25. Amor , Reencuentro, Indiferencia y Pasión.

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RUGGERO

Bebía un café mientras conversaba con Eva sobre temas laborales cuando una joven corriendo captó nuestra atención. Me sorprendí aún más cuando me percaté que se trataba de mi hermana. Dejé el café en el mostrador y corrí para detenerla. ¿Que hacía ella aquí? Me pregunté mientras corría, cuando la alcancé, frenó de golpe y se sorprendió al verme pero más me sorprendí yo al ver que sus ojos color esmeralda se encontraban rojos de tanto haber llorado. Al verla de tal modo, una furia descomunal invadió mi ser lo mataré pensé, eso era seguro, mataría a cualquiera que le hiciere daño a Karol.

—¿Quién te hizo esto? —interrogué molesto y preocupado a la vez—. ¡Karol contesta! —desesperé.

—Fue algo extraño —inició—. Una mujer preguntaba por ti, entonces me preocupe y quise saber quién era. Ella se veía alterada, le pregunté qué tenía que ver con mi hermano, osea contigo —explicó mirándome, yo solo prestaba atención quería saber quién había hecho llorar a mi pequeñita.

—¿Y? —ella suspiró frustrada.

—Creo que sabe acerca de lo nuestro —soltó derrepente y mis ojos se abrieron por la impresión.

—¿¡Qué!? ¿De qué estás hablando? Haber explícame que fue lo que dijo.

—Me dió a entender que no éramos hermanos o al menos que yo no te veía de esa forma. Porque tú y yo, si somos hermanos ¿cierto? —¿Qué si somos hermanos? Por supuesto, de lo contrario no mantendríamos nuestra relación en secreto.

—¡Joder Karol! ¿Sabes en qué lío estamos si eso es cierto? ¿Tú estás segura que es mujer lo sabe? —Estaba sumamente nervioso, ¿qué íbamos a hacer? Estábamos completamente perdidos. Esto que estamos haciendo está sumamente mal pero, ¿qué podíamos hacer? Nos queremos sin importar nada, nuestro amor es más fuerte que todo.

—¡Ruggero! —exclamó mientras tomaba mis manos, la mire y en sus ojos veía miedo, la comprendía porque yo sentía lo mismo—. Prométeme que pase lo que pase siempre vamos a estar juntos, por favor di que nunca me vas a abandonar —¿Cómo podría dejarla? Si la amo tanto.

—Te lo prometo —ella sonrió me fijé que nadie nos vea y le di un corto beso—. Vamos a enfrentar esto juntos —tome su mano—. Ahora dime, ¿dónde se encuentra esa mujer? —iríamos a aclarar las cosas, pero era seguro que esto causaría daño a una de las dos partes: la acusadora o nosotros.

—Está en la oficina de papá —respondió con temor.

—Pues allá iremos —caminamos de la mano hasta la oficina principal.

BRUNELA

No debí tratar así a esa chica, ella no tiene la culpa de lo que han hecho sus padres. No debí gritarle ni burlarme de ella al referirse sobre mi hijo como su hermano. Esa niña debe de quererlo mucho, sin embargo, no pude controlarme y le grité porque sentí que ella robaba el amor de mi hijo del cual yo carezco.

—¿Ahora cómo se te ocurre que le voy a explicar todo esto a Karol? —regañó Miguel.

—Chicos no pueden entrar —escuchamos la voz de la asistente y de pronto la puerta se abrió dejándome ver a Karol la hija de Miguel a lado de otro joven.

—¿Es está mujer? —preguntó el muchacho de cabellos ondulados cuando me vió. Su rostro me pareció haberlo visto antes.

—Así es hermano —aseguró Karol y aquella esa palabra "hermano" me dejó sin aliento, era él, el chico de la foto, ¡es mi hijo Ruggero!.

—¡Oh! —mi mano derecha cubrió mi boca abierta por la sorpresa que me causaba verlo—. ¡No puede ser que estés aquí! ¡Oh Ruggero! —estaba maravillada, quise abrazarlo pero él se apartó.

Enamorada De Mi Hermano © #AES1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora