Al Filo del Descarrio

Epílogo

Tristan

El viento comienza a desordenar mi cabello moviéndose a un lado, siento frío intenta colarse por la tormenta que quiere aparecer en el cielo oscuro de la noche, la brisa de la lluvia comienza a golpear en mi piel, mojando el cuerpo inconscientemente, alzó las manos con tal de recibir contacto de alguna gota de lluvia. Ingresó nuevamente en este espacio y silencioso lugar, no he comido nada solo un vaso de café el cual me iba ayudar a calmar los nervios, no debería preocuparme, sin embargo el miedo está ahí, atemorizando sin piedad.

Lágrimas saladas comienza a salir de a poco, vuelvo a recordar como Rose caía de esa altura del acantilado donde la a llevado Blake. En un punto de mi vulnerabilidad sentí la suma culpabilidad por no haber hecho nada ni lo suficiente en protegerla, ese era mi deber como pareja en cuidarla fuera lo que fuera. Cabizbajo miro el piso blanco reluciente del pasillo del hospital, he pasado más de 3 horas sentadas en estos incómodos asientos, lo único que puedo hacer es esperar hasta que avise el doctor si está estable.

Cuando hice el llamado a Nick, Blake afortunadamente falleció por el último disparo que le puse, fue lo suficientemente profundo que terminó de sangrado por la falta de ayuda, quien lo ayudaría a un tipo tan cínico. Capturaron los infiltrados conocidos incluso uno de ellos era Alex, no me sorprende que esté en esos rumbos. Nunca contraje un lazo de amistad ni mucho menos compañerismo, irradiaba ese aura de maldad. Con eso los oficiales tuvieron que interrogarme durante las horas de espera, obtuvieron lo necesario, limpiando mi nombre y las razones de porque lo dispare, simplemente fue defensa personal. De suerte pudieron limpiar el nombre James aunque deba confesar las cosas que tenía planeado en los otros estados.

Niego la cabeza sacudiendo tratando de olvidar lo que pasó, aún no puedo dejar de sentir desorientado al saber sobre la verdad que me a contado. Lo que sí presencié fue que Nick trabaja encubierto como policía, un buen trabajo por ser cierto. Quién diría que una persona tan joven tendría esas habilidades. En cierto modo siento que todo esto pasó tan rápido, me preocupa que Rose tenga algún problema aparte. Debo tranquilizarme y sacar esas absurdas ideas que solo hacen preocuparme más de lo debido. Las chicas y Mark estuvieron unos momentos acompañándome, se fueron a buscar ropa y comida. Aún tengo esa suciedad impregnada en mi piel y la ropa mojada de la lluvia el cual no me ayuda mucho porque podría tener un leve resfriado.

Pasos resuenan llamando mi atención, alzó la mirada encontrándose con el doctor caminando donde me encontraba sentado. Me levanto acercándome a él cortando la poca distancia.

—¿Dime doctor como se encuentra?.

Preguntó impaciente por saber. Pestañea y mira a través de su portafolio.

—La señorita Rose está estable, solo tiene unas heridas profundas y fracturas en su pie, especialmente en el cráneo. Lo que demuestra que ella está débil en estos momentos.

Menciona viendo de reojo el portafolio.

—Lo que si esta fuera de peligro, sin embargo ella está en un estado vegetativo persistente en el cual es incapaz de moverse o responder a su entorno tememos que si no despierta se considera directamente que se a quedado en coma

Aguanto la respiración poniendo mis manos hacia mí cabeza, despeinado sin querer mi cabello. Joder, no puede ser.

—¿Puedo ir a verla?.

Preguntó susurrando.

—Si, la han trasladado a la habitación n°235. Solo tienes 10 minutos, las horas de visitas están restringidas con la paciente.

—Gracias.

—Que tenga buen día.

Se despide yendo a hacer sus labores. Corro a la habitación donde me indicó hace unos segundos el doc. Colocó la mano en la manija de la puerta, abro despacio dejando escapar un suspiro al verla dormida en esa camilla, lo que me encoje el corazón es ver muchas máquinas conectadas en su cuerpo. Camino intentando no hacer ruido alguno, empujó la silla acercándome más a ella.