me hubiera gustado que me matara, así podría reunirme con Kennedy en ese lugar donde dicen que se encuentran las almas que están destinadas a estar juntas.

—te merecías mucho tiempo más de felicidad con ella. Eran una bonita pareja, eran la envidia del año.

—lástima que sólo fuimos eso— su voz se quiebra. —jamás voy a cambiar lo que siento por Kennedy, ni estando con Daphne.

—está claro que no. Kennedy era más... Original, amorosa y hermosa, además de que eran de la misma clase social. Daphne es bonita pero le falta mucho para llegar a lo que Kennedy era.

—No entiendo por qué dices eso si antes me dijiste que no debía compararlas.

—pero no es comparación, soy realista— defiendo. —solo estoy contrastando lo que te conviene.

—pero Kennedy está muerta, ¿de dónde voy a sacar alguien que se asemeje a ella?

—busca amigo. Busca a alguien, no te quedes esperando o te vas a quedar esperando por siempre.

—creo que tienes razón. Daphne no me conviene y si hizo todo lo que hizo este tiempo fue para no quedar en mal con mi familia.

—exactamente. Solo hizo lo que esperaban que hiciera. No nació de su corazón actuar así.

Él se quedó callado, cerró los ojos y me pidió que lo dejara solo.
Había cumplido mi cometido de hacerlo pensar mal de Daphne y que se alejara de ella de una buena vez. No es que le deseara la muerte, pero si eso hubiera ocurrido la realidad habría sido muy distinta.

Harold.

Las palabras de Fernando "recordándome" cosas del pasado que yo sí recordaba claramente, me hicieron cambiar mi perspectiva de Daphne.
Sí, sabía que se había desvivido por mí durante estos días, pero su actitud representaba otra cosa.

No había duda alguna, ella me había olvidado por completo.
Lo que sentía por mí era lástima, y yo para ella no significaba nada, eso me lo había dejado más que claro antes de sufrir todo esto. Y si acudí al llamado de Alessander fue para salvarla ya que era su única salida, nada más.

Aunque suene egoísta, pero no quería verla. No, nunca más. Tenía que dejarle claro esto.
No me estaba comportando como un niño, ahora estaba usando mi razonamiento y ella tenía derecho a decidir con quién quiere estar.

Fernando terminó su sesión de preguntas y después una enfermera fue a darme de comer algo ligero.

—La noticia de que despertó se regó como pólvora en el hospital doctor— dijo mientras preparaba la mesita.

— ¿Ah sí? — respondí no tan contento.

—Sí, a todos nos da muchísimo gusto verlo con bien.