Ellipsism [BORRADOR] A LA VENTA EN AMAZON

Capítulo 21

Solamente diré hola y lentamente desapareceré tras el telón...

_________________________________________________________

-Diana por favor ven a ayudarme, cariño- escucho a mi madre

-¡Voy!- le grito como respuesta.

Mi mamá llego ayer y me dio la fantástica noticia de sus nuevas vacaciones de 3 días, resulta que todo salió como esperaban y como recompensa le dieron unos merecidos días de descanso, nos tomamos la tarde para compartir, fuimos a cenar, miramos películas en la televisión y me conto todo lo interesante de su viaje, incluso este hombre que conoció y que al parecer realmente le llama la atención.

Ahora mismo mi preciosa madre esta gritando desde la cocina porque esta apurada y nerviosa pues resulta que un mensaje nocturno le decía que hoy sería un día de cita por lo que saldrá a realizar compras y arreglarse para esta noche, yo mientras tanto termino de organizar mi maletín con la libreta de la universidad y un lapicero lleno de bolígrafos y grafitos, todo esto para apenas salgo de la casa Victoriana -así he decidido llamar a la inmensa casa blanca de los Giacondi- poder asistir a clases, no quiero seguir atrasándome en las materias.

-Mamá ¿has visto mi abrigo blanco?- le pregunto mientras coloco mi bolso en el suelo a un costado del comedor.

-Me parece que lo deje colgado en la lavandería- responde

Voy por el abrigo y de regreso me encargo de guardar en un recipiente con tapa algunas tortitas que preparo mi madre para ofrecerle a la pequeña Essi.

-Mami, ya me iré le prometí a Alessia que llegaría temprano- le digo besando su mejilla y despidiéndome

-Quiero conocer a esa niña, no haces más que hablar bien de ella.

-Te encantara, es muy linda y no solo hablo de su físico realmente es una niña maravillosa.

-Me da gusto que te haga feliz estar cerca de ella- comenta mi madre.

Estoy terminando de colocar el código de la puerta principal cuando la misma se abre sola.

-Buen día Diana- Saluda el sr. Marcello

-¿Cómo amanece usted?-le pregunto

-Excelente, me siento feliz- contesta

Le regalo una sonrisa y él me hace un ademan para invitarme a pasar.

Entro a la cocina y veo a una enfurruñada niña discutiendo con su padre en medio la habitación, ambos sentados en la barra de desayunador.

-Alessia desayuna, no te lo voy a repetir- le exige Marco

Ella solo lo ignora y se cruza de brazos.

-¿Dígame ya había pasado por la cocina antes de responderme que amanecía feliz?- le comento en voz muy baja al sr. Marcello.

-Sí, de hecho me tomaste por sorpresa mientras huía de esta batalla campal- alega carcajeándose.

En ese momento la pequeña que estaba de espalda a nosotros se percata de nuestra presencia y se levanta de la silla corriendo donde mi.

-¡Diana!- grita cantarina mientras me abrasa las piernas.