Al Filo del Descarrio

Capítulo 11

Pasado

Pasado

Dos años atrás

Me encontraba en mi habitación mirando el atardecer como desvanecía el sol por completo dándole un toque melancólico. Recuerdo que Nick en la tarde propuso un plan de escape para vernos, estaba muerta de los nervios no podía pensar en otra cosa ni siquiera en mi exámen de inglés, pero la cosa es...

Cómo podré escapar de mi casa si mis queridos padres están abajo resolviendo unos asuntos de una franquicia con otros empleadores de una empresa extranjera Española, miro determinadamente la pantalla de mi celular chequeando si no tengo un mensaje de parte de él.

Nick:

Estoy afuera😜

Yo:

Y como bajo, si mis padres están en la sala😨

Nick:

Hay alguna ventana cerca de la entrada

Yo:

Si hay pero esta directo al cuarto de mis padres, no serias capaz...

Nick:

Entonces de ahí quiero que te bajes de las escaleras y saltes. Te espero a lado de un árbol.

Golpeo mi cabeza con una mano, será idiota. Salgo del cuarto, camino en puntitas para que nadie me escuchará entro a la habitación, abro las cortinas y despacio comienzo abrir la ventana, veo la escalera puesta me imagino que él la dejo ahí. Comienzo a descender despacio al llegar el último escalón corro con prisa al auto que se encuentra en una esquina del árbol.

—Ahora si a divertirnos— farfulla alegre dando marcha al auto, conduce despacio.

Pasamos por diversas casas, calles que desconocía del pueblo donde habitaba, no sabía con exactitud adonde vamos pero me imaginaba que un lugar desalojado donde se puede aprovechar hacer una fiesta alocada de adolescentes. Detiene el auto en una zona llena de piedras arenosos, desabrochó el cinturón de seguridad bajandome del auto, miro mi rostro en uno de los espejos del auto si estoy apropiada o decente, no veo nada malo.

Caminamos sin decir absolutamente nada pasando entre empujones y uno que otro insulto hasta llegar a la pista de baile, empezamos a bailar al compás de la música.

—Quieres un trago— grita en mi oído para que me escuchara, asiento.

Se aleja buscando las bebidas en los típicos vasos rojos, no presto mucha atención en mi alrededor disfrutando de la noche.

A lo lejos me topo con unos ojos verde azulados tan extraños pero llamativos, mirándome de pies a cabeza, no le tomo importancia alguna.

Desconecte todos mi sentidos al sentir la sensación del ritmo que produce de los altavoces, veo una mano estirada entregandome mi bebida la aceptó gustosa sintiendo un sabor tan raro y desagradablemente fuerte pasando por mi garganta. No protesto y sigo bebiendo acostumbrandome el ardor, bailamos y bailamos hasta rompernos una pierna, nos alejamos sentandonos en el capó de algún auto desconocido cerca de la barra.

—¿Y qué te parece?— pregunta arrastrando las palabras.

—Wujuu! esto es increíble, debemos salir mas seguido— comento euforicamente bebiendo mi quinto vaso.

—Ni creas que será la última vez que salgamos enana, serán muchas más— mirándome con picardía.

Solo río de su estúpido comentario se me queda viendo un buen rato, veo determinadamente a unas personas lanzarse en unos juegos temáticos de agua, deslizándose al llegar al otro lado de un lago.