Resulta que sin saberlo, Marco me facilito el atuendo para mí de graduación, bajo la toga azul marino y la banda de la universidad, permanecía impoluto el vestido blanco que nunca pensé usaría.
Es maravilloso, mi mamá quedo alucinada cuando me miro antes de salir de casa en ese elegante pero delicado entramado de piedras y encaje. Fabricio como padre abnegado, ha tomado la costumbre de llamarme hija y ha tenido un leve ataque de celos cuando uno de mis compañeros ha dedicado miradas que rebasan lo sugestivas, justo antes de colocarme la toga en la entrada de la universidad, su reacción fue graciosa y me sentí extrañamente feliz de tener esa compenetración con él, de que nuestra relación mejorara al punto que considerarlo una figura paterna, alguien en quien apoyarme pues me cae muy bien y tanto como demuestra preocupación por mi también sé que cuidara de mamá mientras yo esté lejos.
Ya dentro del anfiteatro, nos preparamos todos los estudiantes para la entrada de la promoción de la carrera, poco a poco nos vamos colocando en nuestros asiendo y todos escuchamos atentos el discurso del rector, palabras del decano y de algunos profesores, se entregan meritos a diversos estudiantes y se llama al frente a los mejores promedios, momento que es aplaudido por el público.
Una estudiante de música presenta una hermosa canción en chelo y luego el mejor promedio del área de Arquitectura da el discurso de graduandos.
Luego hablan los benefactores y es cuando comentan que serán nombrados los estudiantes ganadores de las becas en el extranjero, escucho mi nombre y me pongo de pie, camino el pasillo al escenario escuchando los vítores de mis compañeros, subo lentamente los escalones que dan a mi destino y posicionándome frente a la mesa directiva encaro al rector que me ofrece el diploma enmarcado en su forro del mismo tono que la toga que porto, ilustrado con la insignia de la universidad y el año lectivo. Lo recibo emocionada por haber logrado llegar hasta este punto en mi vida, estrecho la mano del rector y también se me es otorgada una medalla que reza en ella "summa cum laude" y un certificado por formar parte de los ganadores de la Beca de la fundación "Buenasmentes". Dicho esto el fotógrafo del periódico de la universidad solicita que mire hacia el publico para capturar el momento y es cuando veo al final de la sala a una figura que se me hace familiar, pero consciente de lo imposible de la situación sacudo la cabeza para alejar esos pensamientos y evitar entristecer un momento tan importante en mi vida.
La ceremonia se hace sumamente corta, salimos del anfiteatro y en los predios del mismo junto al mini jardín botánico de la universidad mi madre se encarga de hacerme toda una sesión de fotos con mis amigas que también se están graduando hoy, Aarón que llego a mitad de la ceremonia pero que puedo entrar para ver cuando recibía mi diploma y Fabricio que sin duda esta más orgulloso que nadie por ser parte de esto.
Justo terminado de cumplir los caprichos de mi madre, que no cabe de la felicidad en su pellejo, un mensajero de floristería llega a mí y me entrega un ramo de calas - mi flor favorita- envuelta el papel cebolla de color blanco, y con una tarjeta dorada con detalles en blanco, me hace firmar de recibido y me felicita por la graduación. Sin pedir o esperar propina se aleja tranquilo y yo tomo la tarjeta pensativa para leer el emisor de tan hermosa sorpresa.
A ti,
Preciosa, valiente, soñadora,
Creativa, inspiradora, comprometida,
Revolucionaras, tú que cambiaras el mundo
Con tus ideas, que transformaras el caos en
Maravillas.
Felicidades por esta meta lograda.
Con amor.
M.G.
Cierro mis ojos, respiro aguantando el aire y lentamente lo suelto, abro los ojos, miro las flores y las aprieto contra mi pecho, ahora sé, estoy segura que era él.
Sin importar lo que pase, sin importar lo mucho que sufrí en su momento, y aunque no lo vaya a superar en 2 días, 2 meses y no sé si en 2 años. Nunca me arrepentiré de haber intentado y logrado amar a Marco Giacondi.
Tal vez no era el momento, porque no había superado en totalidad a Antonio, tal vez sólo fue la prueba de que en algún lugar, quizás en un tiempo, lograré amar mas allá de los límites que yo misma me he impuesto, podré ser feliz, podre disfrutar y entregarme sin restricción a una persona que me devolverá el cariño y el amor en esa misma intensidad.
Por ahora, sé que soy fuerte, he tenido experiencia que otros ni se imaginarían, he crecido como persona y me siento orgullosa de poder decir que soy enteramente quien quiero ser.
Me enfocare en mis metas, cumpliré todos mis sueños y estaré abierta a las oportunidades que me otorgue el destino. Veré el lado bueno de las cosas y gozaré cada instante como el último.
Construiré cimientos cuya base sea yo. Avanzaré en mi vida, por y para mí.
Para Él, Marco Giacondi, deseo lo mejor, espero que este junto a una persona que lo ame y le muestre las cosas maravillosas de la vida, que sea feliz junto a su familia y que sobre todo Alessia encuentre en esa mujer una figura materna que la llene del cariño más honesto y sincero que pueda alguien regalar.
Hoy puedo decir que tengo todo lo que necesito y que a pesar que hace casi 2 años mi vida cambio por una llamada, sin duda fue solo el inicio para el resto del camino.
-¿Estás bien?- me consulta Aarón mientras me abraza desde la espalda.
-Lo estoy- contesto dedicándole una sonrisa.
-Creo que sería bueno encaminarnos al restaurante ¿te parece irnos ya?- pregunta mientras miramos a mi madre hablando feliz con mis amigas.
-Sí, ya es tiempo de partir- aseguro, refiriéndome no solo a la cena que tendremos, sino partir a este, el camino que he elegido, el que sin duda me brindara nuevas aventuras.
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Ellipsism [BORRADOR] A LA VENTA EN AMAZON
RomanceDiana vital se considera una persona feliz, tenía todo lo necesario para llamarse afortunada, pero una llamada le destruyó, alterando su normalidad, cambiando su vida. Marco Giacondi, un hombre duro, amenazante y egocéntrico, que celosamente guarda...